Capitulo 28: Buscando la Cinta Perdida

4.3K 125 13
                                    

Cerré los puños con ira, me la había jugado. ¡Joder! ¿Cómo podía ser? Cuando le dije en la sala que vi la cinta con razón supo que le mentía. Por eso se burlo. Empecé a dar vueltas como un poseso por toda suit, poniendo patas arriba todo. Al final cansado y mareado después de casi dos horas de búsqueda me senté en el sofá exhausto. No sabía que buscar. Resople con pesar y entonces la bombillita se me encendió. De un salto fui a buscar al único sitio de la suit donde no mire porque no lo vi importante, la terraza. La luz automática me cegó y tuve que parpadear. La vista del impresionante océano dejo paso al mobiliario, una mesa de mimbre tallada con preciosos dibujos junto con sillas del mismo material y al final una rinconera de color chocolate con cajones. Los abrí con desesperación y fue en el último en donde encontré un sobre grande de color marrón claro. Corrí a la habitación con una tonta sonrisa de satisfacción que se me borro cuando vi lo que contenía. Una carta…

Querido Ian:

Si has encontrado esta carta es que no eres tan tonto como pensaba y porque estas ansioso por descubrir dónde está la famosa cinta. Bien, todavía te queda una última cosa antes de dártela. Debes de buscarla por la parte de recepción, te prometo que esa es la última prueba que debes pasar, la encontraras,  pero no lo tendrás fácil ya que a los de seguridad “alguien” les ha avisado de que hay un mafioso que rondará por allí buscando una mercancía robada. Creo que te puedes imaginar la de seguridad que tiene que haber…junto con perros detectores de droga…un consejo Ian, no te acerques al armario. Ahí te lo dejo caer. ¡Buena suerte! Nos vemos cielo.

En ese momento rompí la carta en mil cachitos. Apreté mis manos en puños tan fuertes que me hice daño, esta me la pagaría la rubia oxigenada. Lo juro. Como un loco fui al armario –De nuevo –Pero no encontré nada hasta que me dio por abrir mi maleta. ¡Hostia! ¡DROGA! Gramos y gramos de droga. La escondí como pude si alguno de los policías lo descubrían estaba muerto. Fui al baño y limpie bien mis manos y mi ropa ya que el olor se queda impregnado. En ese momento maldije no tener a mis hombres de confianza para que se pudieran deshacer de la droga pero si la tiraba por el váter seria aun mas cantoso así que con un miedo en mi cuerpo que apenas me tenia baje a recepción, porque si la policía descubría la cinta…me asociarían con la muerte de mi padre y me acusarían de mercancía ilegal. ¡Puta Helena! tal y como me aviso todo estaba acordonado con perros de varias razas y tamaños.

Un pastor alemán de color negro como la noche empezó a ladrar en mi dirección en cuanto pise el suelo, por suerte me mezcle con las personas que estaban por allí y dejo sus ladridos. Lo tenía jodido. Con disimulo me senté un sillón y observe todo el panorama. Localice las puertas con 3 policías registrando a los huéspedes mientras que otros 3 estaban en la puerta de la piscina, mientras tanto otros 2 llevaban 4 perros que no paraban de olfatear cada cosa que les parecía rara. Cogí aire con agobio.

-Señor –Alguien me dio un toque en el hombro que me hizo pegar un bote –Lo siento no quería asustarle

Le mire. Era un policía. Mierda y en su mano derecha una correa sujetaba un perro de raza Beagle. Este tenía la lengua fuera pero me miraba con intensidad como si esperara instrucciones de su amo

–Dígame –Dije intentando mostrar una confianza que no tenía. Las manos me sudaban tanto que las tuve que meter en los bolsillos del pantalón

-¿Me podría mostrar su identificación?

-¿Identificación? –Dije sin alterarme –Pues aquí no la tengo.

-La necesito señor para demostrar que usted es de este hotel. Estamos buscando a un delincuente peligroso.

-¿Y tiene sospechas de que sea yo? –Dije. Tonto de mi porque el agente me miró entrecerrando los ojos

-No sé. Eso dígamelo usted señor. Si no me enseña la documentación me va a tener que acompañar a la comisaria para que le tomemos declaración

Un Disparo a mi Corazon 2: Solo Tu (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora