Internado de Vampiros y Hombres Lobo [Libro #1]

Capítulo 12

Luna's Pov.

— ¿todo esto por qué los tenían amenazados? — pregunté con ironía.
— No sabes cómo lo lamentamos, Luna. — dijo Jos.

La historia era simple, la manada de Christian, que era anteriormente mía, habían contactado al clan de Villalpando para atacarme y matarme, sin embargo omitieron que yo era "la elegida"; los chicos se dieron cuenta por si mismos y les dio miedo asesinarme así que solo me molestaban. La cita de hoy era para matarme, sin embargo, no contaban con que fuera con lobos de mi manada.
Si el clan no hacía lo que pedían, podían matar a todas su familias, ellos se asustaron y no tuvieron de otra.

— Supongo que los perdono, pero, ¿quién es Destructor? — pregunté con intriga.
— Eso no nos toca respondértelo. — dijo Villalpando.
— Está bien, no se preocupen. — respondí con una mueca.
— ¿te quedarás en el internado? — preguntó Fredie.
— Necesito saber que puedo hacer con mi raza, en el otro internado tengo que limitarme, siento que aquí no. Así que si. — sonreí.
— Bien, nosotros también nos quedaremos. Esperamos poder llevarnos mejor. — sonrieron.
—Si, claro. — sonreí. Nos despedimos y ellos se fueron. Los chicos llegaron casi al instante.
— No necesitas decirnos nada, lo escuchamos todo. — dijo de pronto Christopher.
— ¿no pueden dejarme sola ni siquiera dos minutos? — pregunté. Ellos negaron

José se acercó a nosotros, preguntó cómo nos estaba yendo y si el lugar nos estaba gustando, respondimos que si.

— Excelente noticia y les tengo una mejor. — sonrió —. Tanto el director de su internado como los padres de Luna han aceptado que estudien aquí. Así que, los espero mañana para poder mostrarles la escuela y explicarles cómo se trabaja.

Sonreí al escuchar la noticia, agradecimos y salimos de ahí. A excepción de Joel y los otros; ya que ellos estudiaban ahí.

Acompañe a James y Kendall a la cabaña, le darían la noticia a Logan y Carlos, sin embargo, yo me despedí ya que tenía que hacer maletas, pasar por mis documentos y llamar a mis padres.

El bosque no lucia tenebroso, es decir, antes me sentía insegura porque no sabía de lo que era capaz y si la yo de antes estuviera caminando sola y de noche por el bosque se hubiera muerto del miedo; ahora se quien soy y de lo que soy capaz y me hace sentir genial.

Es increíble como el destino cambia tu rumbo.

Cuando llegue al internado no había nadie, estaba totalmente solo y la única luz que había era la de las linternas que había en cada esquina de cada edificio. Me dirigí hasta mi habitación, fueron varias escaleras las que tuve que subir ya que no quería tomar el elevador.

Cuando llegue lo primero que hice fue llamar a mis padres, les agradecí por darme el permiso de cambiarme de instituto y hablé un rato con mis hermanos, después de un rato colgué y me puse a ordenar mis cosas.

Mañana empezaría un nuevo comienzo para mi.

(...)

— Es la última caja, ¿seguro que no necesitas ayuda? — pregunté hacía James, el cual me ayudaba con la mudanza, hemos hecho cerca de tres viajes y por fin terminamos con la última y más pesada caja.
— Está bien, no te preocupes. — sonrió.
— Me siento mal porque no me has dejado cargar absolutamente nada. — reclame.
— Es porque tu deberías estar en tu nuevo dormitorio, desempacando todas tus cosas y no aquí conmigo. Además no veo que es lo que tiene de pesada esta caja, ser una criatura sobrenatural tiene ventajas, Luna. — negué riendo y cerré la puerta de la habitación; ya que ya no era mía.