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Gabriel 
He despertado temprano, después de salir a correr a los alrededores del castillo me siento más relajado, es bastante difícil sobrellevar esto, he tratado de hacerlo pero el TLP una afección difícil, más cuando he decidido no llevar terapias.

Entro por la parte de la cocina, aún extraño a mi nana, ella era la que me preparaba el desayuno, la que me contaba historias, ella era como una madre para mí, ella era un ser especial, aún no he decidido que haré con toda esa familia, pero acabaré con ellos, hasta el último de su descendencia terminará.

- Buenos días su alteza - dice Caro mientras hace una reverencia

- Buenos días Caro ¿Ya está el desayuno?

- Sí, sí excelencia ya está preparado todo

- Muy bien - estoy a punto de irme - ¡Ah! Y una cosa más, partir de hoy si tengo que cenar en el estudio Elizabeth será la que me lleve la comida

- Sí Señor como usted ordene

Caro agacha la mirada y salgo de la cocina, estar en ese lugar es una rara costumbre mía, mi parte me regañaba por hacerlo, pero era la única forma de ver a mi nana.

Llego a mi habitación, comienzo a quitarme la ropa, necesito un baño, me apresuro a prepararme, el agua hace que mis músculos de relajen, comienzo a pensar en ella.

En sus ojos, en su sonrisa, en su cabello, en su forma de hablar, ella me gusta.

Elizabeth

Me he levantado temprano, desde que Dalí me ga mostrado la biblioteca mi único lugar favorito es ese, es mi espacio, es el lugar en donde no pienso en más, en dónde me dedico a leer historias de amor y felicidad, todos terminamos con un final feliz.

Al menos en la historia todos son felices, a pesar de todo me ha costado adaptarme, mi madre no está más y la extraño,  esta sensación de culpa no me deja en paz, cada noche vienen esos recuerdos a mi, despierto llorando y pidiendo perdón. 

- Elizabeth, hasta que te encuentro 

Volteo y es Milly, le doy una sonrisa vacía y me acerco a ella 

- Pues aquí estoy, para ¿ qué me necesitas? 

- ¿Cómo te puede gustar la biblioteca?  

-  No lo sé, libros es lo único que conozco 

- Me imagino, igual necesito ayuda con mi closet 

- Claro, te ayudaré 

- Gracias, iré de viaje y traeré cosas nuevas, desecharé lo viejo 

- Eso es bueno, es muy bueno dejar lo viejo atrás y ver hacia lo nuevo 

- Lo sé, es por eso que traeré cositas nuevas, entre ellas un bebé 

- No, no debería, eso no sería bueno para una princesa como usted 

- Tranquila Eli, soy virgen al igual que tú 

- ¿ Te burlas de mi condición? 

- Sí, de hecho sí, no entiendo como puedes no tener vida sexual, es lo mejor de la vida, te estás perdiendo de mucho mi amiga 

- No me es indispensable para mi además aun tengo mucho tiempo para hacerlo

- Claro, nunca es tarde ¿Qué edad tienes? 

- Te propongo un juego te diré que tengo 30 al igual que tu hermano

- ¿Y luego? 

- Cada vez que me preguntes disminuirá hasta que llegues a mi edad

La Ultima VirgenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora