Sábado 23 de noviembre del 2013.
Sentada en la rama de un árbol observo el bello atardecer, los colores del cielo son variaciones del fucsia...creo.
Por precaución se han suspendido las clases en la universidad, en esta semana me la he pesado en casa solo con mis padres y algunas tardes la he pasado junto a Adrick.
No he sabido de nadie más...
-Niobe bájate de ahí, te caerás.- siento como si esto ya lo hubiese vivido antes...Deja vú- además tu madre te está llamando.
No le respondo y sigo observando el atardecer tranquilamente.
-¡Niobe! No me ignores
Esto es muy extraño, demasiado extraño. Siento una punzada en mi sien izquierda que se extiende provocándome aún más dolor, quiero dormir... ¿porque todo a mí alrededor está girando?
¿En qué momento perdí el equilibrio?
-¡Niobe!- escucho gritar asustado Adrick antes de cerrar los ojos.
Despierto al sentir caer en algo blando, miro hacia todos lados pero no encuentro a Adrick.
-Estoy abajo- he caído sobre Adrick.
-Perdóname- me disculpo aun sorprendida por lo que acaba de ocurrir.
-Si claro, pero por favor levántate de una vez.- dice enojado, de inmediato hago lo que dice- estoy seguro que mañana tendré un fuerte dolor de espalda. ¿Te hiciste daño?- no me había dado cuenta de la cercanía de nuestros rostros.
-Estoy bien.
-Es bueno saberlo- asiente mirándome aliviado- ahora ¡¡¿en que demon*** estabas pensando?!! ¡Te pudiste hacer algún daño!
-Yo...
-¡Oye!- volteo hacia la entrada de rejas metálicas observando entrar a Lakshmi completamente enojada- ¡¿Quién te crees tú para gritarle a mi amiga?!- no llegaba sola, Ian la acompañaba quien sonríe al verme.
-Supongo que son tus amigos Niobe, mejor te dejo no quiero juntarme con este tipo de gente.- Lakshmi tiene el rostro lleno de indignación- no olvides de tu madre.- Adrick se retira dirigiéndose hacia el exterior de mi casa pasando por el lado izquierdo de Lakshmi quien le saca la lengua molesta.
-¿Lakshmi?
-Niobe- me abraza efusivamente junto a Ian, se disculpan una y otra vez el no haber venido antes ya que aún trataban de asimilar lo que habían visto de mí.
Después del abrazo los invite algo de tomar, prefirieron cocinar lasaña para mí pero terminaron haciendo un desastre en la cocina.
-No está mal, me gusta- la verdad no me gusta tanto pero después de todo el esfuerzo que hicieron para hacer esto para mí...no podría decirle algo negativo con respecto al gusto de su sazón.
-¿Qué ocurre Niobe?- pregunta Ian preocupado- oh no puede ser, es por la comida ¿verdad? Ya empezó el dolor de estómago, Lakshmi trae las pastillas.
-No, no es por eso...es otro asunto- digo pensativa.
-Es por Uziel ¿no?- me sorprendo al escuchar eso de Ian, se supone que él no lo sabía.
-¿Cómo...
-Por favor Niobe, cualquiera que no estuviera ciego se daría cuenta de que están enamorados.-dice mirándome burlonamente- pero tienes que saber que no estoy de acuerdo con esa relación. Él tiene su entorno de personas que pueden hacerte daño.
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Esta es la historia de Niobe
AcakNiobe era diferente a las demás niñas de su edad, no era de socializar ni de jugar a las muñecas, cuando creció tampoco era de estarse maquillando ni hablar de chicos. Veía el mundo de una manera diferente y única, era feliz aunque no lo demostrara...