Los Nuevos Jinetes // COMPLETA

2. Solo son unos ladrones

Central Park
 La multitud gritaba cada vez que Adam hacia una nueva burbuja con sus manos. Ya era el tiempo de hacer las últimas burbujas y que Hayden y Ann se metieran en ellas.

—Ean — lo llamó — ayúdame, amigo.

Ean se puso su lado, listo para hacer burbujas con las manos. ¿Cómo mejoraron este truco? Fácil, Josh pensó que hacer que dos chicas volaran por los aires en burbujas no era suficiente, así que quiere que los dos chicos también lo hagan, haciendo reventar su burbuja mucho antes que la de ellas.

—Uno — contaron juntos. — dos...tres.

Hicieron las burbujas, Ann y Hayden corrieron hacia ellas y lograron estar dentro de las burbujas antes de que comenzaran a elevarse. Rápido Ean y Adam hicieron otras burbujas y se metieron en ellas. Los cuatro se elevaron por un tiempo, haciendo piruetas por los aires.

—Miren esto — dijo Jack señalando la pantalla de su celular — eso si es mejorar un truco.

Las personas aplaudían y gritaban sus nombres. La mayoría asombradas porque pudieron mejorar mucho el truco original.

Adam espero un poco más para poder reventar la burbuja y caer en el pasto o en las hojas. Ean sin pensarlo dos veces lo hizo y de acuerdo al plan, cayó en algunas hojas barridas de árboles, era otoño. Adam hizo lo mismo y los dos corrieron hacia donde estaban Ann y Hayden.

—No creo que esto lo pudieran hacer los cuatro jinetes originales ¿O sí? — pregunto Adam. La gente como respuesta grito.

—Merritt es un poco viejo para esto. — se burló Ean. — Y Jack tal vez muera de nuevo.

— ¡Oye! — le gritaron al celular Merritt y Jack.

—No me sorprendería que Lula fuera la única que lograra hacer eso. Y tal vez Atlas.

—Ja, deja de parlotear o mataras a mi hermana. — aconsejo Adam.

Las burbujas de las chicas se rompieron cerca del escenario y los chicos corrieron a atraparlas. Ean llego a tiempo para que Hayden no se lastimara.

—Deberías adelgazar. — ella rió mientras Ean la colocaba en el escenario suavemente daba la vuelta para subir por las escaleras.

Adam atrapo a Ann y subió las escaleras del escenario con ella todavía en brazos. El público gritaba más fuerte.

Que bien se sentía. Todos les dedicaban una sonrisa y ellos se las devolvían.

—Chicos — sonó la voz de Josh en sus auriculares. — Salgan de allí.

Los cuatro miraron hacia atrás preocupados.

— ¿No me escucharon? Salgan de allí, la policía está en camino desde hace diez minutos.

Ann vio a lo lejos a personas uniformadas, le toco el hombro a Hayden y le señalo enfrente a lo que ella vio a... ¿Daniel Atlas? No, no podía ser Daniel Atlas.

Los cuatro chicos se colocaron en los cuatro puntos indicados por Josh, listos para marcharse, pero nadie dijo nada.

—Chicos, solo despídanse y vámonos — los apresuro Josh.

—Aún no, Josh — susurro Adam. — solo un poco más.

—FBI — gritaron. — no se muevan.

—Listo — susurro Adam. Su micrófono se abrió de nuevo. — ¡Somos los cuatro jinetes!

—Buenas...

—Noches. — Ean completo la frase de Hayden mientras el piso en donde estaban parados descendía.