Daímonas

Daímonas 4

  Aien: ¿Que ocurrió?
Mamá: Hija, ¿estas bien?
Aien: Si...
Papá: Te encontraron desmayada en el parque
Aien: Volví a desmayarme, entonces no fue un sueño
Mamá: Hija, creo que deberíamos volver a ver un médico
Aien: Quiero estar sola, por favor
Mamá: Esta bien
Asi que es verdad, pero, ¿es un ángel ahora?
Mamá: Aien, tienes visita
Aien: Lúh, ¿que haces aquí?

Lúh era el pequeño hermano de Leo, eran muy unidos, hace mucho que no le veía, lloro mucho durante el funeral de su hermano solo tiene 5 años debió ser muy duro para el.

Lúh: Aien, tu querías mucho a mi hermano mayor, ¿verdad?
Aien: Si, así es
Lúh: Entonces, ¿puedo contarte un secreto?
Aien: Si, claro
Lúh: El otro día vi a mi hermano sentado en el árbol del jardín, mientras jugaba antes de cenar
Aien: ¿Estas seguro?
Lúh: Si, era mi hermano mayor, pero ahora se convirtió en un ángel
Aien: ¿Alguien mas lo vio?
Lúh: No, solo Lúh
Aien: Entiendo
Lúh: Aien, ¿tu me crees verdad?
Aien: Si, yo te creo, yo igual vi a tu hermano el otro día
Lúh: Que bien, mi hermano se convirtió en un ángel ahora

Si Lúh también le vio, eso quiere decir que no estoy loca, Leo realmente volvió, pero, aun hay muchas cosas que no comprendo.

Era realmente el, pero, no había ido donde su familia y parecía desconcertado con respecto a todo lo que se tratase de el, el color de sus ojos cambio, su piel es aun mas pálida, su espalda tiene alas negras y unos cuernos que parecen estar rotos, como un demonio.

Si pudiese hablar con el tendría mas respuestas, pero aparece cuando el quiere,¿ como puedo llegar a el?, decidí ir al parque de nuevo, tal ves si iba ahí nuevamente volvería a verle, pero lo que vi no fue realmente lo que buscaba ver, luego de unos 5 minutos en el parque un hombre similar a como luce Leo ahora se paro frente a mi, el era diferente, su pura presencia daba mucho miedo, no podía dejar de mirarle.

Aien: ¿Quien eres?

Me miraba atentamente sin decir palabra alguna, mi sangre se sentía como hielo derritiéndose, a lo que continué

Aien: ¿Que es lo quieres?

Se acercó a mi, solo un metro nos separaba, no podía mover mi cuerpo y el tiempo parecía detenerse, a lo que respondió, ser Aaron

Aien: Eres lo mismo que Leo?
Aaron: Humana, porque insistes tanto en llamar a ese sujeto?
Aien: Eso no es de tu incumbencia
Aaron: El ya no es como tu, ya no pertenece a tu raza
Aien: Se que ya no es el antiguo Leo, pero sigue siendo Leo de todas formas
Aaron: Puedes ver estos cuernos? y estas alas?
Aien: Por su puesto
Aaron: Solo vine a advertirte que dejes de buscarle, el murió y dejo de ser humano, el perdió todas sus memorias, ahora es un ángel errante
Aien: Aunque me digas todo eso, no dejare de buscarle, aun tengo muchas cosas que decirle
Aaron: Es por eso que detesto a los humanos
Leo: Aaron, déjala ir
Aaron: ¿Que haces aquí?
Leo: Eso no importa, solo vete
Aien: Leo...
Aaron: Parece que aún no entienden, si pasas mucho tiempo junto a ella vendrán mas a matarle
Aien: Eso no me importa
Leo: porque?
Aaron: Humana, ¿eres estúpida?
Aien: no, pero no tengo nada que perder, el dio su vida por mi y yo no temo dar la mia por el
Aaron: Esta bien los dejare solos por ahora
Leo: ¿porque estas aquí de nuevo?
Aien: Este lugar es mi todo y a la vez mi perdida
Leo: Aquí morí
Aien: Me odias?
Leo: No, no recuerdo mucho de mi vida antes de ser esto, pero se que morí feliz
Aien: Leo, yo tengo muchas cosas que decirte
Leo: Lo que dijo Aaron es verdad si paso mucho tiempo junto a ti vendrán mas a matarte, no todos los humanos pueden vernos y tu eres la causa de mi muerte
Aien: No me importa morir si puedo pasar tiempo junto a ti
Leo: No te acerques a mi
Aien: Quiero sentir tu calor una vez mas

Todo era alusinantemente doloroso, el no había echo nada malo, entonces, porque había perdido su vida, sus recuerdos, todo?, sentía como me quebraba en mil pedazos, me acerque a el lo mas que pude y puse mi mano sobre su pecho, entonces todo se derrumbo, sentí en mi cuerpo una tristeza infinita que recorría cada parte de mi cuerpo, era su dolor, pude sentir el vació que el llevaba consigo, le mire y comencé a llorar, me miro con la mirada perdida mientras una gota de sangre caía de su ojo

Leo: Ve a casa, debo irme
Aien: Tu ojo esta sangrando
Leo: Ya no puedo llorar, solo sangro
Aien: ... dios soy tan egoísta, yo te hizo todo esto a ti y aun así sigo persiguiéndote
Leo: ...
Aien: Debería solo desaparecer
Leo: Solo ve a casa

Mi hermoso y amable Leo ahora era un ser totalmente diferente por mi culpa, siquiera podía llorar y yo egoistamente seguía intentando tenerle cerca, soy repugnante, solo debería morir

Leo: Que fue lo que ocurrió?... me toco y pude ver el momento de mi muerte, era muy doloroso, pero no mas que ahora, pero en el fondo estaba muy feliz y aliviado de que nada le hubiese pasado