Daímonas

Daímonas 31

  Serverus: ¿Señor?
Leo: Todo esta bien
Serverus: ¿Acepto la propuesta de matrimonio?
Leo: No, pero accedió a que seamos novios mientras
Serverus: Felicidades amo
Leo: Gracias

Para mi Leo es una apuesta de vida, es un todo por el todo, luego de creer que le había perdido irremediablemente para siempre, al devolvérmelo Dios no tuve mas tiempo de titubear, ya no podía observarle de lejos, si esta vez no conseguía su atención, si no podía meterme siquiera en sus pensamientos era el fin, pero ¿como podía ser el fin de algo que era mi mundo entero?, no, sin duda alguna Leo era la gran apuesta de mi vida, y hoy siento que gane la mitad de esa apuesta, solo uno de mis pies esta colgando del acantilado.

Jamas fui sincero conmigo mismo no podía admitir que mi mundo entero giraba en torno a una niña a la cual jamas siquiera le había hablado, estaba completamente enamorado de una persona que siquiera sabia de mi existencia, ¿era eso siquiera posible?, era algo que me preguntaba noche tras noche antes de dormir, como podía estar completamente perdido en esa niña que no sabia de mi existencia y yo no podía sacármela del corazón y hoy mas de 10 años después al fin aquella niña que vi crecer y transformarse en la mujer mas hermosa que pisa esta tierra, por fin es mía, por fin nuestros corazones conectaron de la manera correcta, estaba tan asustado cada vez que ella gritaba mi nombre, creía que iba a volverme loco cada vez que ella decía que me amaba, aquella vez incluso tras ser apuñalado y estar muriendo solo podía sentirme nervioso por estar entre sus brazos aun luego de morir todo lo que estaba en mi cabeza era ella, ella y solo ella, la dueña de toda mi existencia.

Aien: No puedo dormir
Leo: No puedo dormir
Aien: Dios mi corazón late tan deprisa
Leo: Demonios mi corazón late tan deprisa
Aien: Siento que puedo morir de felicidad
Leo: Siento que puedo morir de felicidad

Esa fue la noche mas feliz de mi vida, me costo mucho dormirme y como nunca Leo estaba comiendo mi cuerpo y mente con sus recuerdos y su presencia era abrumadora pero era tan feliz

Mamá: Hija levántate...
Aien: Mamá desayunare en casa de Leo, adios
Mamá: ¿Tan temprano te vas?
Aien: Si, no puedo esperar para verle
Mamá: Vale, pero cuídate
Aien: Si
Serverus: Señor su desayuno ya estará listo
Leo: Guárdalo para mas tarde, voy saliendo
Serverus: ¿Amo donde va?
Leo: A ver a Aien
Serverus: Amo aun es muy temprano, la señorita probablemente esta durmiendo aun
Leo: No importa, volveré por la tarde
Serverus: Como desee amo
Aien: Correré así llegare mas rápido
Aien: No puedo esperar mas para verle
Leo: Correré ya que no puedo volar

Ese sentimiento tan perfecto cuando dos corazones se conectan, eso para mi es el paraíso, la paz mundial, eso es estar realmente vivo, esa sensación que te hace moverte aun estando muerto, ese amor que es mas grande que cualquier cosa en el universo entero

Aien: ¿Leo?
Leo: Creo que estoy alucinando gracias a esta euforia
Aien: ¡Leo!
Leo: ¡Aien!
Aien: Al fin te veo
Leo: Mi amor, por fin pude llegar a ti
Aien: Leo... ¿como me dijiste?
Leo: Ah, yo...
Aien: Leo, ¡te amo!
Leo: Y yo te amo a ti
Aien: No podía estar ni un segundo mas sin ti
Leo: Yo tampoco a cada segundo que pasaba sentía que se me iba la vida extrañándote
Aien: Por fin nuestros latidos están en armonía
Leo: Al fin puedo sostenerte entre mis brazos y confirmar que no es un sueño