Daímonas

Daímonas: Angelus reprobi

Leo: Estuve investigando durante algún tiempo sobre esta isla, ya que escuche que aquí existe una planta, que estimula la fertilidad de los seres mágicos, luego de mucho trabajo, descubrí que esa planta esta en el fondo de este océano, en un castillo mágico

Aie: ¿Un castillo mágico?

Leo: Así es, se que lo sabes, pero ángeles y demonios, no somos los únicos seres mágicos en este mundo

Aien: Lo se, lo pude comprobar cuando estuve tanto en el cielo como en el inframundo

Leo: Así es, dicen que ese castillo es el hogar de una criatura mágica sumamente poderosa, que controla los mares, pero aunque investigue tanto en humanos como en seres sobre naturales, nadie sabe que clase de ser es, ni a que especie pertenece, tampoco nadie se atreve a acercarse a sus terrenos, solo se conoce como una criatura temible, que destruye todo a su paso cuando se enoja 

Aien: ¿El tiene esa planta que necesito?

Leo: Si

Aien: ¿Que haremos?

Leo: No te preocupes, la obtendré sin importar que

Aien: Cariño...

Leo: Tranquila, todo estará bien

-: ¿Que ocurre con ese sueño?... hace mucho tiempo no era capas de soñar y cuando por fin lo hago, tenia que ser algo así... debe ser porque desde hace unos días siento una presencia muy relajante, pero sigue oliendo como humano, debería subir a la superficie a ver que es lo que a llegado a mis tierras.

Serverus: Amos, la cena esta lista

Aien: Serverus, ¿porque estas aquí?

Serverus: Es mi deber estar aquí

Aien: ¿Y que ocurrió con tus vacaciones?

Serverus: Señora prepare su comida favorita

Aien: Serverus...

Serverus: My lady...

Aien: Tal ves, por si acaso, ¿volviste a arruinar tus vacaciones?

Serverus: No se a que se refiere My lady

Aien: Eres un caso perdido

Serverus: Lo siento mucho

Aien: Esta bien no te preocupes

Leo: Aien

Aien: ¿Que ocurre?

Leo: Debo ir a la isla vecina para recoger algunas cosas y a los niños para el orfanato

Aien: ¿Quieres que te acompañe?

Leo: No, esta bien, volveré en unos dos días a lo mucho

Aien: Esta bien, pero cuídate, ¿vale?

Leo: Ven acá

Leo últimamente siempre estaba ocupado, pero el por ningún motivo permitía que me sintiese sola, el siempre se aseguraba de dejar tiempo para mi, incluso cuando tenia que salir de viaje el estaba constantemente en contacto conmigo y volvía tan pronto como terminaba sus deberes.

Sus cálidos abrazos y besos, siempre me reconfortaban cuando el tenia que salir de viaje, mi amado esposo, solo llevamos 10 años de casados, lo que para seres inmortales como nosotros es algo así como un mes en tiempo de humanos, así que para nuestros reinos aun no eramos un matrimonio confiable, pero nosotros aunque no sabíamos que nos deparaba el futuro, confiamos ciegamente en el otro, todo estaría bien.

Aien: Serverus, saldré a caminar por la playa

Serverus: ¿Desea que le acompañe?

Aien: No es necesario, no creo que exista un ser en este lado del mundo capas de dañarme, ¿verdad?

Serverus: Ciertamente eso es cierto Lady, pero usted jamas utiliza sus poderes solo vive como si aun fuese un humano

Aien: En mi corazón aun soy un humano, no te preocupes tendré cuidado

Serverus: Si desea algo, solo llámeme

Aien: Ve a descansar un rato

Las vistas del cielo en aquel lugar eran realmente hermosas por la tarde, normalmente las miraba desde sitios altos, pero hoy tenia ganas de caminar por el mar y apreciar esta hermosa vista

-: Ah, es ese olor nuevamente y hoy no se siente el olor a sangre junto con el... si, no pasara nada por echar un vistazo

Aien: Me pregunto que clase de seres mágicos viven en el mar, ¿sirenas? tal ves...

La verdad mi vida era bastante ordinaria a pesar de ser la reina de los cielos, no tenia mucho que hacer, ya que papá se encargaba de casi todo lo que ocurría alla, ni siquiera tenia que preocuparme por mi propio reino demasiado.

Aien: Tal ves si canto un poco, me sienta mejor

-: Una chica...

Aien: Sparkling Angel I believed, you are my savior in my time of need...

-: El coro de los ángeles... pero, ¿porque huele a humano?...

Aien: The smile when you tore me apart...You take my heart...

-: Tampoco puedo ver el deseo en su corazón... ¿quien en esta mujer?...