Daímonas 5

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  Aaron: Esto no es bueno, jefe, ¿debería interceder?

Una semana había pasado desde que le vi por ultima vez, cada día en mi ventana había una nueva pluma, era como si el no me dejase morir, solo vivía esperando mi muerte

Mamá: Hija podemos hablar?
Aien: Claro
Mamá: Tu amabas mucho a Leo?
Aien: porque me preguntas eso?
Mamá: Desde antes que muriera, salias todos los días al patio a la misma hora que el lo hacia, le mirabas por la ventana, cuando murió siquiera pudiste llorar, todas las noches dices su nombre mientras duermes y se que a cada segundo piensas en el y te sientes culpable por su muerte
Aien: Yo le amaba mas que a nada en el mundo, el era muy tímido y no hablaba mucho pero yo se que incluso ahora que esta muerto, me sigue cuidando
Mamá: Yo se que es difícil, pero tienes que dejarlo ir y ser feliz
Aien: No puedo
Mamá: Puedes, el querría que seas feliz, inténtalo
Aien: Lo are

Incluso mi madre podía ver a través de mi, pero habían muchas cosas que no podía decirle, cosas que solo yo sabia y nunca jamas podría decirlas.

Lúh: Hermano volviste
Leo: ...
Lúh: Yo se que ahora eres un ángel y vienes de visita, no te preocupes no le diré a nadie
Leo: Entiendo
Lúh: Hermano, toca el violín un momento por mi
Leo: El violín?
Lúh: Si
Aien: Esa es la canción de Leo
Luh: Hermano mira es Aien desde la otra ventana
Aien: Leo...
Leo: Debo irme
Lúh: Hermano estas peleado con Aien?, porque? tu siempre dijiste que ella era una niña hermosa
Leo: Una niña hermosa...
Aien: Lúh no dejes que se vaya
Lúh: Hermano espera no te vayas aun

Leo sigue volviendo instintivamente, su corazón lo trae de vuelta, porque huye?, vuela muy rápido, no se cuanto mas pueda seguir corriendo, se que se dirige al bosque, no logro verle

Aien: Leo, ¿donde estas?
Aien: Leo...
Sus ojos rojos brillaban entre la oscuridad, pero no daba miedo, ahí estaba el, sentado en un tronco de árbol mirando al vacío, me acerque a el y le dije:
Aien: Leo, ¿estas bien?
Leo: Mi cabeza da vueltas y mi pecho duele
Aien: Quieres que te traiga algo?
Leo: Solo vete, cada vez que estas cerca mi cuerpo se siente caliente y comienzo a sentir dolor
Aien: tu sigues volviendo una y otra y otra noche a mi ventana
Leo: No puedo entenderlo... porque todos los recuerdos que tengo de ti hacen que mi cuerpo se siente calido?
Aien: porque son recuerdos felices
Leo: ¿porque a pesar de todo, sigo cuidando de ti día tras día?,¿ porque?
Aien: Leo...

El tenia tantas o mas preguntas que yo, se veía tan frágil ahí sentado, solo, sufriendo y soportando todo el mismo... debía haber algo que pudiese hacer para ayudarle, me acerque a el y le abrace en ese momento era todo lo que podía hacer  

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