—Solo hay un pequeño problema.
—¿Cuál?
—No quiero ir al colegio.—Dije lentamente para que los chicos entendieran.
—Eso no es problema.— Nathan se encogió de hombros y procedió a ir a la cocina junto a Ian.
—Me niego a ir.—Dije y me cruce de brazos sentándome en el sillón individual.
—Aunque te niegues. Si sigues así vas a perder el año y será peor.—Dijo Cameron tratando de que entrara en razón.
—¿Y para qué quiero ir? No sirve para nada.
Mi fin de semana no fue precisamente hermoso.
Había despertado adolorida en el cuarto de Cameron con todos los chicos.
Se comportaban raros conmigo, raros en exceso.
No recordaba nada después de haberme bañado y acostado en mi cama dispuesta a dormir el día que habíamos salido.
Y para el mal de mis males, no quisieron ir nuevamente al páramo. Había brincando por el balcón con extremo cuidado de no romperme algún hueso, aterrice en la parte trasera de la casa, el único lugar que no tenía ventanales tan altos, a excepción de la parte de las escaleras, de abajo hasta arriba había cristal que te permitía observar hacia afuera apreciando la hermosa vista, pero brinque del lado más alejado de eso. Pero ese no es el caso, me gire a mirar la altura por la cual había brincado con ayuda de una sabana, brinque feliz de haber hecho eso sin colapsar en el intento, pero cuando estaba dispuesta a adentrarme al bosque los chicos aparecieron delante de mi con los brazos cruzados haciendo que borrara la sonrisa que tenia en la cara remplazándola por una cara sin expresión el resto del día.
Y ahora esto.
—Sky.— Me llamo Ian.—¿Me estas escuchando?
—No.—Dije la verdad.
—Pequeña.—Dijo Cameron sentándose en la mesita de centro para verme a la cara.
—Pequeña tu abuela.— Conteste y trate de levantarme de ahí, cosa que no funcionó.
—Oye, más respeto hacia la abuela.
—Como sea. Quiero irme a mi cuarto.
—No hagas berrinche, Sky.
—Yo hago berrinche si quiero hacer berrinche, Ian.
—Si faltamos otro día a la universidad nos van a expulsar.— Nathan interrumpió las miradas acusadoras que nos lanzábamos con Ian.
—No sabía que iban a la universidad.
—Lo dejamos de hacer hace una semana para pasar tiempo contigo.—Lo apoyo Cameron subiendo las escaleras y luego lanzando un par de mochilas que atrapada Ian.
Las lanzo en uno de los sillones y me pregunte si era verdad o no.
Bufé sonoramente y subí a zancadas a mi cuarto arrebatándole la bolsa negra a Matt al empezar las escaleras.
Tuve que cambiar mi adorable pijama por el horrible uniforme que me quedaba grande, até mi largo cabello castaño en una coleta alta y me senté a la orilla de mi cama viendo mis zapatos.
El uniforme no estaba tan feo como lo imaginaba, la camisa era básica en color blanco, la falda era color vino como el suéter a excepción de que esta rayada con lineas blancas de diferentes gruesos que formaban cuadros.
—Pulga.
—¡Voy!— Le grite a Nathan en respuesta a su llamado.
—Se hace tarde.
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Viviendo con Vampiros
VampireNo lo dudes. Existen. Aquí nada volverá a ser lo mismo. "¿Quien diría que ser adoptada traería problemas?" 🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃 1• Viviendo con Vampiros 2• Extraños