Un último grito hizo que me despertara, el golpe que sonó en la puerta taladro mis oídos por lo que me hizo levantarme de una manera rápida provocando que todo en mi se moviera.
Con los ojos entre abiertos trate de ver la hora del pequeño reloj que estaba al lado de mi cama, pero precisamente por ser pequeño no alcance a ver. Ciega.
Me levante del suelo completamente adolorida por haber dormido en el. Quite la liga de mi cabello por que la coleta estaba hecha un desastre y solo hacia que mi cabello largo se enredara, el ruido que hace la camioneta al prender se escuchó, mire el reloj de cerca que marcaba exactamente 6 minutos antes de las 8, la hora en la que se supone entró a clase.
Me apresure a buscar el uniforme de diario porque el de deportes estaba lo suficientemente sucio para volver a llevarlo.
No tarde mucho en bañarme porque realmente no deseaba estar en la casa por la incomoda situación en la que vivía, de hecho, la tina llena de agua me hacia la invitación de ahogarme de una buena vez para acabar con todo.
Alise mi cabello rápidamente con la plancha porque no lo moje según yo para terminar pronto. Me puse la falda, la camisa y los tenis rápidamente y busque entre las bolsas que seguían en el sillón un hermoso gorrito gris que combinaba a la perfección con la sudadera que llevaría.
Bueno, tal vez rojo con gris no quede pero bah.
Tome la mochila del suelo y salí en silencio y rápido del cuarto, todas las puertas desde el pasillo estaban cerradas y probablemente sin nadie adentro. Escuche ruido abajo y baje dando grandes zancadas, Peter estaba en la cocina y entre dudosa. Total, ya me había escuchado y de nada serviría salir por la puerta como si nada.
-Mar hizo el desayuno.- Dijo sin girar a verme, me tendió una bolsa de plástico cuando lo hizo y me dio una media sonrisa.-¿Nos vamos?- Preguntó y salió antes que yo.
Rasque mi cuello y lo seguí sin hacer mucho alboroto.
Me dejo en la parada de autobús porque el también iba tarde para llegar al trabajo por lo que estacionó su auto ahí y me dijo que bajará.
Camine hacia el estacionamiento esperando a que el auto de Peter desapareciera de mi campo de visión para correr nuevamente hacia la parada de autobuses donde solo espere algunos minutos para subir a el primero que me llevaría a la gran tienda comercial que había fuera del pueblo.
Para mi suerte guardaba todo el dinero que me era posible en una pequeña bolsita de peluche donde estaba segura de que tenía el dinero suficiente para ir y venir sin problemas.
Después de más de treinta largos minutos donde tuve que soportar los ronquidos de un señor hasta el fondo y los relatos de una abuelita que se sentó a mi lado baje del autobús dispuesta a caminar, según mis cálculos entre relatos, quince minutos hasta el lugar marcado con la equis.
Un salón de belleza. Ja.
Ya sabia a donde llegar directamente, pasamos por ahí hace algunos días, el lugar era grande y bastante espacioso, tenía mucha gente lo que ayudaba porque me veían mal al tener el uniforme de la escuela, aunque solo vieran la falda.
Espere pacientemente mi turno con una estilista que no dejaba de hablar con cada cabeza que tocaba, la decisión estaba tomada y ahora era un loco momento para arriesgarme, habría una pelea por lo que paso anoche, prefiero no hacer otra por la bobada que haré. Mejor que sean juntas.
-¿Segura que lo quieres hasta los hombros? Mira que el cabello a la cintura te queda bien... Y esta de moda.- Pregunto nuevamente y la mire a través del espejo.-Esta bien. Te quedara genial, y no se diga el color que elegiste.- Siguió hablando y rodé los ojos.
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Viviendo con Vampiros
VampireNo lo dudes. Existen. Aquí nada volverá a ser lo mismo. "¿Quien diría que ser adoptada traería problemas?" 🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃🍃 1• Viviendo con Vampiros 2• Extraños