Viviendo con Vampiros

Capitulo 28

-Sky.- Me llamaron y me removí incómoda en mi lugar. Sentí como soltaban aire despacio junto a mis oídos y trate de ahuyentarlos con mis manos escuchando algunas risas por la acción.

Abrí los ojos pestañeando exageradamente para acostumbrar mis ojos a la luz. Tenia prácticamente mi cabeza encima del pecho de Nathan por lo que me quite de ahí rápido y con cuidado sentándome en la cama y tallando mi cara para despejarme.

-¿Dormiste bien?- Pregunto Matthew, lo mire frunciendo mi frente sin quitar las manos de mi cara, él estaba frente a mi por lo que al verme hacer tal cara soltó una risa que me dejo confundida.

Cerre fuertemente los ojos y los abrí rápido, mire a mi alrededor y seguíamos en la habitación de Nathan donde estaba él, Matt y yo, solté un bufido cansado y salí de la cama.

-¿Todo bien Pulga?-

-Todo bien Nathan.- Conteste sin ganas entrando a mi cuarto.

¿Nuevamente soñé? Maldita sea.

Me tumbe en la cama con la intención de descansar porque a pesar de no haber hecho nada la cabeza me daba vueltas.

-Vamos a cenar.- Mencionó Matt tirándose a mi lado.

-¿Cenar? No era q... Ya olvidalo mejor.- Dije tratando de no revolver las cosas antes de tener las explicaciones.

Ambos bajamos a la cocina pasando obviamente por la sala que ya estaba en orden a excepción del ventanal que seguía roto.

Me senté en aquella silla que había declarado mía, me sentaba al lado de Nathan y Matthew, Ian y Cameron enfrente mientras que Peter y Mar se sentaban en los extremos. Solo que en este momento no había nadie en la mesa, Matt me dio un plato cereales con leche y un pan. Raro pero me gustaba.

-¿Y los demás?- Pregunte juntando los cereales de un color hacia un lado.

-Fueron a comprar no se que cosas para arreglar el ventanal de la sala.- Contestó sentándose después de un rato sopesando sus palabras.

-¿Que paso?- Pregunte soltando la cuchara para verlo.

-No importa...-

-Sí importa.- Interrumpi.- Por favor.-

-Después de el incidente en el hospital, no se cómo, algo bloqueo, por decirlo de alguna manera los pensamientos de la enfermera con la que te dejamos...- Comenzó a decir clavando su mirada hacia la puerta de la cocina.- Cuando veníamos para acá tu no reaccionabas y creímos que era por los no se cuantos litros de sangre que te sacaron, te dejamos en el sillón y fuimos por helado para cuando despertaras... Tú, no tu cuerpo, tú estabas expuesta...-Decía buscando las palabras adecuadas para que yo entendiera.- Saliste literalmente de tú cuerpo, como cuando mueres... Te estabas muriendo, Cameron fue el quien lo impidió con la adrenalina que te puso. Te dejamos en tu cuarto cuando te vimos moverte como gusano... Sentimos la presencia de alguien ajeno al bosque y como idiotas que somos salimos todos a ver de que se trataba, era un clan que tiene generaciones buscándonos, nunca se cansan, ni cuando pierden a los más poderosos que están de su lado, te querían a ti, era obvio que no dejaríamos que te tocaran, mucho menos que se acercaran a la casa donde estabas dormida sin saber que pasaba. Le hablamos al feo lobo cuando te escuchamos gritar y como sus tradiciones lo dictan ayudaron, por ti claro, a nosotros no nos dan ni la hora. Lo demás ya te lo sabes.- Finalizó echándose para atrás.

Asentí con la cabeza comenzando a atar cabos sobre lo que había pasado. Termine de comer y los chicos no llegaron, a petición de Matthew subí nuevamente con Nathan mientras él salia a buscar a los otros dos.

Me quede en el sillón acosando a Nathan con la mirada mientras siguiera dormido. Estaba tan dormido que no se movió cuando tire por accidente un cojín.