Leer Apocalipsis 21:8
¿Morir dos veces?
Nacen niños todos los días, cada hora, cada minuto. En el mundo un bebé nace cada 4,2 segundos (algunos dicen 7 u 8). Pasa siempre, pero no dejamos de asombrarnos. Una mujer está embarazada y su estado de gestación dura normalmente 9 meses. Sabe qué hay dentro de ella y lo que se supone que pase. Sin embargo, siente una gran felicidad cuando nace su bebe. Son de las cosas que pasan una y otra vez, pero no dejamos de maravillarnos.
Otras de las cosas que no nos dejan de asombrar es la muerte. Según unas estadísticas 1 persona muere cada 1,8 segundos en el mundo. Sabemos que la gente muere, pero casi nunca creemos que le pasa a la gente cercana a nosotros. Tampoco sospechamos que nos pasará a nosotros. No importa cuán frecuente esto ocurra, siempre nos turba. No importa que sepamos que la persona está enferma; una vez muere, nos embarga el dolor y el sufrimiento. Cuando es alguien joven, saludable y sobre todo que vimos hace poco, la sorpresa y el escepticismo nos golpean el rostro. Cuando estamos frente a sus cuerpos inertes, los miramos fijamente tratando de convencernos de que realmente están muertos, que se fueron y que no los veremos más (por lo menos de este lado de la vida).
Pero, ¿Qué es la muerte? Muchos creen que muerte significa dejar de existir. Las Sagradas Escrituras enseñan que nuestra alma es inmortal y que no deja de existir. La muerte es, desde el punto de vista bíblico, la separación del cuerpo y el alma. Los dos primeros seres humanos creados por Dios recibieron la advertencia de que si desobedecían a Dios morirían. Su desobediencia introdujo los elementos del sufrimiento y de la muerte a nuestra existencia. El plan original del Creador no era que la humanidad muriera, sino que viviera en comunión eterna con él.
Las Escrituras también hablan de otra muerte. La llaman la segunda muerte y esto es algo de lo que mucha gente no está apercibida. Hay una muerte espiritual y es la separación de nuestro creador. A diferencia de la muerte física, esta segunda muerte es eterna y, al igual que la primera, no existe forma de escaparse de ella.
Cuando Adán y Eva pecaron, continuaron físicamente vivos, pero ya estaban muertos espiritualmente, se habían separado de su creador. Increíblemente, cuando cada ser humano nace, también está muerto. Está separado de su creador y la única forma de que “reviva” es reconciliándose con Dios a través de Jesucristo. Todos moriremos una vez, pero muchos morirán dos veces. ¿Cuántas veces morirás tú?
![](https://img.wattpad.com/cover/7445967-288-k846680.jpg)
ESTÁS LEYENDO
A la orilla del lago
SpiritualitéEsta es una colección de meditaciones, reflexiones, cuestionamientos, preguntas, que han sido escritas como parte de mi experiencia personal con Dios. Ellas reflejan momentos de crecimiento y de fracasos, de gozo y de tristeza, de éxtasis y depresió...