Paul Walker murió, se siente feo. Brian O'conell es parte de mí y le agradezco que le haya dado vida. Que En Paz Descances, Paul. Y que dios te tenga en la gloria, amigo. Lo mereces.
***
— Valerie:
Sus labios se mueven sobre los míos, no doy tiempo a que siga y lo empujo con todas mi fuerzas, el se tambalea y retroceder dos pasos, me acerco y golpeó su mejilla con mi puño.
- Idiota - Mascullo enojada - ¿Que demonios haces? -
El me observa en silencio, traga en seco y me mira, se da cuenta de lo que hizo.
- Yo, lo siento Val - Intenta acercarse - Me deje llevar.. es que.. -
- Es que.. Nada. Logan - Lo interrumpió.
- Val, Por favor. Solo dame la oportunidad - Dejo que se acerque, y toma mis manos entre las suyas.
- Sabes que jamás seremos más que amigos - Le advierto.
- Intentaré que alcance - Sonrie y me siento débil por un momento.
- Ahora.. ¿Me llevas a casa? -
- ¿Segura? Daran la secuela de Crepusculo - Me sonríe con esa sonrisa que podría derretir los polos.
- Te odio, Lerman - Su sonrisa se ensancha.
- Llamaré por pizza - Toma el teléfono inalambrico y llama a servicio a la habitación.
- Ext.. -
- Extra queso, por favor - Si, lo recuerda. Vuelvo a la cama y me acusto esperando que Luna Nueva comience.
— Zayn:
Vuelvo a suspirar y observo a Paul – Repítelo – le suplico, el me observa con ojos entrecerrados, sé que no quiere hacerlo, pero lo hará.
– Tendrás un encuentro con Perrie, esta noche. Una cena, nada más – me sonríe como si eso ayudara.
– ¿Les dijiste lo que quería? –
– Sí, solo unos encuentros y luego se encargaran de decir que la distancia los consumió. – Murmuro.
– Pero, es que no tiene sentido, Paul –
– No, no tiene sentido que hayas vuelto con Valerie mientras aún estabas con Perrie. Tú no eres así, Malik – Me regaña y bajo la mirada.
– Amo a Valerie – confieso.
– Lo sé –
Estaciono la Harley negra y quito mi casco, lo arrastro a mi mano derecha, y con la izquierda buco la llave. El casco de Val reposa sobre el asiento, suspiro. Entro a su casa sintiéndome fatal, se supone que no debo hacer esto. ¿¡Por qué me cuesta tanto ser honesto con ella!? Llevo mi mano derecha a mi cabello y lo tiro hacia atrás, sintiéndolo mojado por la lluvia que cae afuera. Tiro los cascos sobre el sillón y corro escaleras arriba para cambiarme,
Jeans, camiseta marrón oscuro y una chaqueta negra, ato mis converse negras y estoy listo. La lluvia afuera no para y siento mi corazón latir nervioso, no quiero que llegue Valerie, no quiero mentirle en la cara. Ya lo haces – murmura mi subconsciente.
Jodida mierda.
El reloj da las ocho cuarenta, y me levanto del sillón, dejo la Tablet después de guardar mi nuevo grafitti de paint. Marco en mi móvil el número de Paul, este contesta al segundo timbre.