Chrismast Time.

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Valerie:

Dos llamadas perdidas de Doniya solo me obligaron a correr a la ducha, me bañé rápidamente sin darme tiempo a disfrutar de la segunda ducha del día.

Salí dando trompezones y salpicando el suelo por no colocarme una toalla en el pelo.

Sequé mi cuerpo y enrollé esa misma toalla en mi cabello. Con la ropa interior puesta, busqué la ropa que había planeado usar esa noche, dejando de lado el vestido rojo que mamá me había enviado hace unos días.

Cerré el broche de las botas y acomode mi chaqueta, la pequeña conservadora estaba amarrada a la parte trasera de mi moto, busqué el casco, mi celular y la cámara. Guardé la cámara en la funda y me colgue el pequeño bolsito en diagonal sobre el pecho, el móvil en el bolsillo y aun con el casco en la mano, saqué el postre del congelador y con cuidado lo coloqué en la pequeña conservadora.

Bradford estaba helado, no me sorprenderia que pronto nevara. Ajusté la correa que amarraba la conservadora y me pusé bien el casco. Subí a la moto y arranqué a fondo, debía convertir las cuatro horas de distancia en dos o menos.

— Zayn:

La casa estaba lista, mi mamá sonreía con mi padre, ella con un vestido color hueso y papá con un traje parecido al que usé en la última premiación.

Waliyha un hermoso vestido lila de corte alto y falda corta, Safaa tenia un vestido amarillo pastel, que la hacia ver más pequeña, una pequeña "Bella". Me enorgulleció mi gusto para la ropa femenina.

Llamaron al timbre y vi de reojo a Doniya cuando mamá paso frente a ella para atender la puerta. Mi hermana llevaba un vestido color menta, sin espalda y escote cerrado, con unos tacones peligrosos. No dejaba de llamar por teléfono y sabía muy bien a quien era, quería alertar a _____ o convencerla de salir de fiesta esa navidad, pero era imposible, la mueca en si rostro me confirmaba que ella no atendia.

Las voces en la entrada se hicieron mas claras y todos en mi casa fuimos conscientes de nuestras visitas. Debbie, Alexander, Jonnie y Perrie entraron a la sala, llevándose el rostro de sorpresa de todos en mi familia, excepto por Doni que solo forzó una sonrisa. Jonnie se acercó a saludarme golpeando mi hombro con fuerza, Debbie me abrazó como si fuera un hijo más y Perrie se acerco con una mueca desesperada en el rostro.

– Lo siento – Susurró y jugueteo con sus manos antes de besar mi mejilla. Luego se alejó considerablemente y fingio hablar por teléfono, estaba nerviosa, lo sabía.

Llevaba un vestido rojo, con un escote bajo y falda corta que se señia perfectamente a su figura, llevaba tacones blancos y se veía dulcemente infartante.

Las diez y treinta llegaron pronto y mamá comenzó a llenar la mesa con la ayuda de Debbie, en ese momento volvieron a llamar a la puerta, está vez fue Doniya quien atendio.

– Jo-der – reconocí la exprecion y el tono de admiración en mi hermana, por lo que no fue necesario imaginarme lo que venia.

Valerie se quedo parada en la entrada al salón, a unos metros de la mesa, llevaba un pantalón ajustado, cómo una segunda piel en color negro, una camisa de gasa transparente color vino y debajo un sostén negro. Su chaqueta de cuero y una botas cortas con un taco aguja considerable, colgando en su antebrazo el casco negro con llamas y letras de grafittis que yo mismo había decorado, y en la otra mano una mini conservadora roja. La única chica que no llevaba vestido, con los labios carnosos en un tono carmesí y los ojos delineados, haciendo ver el marrón aun más profundo, jadeé al verla, todo lo que llevaba decía "Ya llegué" cómo imponiendo presencia y seguridad.

No pasé por alto la sonrisa de orgullo en el rostro de mi hermana, ni la mueca de Perrie o Debbie. Y aunque quise, no pude evitar ver la decepción en los ojos de mi novia.

– Val, cariño pasa. – La invitó mi padre algo desconcertado por la situación.

– Hola, Yaser – Le saludo y beso su mejilla, sin marcarlo. Se dirigió a mi madre y también la saludo – Trisha, el postre que prometí – sonrió

– Hola, hija. ¡Oh, gracias! – Contesto. Mamá tomando la mini conservadora.

– Cabezota.. – Comentó despeinando a Safaa – Chica sexy – Le guiño el ojo a Waly.

En ese momento, todo se detuvo centrándose solo en Valerie que se acerco directo a la madre de Perrie. La saludo con un apreton de manos y una sonrisa sincera.

– Soy Valerie Smith, mejor amiga de Doniya, es un placer – Y a mi me dolio su presentación.

– Oh, querida. ¡Hola! Soy Debbie Edwards – Se presentó mi ex suegra con alegría – La princesa de allí es mi hija Perrie, la novia de Zayn – Alardeó, pero Val no se inmutó.

– Lo sé,  Zayn está muy enamorado. No deja de hablar sobre ella – Sonrió y trague en seco.

– ¡Eso es lindo, Zayn! – me gritó Debbie a la distancia – Oh, y aquél guapo de allí, es mi hijo Jonnie. – A penas nombrarlo, Jonnie ya estaba allí, besando la mano de mi chica, quien le sonreía con cortesía. El tenía en la mirada la promesa de conquista.

Joder, está noche será larga.

— Valerie:

Trisha llamó a todos, la hora de sentarse en la mesa prometia ser incómoda. ¡Vamos! ¡Te enfrentaste a la madre entusiasta de tu competencia! ¿Puede venir algo peor?

Debería haber sabido que sí.

Yaser se ubico en la cabecera de la mesa, a su derecha Trisha, que se veía hermosa con ese vestido, seguido a ella, las tres hermanas se ubicaron según la edad, las tres hermosas, estaba completamente segura que los vestidos los había comprado Zayn, al menos el de las dos menores, por el estilo recatado. Dony estaba sexy, autoritaria y femenina, tal cual es. A la izquierda de Yaser se acomodo Debbie, enfrentando a Trisha seguido a ella se sentó Perrie, ese vestido rojo que llevaba era idéntico al que me había regalado mamá. Decidido, en cuanto llegará a casa, lo quemaría. A la rubia le secundo Zayn y en el lugar que debia ser de Jonnie, el muy idiota me lo cedió en un acto de caballerosidad, sentandose el a mi izquierda.

Sí estamos en el baile, bailemos. Pensé.

La cena se llevó a cabo con una charla amena de la cuál decidí no partisipar ni pasivamente, dedicándome a evitar cualquier contacto de mi cuerpo con el de Zayn y disfrutar al máximo la comida que había preparado Trisha. De vez en cuanto contestaba una que otra pregunta de Jonnie, Safaa o Waly.

– Hay, Perrie ha estado tan enferma últimamente, que juraria que tiene síntomas de embarazo – Comentó Debbie. Zayn tragó en seco y yo no pude evitar ahogarme con la comida. Sentí la mirada de todos.

– Yo.. disculmenme – Pedí y agradecí que Jonnie corriera mi silla para permitirme levantarme, caminé rápidamente al baño y me encerré allí.

Me sostuve de la puerta intentando normalizar mi respiración, lo había pensado, había tomado mi decisión, seguiría con Zayn si el me amaba, con o sin el embarazo de Perrie, pero.. ¡joder que me lo hace difícil!.

– ¿Valerie? ¿Estás bien? – Asentí intentando convencerme, me giré al espejo y acomodé mi cabello, corregí el maquillaje y sonreí a mi reflejo para ver si se veía convincente, antes de salir y encontrarme con Doniya en la puerta.

– Lo siento mucho, linda. No lo pudimos evitar..

– Tranquila Do, estoy perfecta – Le regale un giño y ella sonrió – No me pondré mal por una rubita, ¡Por dios! es mi noche, linda.

– Esa es mi amiga – Sonrió, si pude engañar a Dony, podría con la familia Malik y Edwards.

Vamos, son solo unas horas más, Val.

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