— Valerie:
Zayn tomo mi mano y me acerco mas a su cuerpo, estaba segura de que siquiera había lugar para aire entre nosotros. La canción había terminado y las parejas mas 'viejas' por decirlo de alguna forma ya se habían retirado.
Observe a los cuatro jóvenes que aun seguían en la pista. Niall y Letty se besaban como si no existiera un mañana, en cambio Harry miraba temeroso a Sam, se separaron bruscamente. Lo que provoco que ella saliera casi corriendo del lugar. Quise ir en busca de Sam o intentar consolar a Harry, pero Zayn me lo impidió, apretando mis manos, impidiendome el escape.
- Dejalos, por ahora - Suplico cuando lo mire con mala cara. Acepte no muy convencida.
Me dejo guiar por sus manos hasta la salida de la gran casa de los Styles, caminamos en un silencio para nada incómodo hasta su auto. Me siento en el lugar del copiloto y lo observo conducir, la manera en la que sus manos rodean el volante con fuerza, haciendo que los músculos de su brazo se contraigan. Se ve tan masculino, aun en ese traje.
El auto freno frente a mi casa, haciendo que sea imposible no pensar lo rápido que paso el viaje. Me quedo en el asiento esperando a que Zayn abra mi puerta, en cuanto lo hace mis intenciones de bajar son deshechas por los fuertes brazos que me elevan del suelo, Malik me lleva al estilo nupcial. No puedo evitar besar su cuello. Un beso inocente y corto, se vuelve necesitado y pasional, dejando poco a poco una marca en su piel morena. Su respiración es entrecortada, con cada nueva lamida en la piel sensible, suelta un gemido.
Me doy cuenta de que estamos resguardados bajo el techo de mi casa, suspiro y mis pies tocan el suelo, cuando volteo a ver a Malik, este tiene los ojos cerrados, sonrió y me dirijo a las escaleras, se que el abrió los ojos cuando escucho un '¿Que?' De su parte. Se lo que está pensando, pero sigo mi camino hacia mi habitación, dispuesta a seguir allí lo que empecé.
La puerta de mi cuarto se abre con precaución, soy testigo de como busca desesperadamente una señal de que el juego sigue en pie, de que nada acabo. Sigo en la misma posición, estoy recostada boca arriba sobre la cama, intentando estabilizar mi agitaditada respiración y con los ojos cerrados. Su peso hace que el colchón se hunda en el lado derecho de la cama, luego siento su cuerpo sobre mi vestido entre mis piernas, a pesar de que no lo veo, siento su respiración chocar contra mi rostro, mis labios. Sus manos están a cada lado de mi cabeza, intentando no aplastarme con su peso.
- no me vas a dejar así, ¿Cierto? - Pregunta con vos ronca sobre mi boca. Sonrio, pero no respondo. Quiero provocarlo.
Mi cuerpo se mueve lentamente debajo del suyo.
-Val, por favor - Susurra con los ojos cerrados.
Me acerco a su rostro y rozo sus labios, analizó su posición y la mia, logro rápidamente moverlo, invirtiendo posiciones. Me acomodo sobre su bientre, una pierna a cada lado de su torso, el abre los ojos y me observa, le sonrió en respuesta. Me acerco a el y sin ganas de querer jugar me adueño de sus labios, saborenado su boca, deleitandome.
Sus manos recoren mis brazos, dejando suaves caricias. Llegan hasta mi espalda, suben y bajan lentamente y aun no dejo de besarlo. Una de sus manos llega al cierre de mi vestido. Y no quiero ni puedo detenerlo, quiero tenerlo ahora y no voy a censurarme. Baja el cierre y estoy expuesta ante el, lista para unirnos por primera vez.
-Te amo - susurro antes de desabrochar su camisa, botón potencial botón.
- Te amo, más - Es su respuesta.
Me despierto con el horrible sonido de mi despertador. Siento como mi cabeza retumba al ritmo del sonido. Pero aun así me levanto de la cama.
Camino lentamente hasta el baño y entro a la ducha, sin esperar a que el agua entre en ambiente. Lo que causo que una serie de maldiciones saliera de mi boca, cuando sentí el contacto de mi piel con el agua fría.
