Amor a Segunda Vista -Zayn Malik EDITANDO....

46: Sala de hospital

Continúa Mia

Después de unos minutos, salgo del auto y camino dentro de la guardia del hospital. Veo a los chicos sentados y las chicas a su lado. Gwen corre hacia mi. No pude llorar. No quiero hacerlo. Él fue malo conmigo, yo fui mala con él, pero en el fondo conozco mis razones y es que a nadie pude querer de esta manera.

Nos sentamos a esperar novedades. Nadie dice nada y eso ya me desespera. Me acerco a la recepción y consulto, nada. Veo a un médico caminar hacia nosotros.

-Familiares del señor Malik? - pregunta.

-Nosotros - dicen todos a la vez acercádose. Me quedo por detrás atenta a las palabras del hombre vestido de blanco que tiene mi corazón en sus manos.

-Todos son familiares? - cuestiona, a lo que con un gesto afirmamos que si. Él entiende y creo que lo ve en nuestras caras de preocupación - Ok. El paciente está estable. Tuvo un par de fracturas, pero creemos que estará bien. Solo hay que darle tiempo a despertar, ya que los golpes en su cabeza produjeron una serie de traumatismos y depende de su evolución como resulte todo - finaliza y nos mira esperando preguntas. No tenemos ninguna. De a poco siento como vuelvo a respirar - Pueden pasar a verlo en unos minutos, pero de a uno - agrega. Todos se miran y tratan de decidir quien pasará primero. Puedo esperar, él no elegiría verme a mi primero, pero Harry sugiere:

-Mia... creo que sería bueno que seas la primera.

-No... yo no sé... -No tengo excusas. Quiero verlo, necesito hacerlo y acepto.

Cuando llego frente a la puerta que la enfermera me indicó, mi pulso de acelera y mi mano en el pomo intenta decidir si abrir o no. Respiro hondo y entro. La habitacion está ocura, solo una pequeña luz. Todo es blanco y el silencio ensordecedor. Nunca habría silencio estando él en la habitación. Podría estar contando chistes, coqueteando o simplemente peleando y esto último era lo que tanto extrañaba. Levanto la vista y mis ojos intentan encontrar al hombre del que me enamoré días atrás. No hay rastros de él.

Piernas enyesadas, brazos y vendas por donde mires. Mis ojos se nublan y las lágrimas que contenía finalmente se liberan. Dios que monstruo podía hacer algo así? Me acerco. Tengo que verlo, comprobar que es él debajo de todo eso. Sus tatuajes me lo indican, pero me niego a creer que sus ojos no me estén mirando y provocando tantas cosas en mi.

-Dios... lo siento tanto... - digo a su lado. Rozo su mano y sin darme cuenta me tomo de ella. Las lágrimas me inundan, el perdón no es suficiente y la culpa me invade por completo - Nunca hubiese querido que te pasara esto... lo siento... - repito una y mil veces. El pitido de las máquinas me dicen que está dormido, que su corazón sigue funcionando y eso es lo más importante para mi.

-Podría haberte amado, si solo me hubiese dejado - le digo - Solo necesito que despiertes... Bonito necesito verte sonreír - aunque eso sea lejos de mi, pienso en silencio.

La puerta se abre y el doctor se acerca.

-Se pondrá bien. Hay que tener fe - me dice.

-Es una persona importante para mi... - confieso al fin.

-Tal vez debas decírselo al despertar - me dice mientras revisa la medicación y deja todo anotado en una planilla.

-No sé si él quiera escucharme cuando despierte...

-Seguro que si.

-Por mi culpa está así - digo y comienzo a llorar nuevamente.

-No, señorita...?

-Mia - me presento.

-Mia, él esta así porque tuvo un accidente con otro chico. Pero me llama la atención que ninguno de ustedes preguntó por él - comenta.

-Él... está bien? - pregunto.

-Si... salió mejor. Iba al volante y pudo anticipar el golpe. Zayn no llevaba el cinturón. Iban muy rápido.

-No es buena persona. No quisiera saber acerca de él - digo y bajo la mirada para posarla en mis dedos entrelazados con los de Zayn.

-Va a despertar pronto y se pondrá contento de saber los amigos que tiene y la mujer que lo espera - dice y toca mi hombro para despedirse.

-Con que despierte me alcanza...- murmuro sin despegar mus ojos de él.

-Lo hará... lo hará - asegura y sale de la habitación.

Cada uno de los chicos pasó a verlo. Durante la noche podía quedarse solo uno y con la mirada les pedí ser yo quien lo hiciera.

-Por mi culpa está ahí, necesito ser yo quien cuide de él esta vez... podrán confiar en mi? - les pregunto.

-Con los ojos cerrados morocha - dice Liam y me abraza - No es tu culpa.

-No vuelvas a decirlo - me reta Harry. Todos me abrazan y se van despidiendo para volver temprano.

Entro a la habitación otra vez y acerco la silla a su lado. Necesito tomar su mano para decirle que estoy ahí. Que voy a cuidar de él. Su teléfono suena sobre la mesita y lo tomo para apagarlo. Veo que es su mamá y pienso que ella debe saberlo, no sé si los chicos le avisaron.

-Hola? - digo.

-Dios... Como está? Es cierto? Estoy viajando para allá - asegura la mujer del otro lado de la línea.

-Él está bien... tenemos que esperar que despierte, pero aseguran que se pondrá bien - le comparto la informacion que el médico nos dió.

-Estás con él? Por qué tenés sus cosas? Quien sos?

-Yo... me quedaré con él esta noche. Quedese tranquila. Soy una amiga. Quiero hacerlo - le aseguro.

-Mia? Sos la Mia de mi Zaynie? - dice y me sorprende que conozca mi nombre, eso me hace sonreir

-Si, soy Mia señora - confirmo. No sé si él me considera suya, pero una parte mia si que es de él.

-Sabía que mi bebé encontraría alguien especial... gracias linda. Yo estaré llegando en un par de horas - me informa.

-Quedese tranquila. Acá estaré.

-Trisha... mi nombre es Trisha. Nos vemos en un rato. Cuidamelo si?

-Con mi vida Trisha - digo y me doy cuenta que son las palabras más ciertas que alguna vez dije.

Después de unas horas mi cansancio me vence y quedo dormida tomada de su mano. No quiero soltarla, no quiero dejarlo. Esta vez quiero ser yo quien lo proteja. Cierro los ojos y el miedo de perderlo es tan grande... no podría vivir después de él. No podría seguir sin él.