Mi nombre es Moon ByulYi, y si hay algo que odio en el mundo son las reuniones familiares. No me malinterpreten, amo a mi familia, pero desearía que dejaran de ser tan... invasivos. Cada vez que vienen a casa es imposible evadir sus interminables preguntas, los chismes de temas que ni nos incumbían, y como olvidar los constantes elogios hacia mi "perfecta" prima.
Sana es mi prima mayor por unos meses, ambas tenemos dieciséis años y vamos en la misma secundaria, aún así es casi nada lo que compartimos en la escuela. Ella jamás me apartó de su lado, pero yo por elección propia preferí no juntarme con ella. La razón era simple: no me sentía a gusto con su grupo de amigas. Sana tenía en común muchas cosas superficiales con ellas, como gustos musicales, estilo y demás, pero mi prima no era una engreída, ni una persona desagradable como ellas. Cambiaba un poco cuando estaba en ese ambiente, pero todos lo hacemos al estar con nuestros amigos ¿No? Bueno, eso es algo que por ahora no experimentaría, hace mucho que dejé de tener amigos. Nunca me quejé, ya que Sana era muy buena prima y últimamente pasabamos mucho tiempo juntas, o al menos así era hasta hace unas semanas.
Como mañana era nuestro primer día de clases decidimos hacer la reunión familiar el domingo, algo así como un último día de vacaciones. Esta vez sería en mi casa, lo cual me fastidiaba, ya que mi mamá de ponía muy obsesionada con el orden, todo debía estar perfecto. Me levanté un poco más temprano que de costumbre, y como era de esperarse mis familiares llegaron antes de que yo pudiera salir de la ducha. Me vestí y arreglé ahí mismo, dejé mi cabello liso con el flequillo de siempre y me maquillé lo suficiente. Los pocos cosméticos que tenía me los compraba Sana, también me había enseñado a hacer cosas como rellenar mis cejas y delinearme los ojos. Cuando llegaba a la escuela sin maquillar ella de inmediato lo notaba y me jalaba al baño con su estuche de maquillaje en mano. En cuanto a la ropa fui fiel a mi estilo; playera holgada, pantalones negros y oxfords del mismo color. Mi mamá los odiaba, decía que parecían de chico.
Cuando salí del baño justo mi mamá había subido hasta mi cuarto, viéndome con los ojos bien abiertos. Me encogí de hombros, ya sabiendo lo que diría.
─¿No encontraste algo mejor?
─Así es todo mi armario, lo siento.
Mamá movió la cabeza resignada, y tomó la ropa sucia que había dejado en la cesta antes de irse.
─Baja ya, todos están en la sala.
Unos minutos después bajé a la sala, y mi familia me saludó con bastante entusiasmo. Mi abuelo y tías estaban allí, también la hermana mayor de Sana junto a su esposo, y mi hermano con su novia. Vivían juntos hace unos meses, así que ya no lo veía tan seguido. En cuanto a Sana ella trabajaba algunos fines de semana, la contrataron en una tienda durante las vacaciones y a vista de lo buena empleada que era decidieron dejarla trabajar esporádicamente en el lugar, seguramente vendría a la hora del té.
La mayor de mis primas nos trajo la invitación de su boda, la cual constaba en un pequeño rompecabezas con los datos de la celebración y una foto de la pareja. "Muy creativo" pensé. Todos hablaban del tema en la mesa mientras servían la comida, había tanto para comer que no sabía por donde empezar. Mis familiares siempre me regañaban porque nunca me terminaba el plato, decían que debía comer más.
Por ahora no hablábamos de mi -lo cual era un alivio- todo giraba entorno a otros temas triviales, hasta que mi tía, mamá de Sana, sacó el tema.
─¿Ansiosa por la escuela, Byulie?
Me causaba gracia cuando me decían así, pero no quería hablar de la escuela. Fingí una sonrisa y dejé de comer.
─Extrañaré las vacaciones.
─Es un nuevo año, deberías estar entusiasmada. Verás a tus amigos.
Mamá miró a mi tía como pidiéndole que se calle. Ella sabía que no tenía amigos en la escuela, pero no conocía la verdadera razón.
─Sí, eso creo. Sana es mi amiga.
Eso pareció enternecerla porque solo sonrió y siguió comiendo. Suspiré de alivio, pero justo cuando pensé safarme del tema, mi prima mayor habló.
─¿No sales con algún chico?
Negué con la cabeza, intentando no hacer evidente mi mueca de disgusto. Algunos rieron y mi papá lanzó una mirada amenazante a mi prima. No creo que a él le gustaría que su única hija llegase con un novio.
─Eres bonita, no entiendo por qué. A Sana se le hace tan fácil...
El problema es que yo no soy Sana, ni aunque lo intentase.
─Ya conoces el carácter de mi hermana.
Golpeé el brazo de mi hermano por su comentario, y por supuesto fui regañada por mi reacción para nada "femenina".
El tema se enfocó en Sana, sobre su novio y lo que la familia pensaba de él. Ya todos lo conocían, yo fui la primera. De hecho, lo conocí al mismo tiempo que Sana, la diferencia es que ella lo conoció una semana antes por internet. Le invitó a salir una noche, yo la acompañé con la excusa de que estaríamos en el cine. JungKook parecía un buen chico, era agradable y trataba bien a Sana. La llevaba a comer y pasaba por ella después del trabajo. Lo único que me sorprendía es que literalmente se conocían hace un mes y ya hasta lo había presentado a la familia. Además, en este último tiempo se la pasa tanto con él que me sentía un poco dejada de lado. Me gusta ver a mi prima feliz, así que no le digo nada.
Durante la tarde los mayores se la pasaron en el patio platicando y bebiendo unos tragos de alcohol y fruta que mi papá preparaba muy bien. Por mi parte me quedé en mi habitación frente a la computadora. En mi tiempo libre disfrutaba jugar videojuegos, leer, escribir o ver vídeos. Cuando había menos gente en casa me dedicaba a la música.
Como me la pasé en mi cuarto ni me percaté que Sana ya había llegado, en otra ocasión ella hubiese subido a saludarme. Su novio estaba sentado a su lado mientras todos bebían té y comían pasteles, pan y dulces. Saludé a ambos, me sorprendía como Sana se veía bonita incluso con su uniforme de trabajo; blusa blanca, pantalones de tela color crema, y el cabello atado en una coleta.
Casi todo el tiempo hablaron sobre su relación y el trabajo. Mis familiares no dejaban de elogiar a Sana y hacer algunas bromas, además de oír las historias que Jungkook tenía para contar. Después el tema de la boda regresó, específicamente la despedida de soltera. La hermana de Sana reclamaba que su novio tendría dos así que ella tendría que tener dos también, pero todavía nada estaba planeado. Sana, como dama de honor, era la encargada junto a tres amigas de su hermana, pero la discusión inició cuando Sana aseguró que las amigas no se contactaban con ella para planear la despedida. La pelea de hermanas fue interrumpida por su madre, regañando el malhumor de Sana y echándole la culpa a su nuevo noviazgo. Aprovechando que los hombres se habían levantado para ver un partido de fútbol, yo regresé a mi cuarto.
Esperé que Sana subiera a verme, pero cuando miré por la ventana noté que ahora mis tías y ella estaban afuera platicando, por supuesto con el novio al lado. A pesar de que teníamos la misma edad siempre trataban a Sana como si fuese una adulta y a mi como la niña, era frustrante.
Solo volví a bajar para despedirme. Le dije a Sana que nos veríamos mañana, pero ella pareció no hacerme mucho caso. No le di importancia y regresé a mi habitación, esta vez lista para irme a la cama.
Mañana sería un día agotador.
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Girls Like Girls » MoonSun.
FanfictionLa vida de Moonbyul siempre ha sido tranquila. Después de que se viese envuelta en un gran problema el año pasado decidió mantenerse al margen con las personas de su escuela, siendo su prima Sana su única confidente. Jamás volvió a tener interés en...