Girls Like Girls » MoonSun.

Capítulo 08

En la escuela no quise mencionarle a Solar sobre lo que su mamá me había platicado en la mañana, realmente no era un tema que me incumbía. Esta tarde no podía quedarse en la biblioteca así que aprovechamos de estudiar entre los tiempos libres, confiaba en que ella repasaría durante la noche.

Sana prometió almorzar conmigo hoy, así que Solar fue con las otras chicas para darnos tiempo a solas. Camino al comedor mi prima me platicaba acerca de algunos problemas que había tenido con su novio, al parecer a mi tía ya no le causa gracia que pasen juntos la gran mayoría del tiempo. Él viene a buscarla después de la escuela, y por lo que tengo entendido se queda en su casa hasta que anochece. Sabía que Sana estaba estusiasmada con Jungkook, pero debía obedecer a su mamá, además por el bien de ambos era mejor que tuvieran su espacio.

En eso decidí tocar el tema de Solar. No tenía que ver conmigo, así que esta vez podría pedirle consejo a Sana.

─Anoche me quedé en casa de Solar, ¿y sabes? Esta mañana su mamá me ha dicho que no son nuevos en el vecindario, y que estaba agradecida de que fuese amiga de Solar ya que ella había pasado por momentos difíciles. No me lo creí cuando dijo que ella era tímida.

Sana abrió mucho sus ojos y trató de aguantar una risa. La golpeé en el brazo mientras hacíamos la fila del almuerzp.

─¿Tímida? ¿Es en serio? Omo... a nosotras nos dijo que era nueva aquí, también que estuvo de viaje el año pasado. ─Me informó Sana, aunque yo ya lo sabía.

─Bueno, todo eso es mentira. Hay otra razón detrás de esto... ¿deberíamos preguntarle?

Como era de esperarse Sana negó con la cabeza y me pidió bajar el tono de voz. Si alguien más se enteraba que Solar mentía iniciaríamos un escándalo, no queríamos eso.

─No, preguntarle no, si mintió debe haber un motivo. Tenemos que idear un plan...

Guardamos silencio por un momento, pensativas, hasta que un rápido movimiento de Sana me distrajo.

─¡Lo tengo! Hagamos una pijamada, el viernes después del exámen.

─No creo que sea buena idea, tú trabajas y Solar tiene cosas por hacer los viernes.

─Puedo pedir descanso, además si le decimos se animará y aceptará. No quiero sonar mal pero ella es muy fácil de llevar, por lo mismo trato de que no se deje influenciar por Krystal, Nayeon y Sinb. Sé que Eunha se deja influenciar por Sinb, siento que ella me está dejando de lado por eso.

Hice una mueca con mis labios y Sana se encogió de hombros. Era cierto eso de que algunas de las chicas eran mala influencia en el grupo. Solar estaba actuando así por un motivo, quizá trataba de encajar. Finalmente accedí a la idea de Sana, y de inmediato ella envió un mensaje a su chat grupal.

Tomamos nuestras bandejas y me pidió que fueramos a sentarnos con sus amigas para acordar detalles de la pijamada, esto de sentarme dos días seguidos con ellas era extraño, esperaba que no se hiciera costumbre.

Tomé del brazo de Sana para que se detuviera, pues algo había llamado mi atención desde allí. Un chico estaba en la mesa de Krystal y las demás, y no era Vernon. Estaba sentado junto a Krys y lucían muy cercanos, además toda la atención estaba en ellos.

─¿Quién es él? ─Pregunté discretamente a Sana.

─Oh, él es Kai. Acaban de hacerlo oficial con Krystal, llevan saliendo unos meses.

Asentí, fingiendo que no me importaba, pero la verdad algo extraño pasó dentro de mi. Era primera vez que veía a Krystal con un chico, definitivamente no me lo venía venir. ¿Por qué me sentía afectada? Se supone que esto no debería importarme.

Mi corazón dio un vuelco cuando la mirada de Krystal se conectó con la mía a lo lejos, ella la desvió en cuanto lo notó. Sí, ella ya no era mi mejor amiga y no tenía derecho a sentirme mal por esto.

─¿Estás bien? ─Me llamó Sana haciendome despertar de mis pensamientos.

Asentí, y mientras le daba palmaditas en la espalda me atreví a forzar una sonrisa.

─Sí, sí. Uhm, ¿sabes? Creo que hoy no tengo ganas de ir con ellas, ve tú y luego me cuentas.

Al principio Sana resopló, pero su expresión se ablando y movió la cabeza.

─De acuerdo. ¡Te veo luego!

Sana fue hasta su mesa, no logré ver más ya que me volteé al instante lista para ir a las mesas del exterior, pero apenas di unos pasos la vocecita de alguien hizo que me detuviera.

─¡Moonbyul!

Solar.

Maldije para mis adentros pero esbozando la mejor sonrisa me volteé a verla. Solar agitaba su mano desde la mesa, con esa gran entusiasta sonrisa que ahora me hacía preguntarme que escondía tras ella. La saludé con mi mano, pero con menos entusiasmo. Luego, también con un gesto, me llamó a que fuera hacia allá, pero hice una mueca de que no se preocupara mientras negaba con la cabeza.

Sin más seguí mi camino hacia afuera. Por ningún motivo estaría en esa mesa hoy, ya era suficiente tortura tener a Krystal allí, sumándole un chico con ella lo hacía mucho peor.

Al llegar a las mesas de afuera no me sorprendió que casi de inmediato Solar viniera hasta allí. Se sentó en frente de mi, y para captar mi atención robó una de mis patatas. No hacía falta, yo ya la había notado, pero aún así reí al mirarla.

─¿De nuevo en tu caparazón? ─Preguntó ella, cruzándose de brazos sobre la mesa.

Negué con una risita y fijé la mirada en mi comida antes de volver a verla a ella.

─Me siento preparada para el exámen, y hasta ahora no había tenido la oportunidad de agradecerte.

─Oh, está bien, la verdad también me ayudó a estudiar.

─Entonces deberíamos hacerlo otra vez. ─Dijo con entusiasmo, y por un segundo pareció avergonzarse por eso.

─Claro, mientras no te vuelvas una distracción para mi.

Sí, la verdad hablé sin la intención de que mis palabras fuesen tomadas con otro sentido.

Un silencio nos interrumpió por un momento. Yo no hice más que apartar la mirada y dar vueltas a mi comida, me sentía incómoda y de seguro la había hecho sentir igual. No sé por qué volví a mirarla, ella bajó la mirada evidentemente incómoda y al instante sus brillantes ojos volvieron hacia mi, esta vez acompañada de una divertida risita que acabó por enseñarme su radiante sonrisa.

Quise sonreírle, pero en lugar de eso mis ojos se movieron inquietos, sin atreverme a mirarla. Un cosquilleo se hizo presente en mi estómago, deseando que fuera por lo extraña que lucía mi comida después de picotearla tanto.

─Uhm, Sana hará una pijamada. ─Cambie rápido de tema y ella alzó las cejas interesada─ El viernes, después de la escuela. Sé que vas al hogar de ancianos durante la tarde, es por eso que quería preguntarte si es que podías ir...

Solar movió la cabeza con entusiasmo y yo sonreí contenta porque ella accediera.

─¡Claro que puedo! Nunca he ido a una pijamada, me entusiasma la idea. Puedo faltar por un día, tranquila, no soy la única que va a ayudar.

Ahora el ambiente no era incómodo, no sé por qué su felicidad que ponía de tan buen ánimo, pero las palabras de su mamá hacían que me confundiera. No sabía que sucedía con ella, pero eso comenzaba a no interesarme. Ella se veía feliz ahora, no podía imaginarme a una Solar pasando por momentos difíciles y tampoco tenía intensiones de hacerle recordar esos episodios.

La cuidaría, porque sabía mejor que nadie lo que era no tener a alguien que lo hiciera.