ℬ.Ï .Ꭲ.ℂ.ℋ. ❰ ✘

Capítulo 48

Aún después de que su mano se removió de mi hombro, la sensación de un cálido tacto permanecía sobre mi piel. Pequeñas lágrimas se deslizaban por los costados de mi cara hasta caer sobre mis rodillas. Sentí la mirada confundida de la pequeña.

Apreté mis labios en una fina línea. -Em...-Sentí la voz titubeante de Jimin detrás de mí. -¿Te duele algo ahora?- Caminó del otro lado de la cama prestándole suma atención a su hermana pequeña. Esta le miró con una leve sonrisa en sus finos labios, asintió mirándole a los ojos.

Era un hermoso momento entre hermanos, y me sentía como la tercera rueda del carro, no debía estar allí pero no podía quitar la mirada de los dos hermanos que se miraban de aquella forma tan fraternal. Sonreí aguantándome estúpidas lágrimas de alegría. - ¿Quieren que los deje un momento a solas?- Ofrecí de la forma más educada que me fue posible, ambos me observaron frunciendo el entrecejo.

-No.-Espetaron a unísono.

-Pero...-Musité jugando con un mechón de mi cabello. Miré a Jimin, quien me observaba de aquella forma tan característica de él, casi muero. Tragué saliva disimuladamente apartando mis ojos de los suyos.

Hanna resopló observándome de pies a cabeza. -No entiendo como un imbécil como Jimin se consiguió a alguien así de bonita....

Mis ojos se abrieron como platos, sin saber exactamente a dónde mirar. De soslayo vi a Jimin, quien se complacía al verme tan avergonzada por aquel comentario. -Hanna, nosotros no...-Intenté explicar manteniendo la compostura, miré a la curiosa niña.

Hizo un mohín con los labios. -___, no me gusta que me mientan...-Se quejó cruzándose de brazos sumamente indignada. -¿Creen que pueden engañarme?- Ladeó una sonrisita mirándome a los ojos. Park se enfocó en su hermana pequeña sin entender exactamente. -Hace unos días, vi a Jimin bajarse del bus a través de la ventana de casa, junto a ti.- Sonrió de oreja a oreja. Aclaró su garganta dramáticamente. -Y en la escuela nos habían explicado lo que tú antes me habías enseñado en las sesiones de estudio, ___.

Arqueé mi ceja sin comprender a lo que se refería. -¿Qué?

-Dicen que cuando un hombre y una mujer se quieren mucho.... Ya sabes, lo de los hijitos...-Tapé mi cara con ambas manos, sin dar crédito a estar reviviendo aquella conversación tan acalorada con la pequeña, nuevamente. -Y... Jimin tenía el palo paradito, ___... como tú me enseñaste.

-Hanna.-Siseé nerviosamente, notando en la esquina de mi ojo como lentamente Jimin esbozaba una mueca de diversión en mi dirección.

-Entró a la casa luego de despedirse, muy rápido en realidad, casi corriendo adentro. Supe que estaba ya en su cuarto cuando azotó la puerta fuertemente, y solo un poquito después empezó a tener hijos.- Sonrió de oreja a oreja. -¿Van a ser papis?- Repiqueteó algo emocionada, mi cara cayó al suelo de la vergüenza.

No podía mirarlo.

Dios, no podía estar en el mismo cuarto que él siquiera.

-Empezó a hacer ruiditos...-Rascó su barbilla. -"Mmmmm aaahhh aaahh sí.... Ah..."

Esta vez fue Jimin el avergonzado, miró a su hermana de forma venenosa. -Eso no es verdad.-Masculló con la mandíbula apretada.

-¡VAN A SER PAPÁS! ¿No estás contento ChimChim? Finalmente tu existir tiene un propósito.-Sonrió de oreja a oreja, mostrándonos todos sus pequeños dientes.

-Hanna...-Pronuncié con la poca fuerza que tenía. -Jimin y yo no...

La puerta se abrió dejando ver a la Sra. Park en sus altísimos tacones negros. Ingresó al lugar desplazándose con elegancia, acomodó la correa de su bolso en el hombro. -Chicos, ¿Cómo andan?- Sonrió amablemente en mi dirección.

-Hola Sra. Park. -Sonreí educadamente, temiendo que la mujer hubiera escuchado alguna de las incoherencias de su hija.

-¿Cómo estás Hanna?- Caminó a la cama de su hija con rapidez, me puse de pie cediéndole el sitio.

La pequeña sonrió con una risa risueña de trasfondo. -Muy bien mami.-Pestañeó juguetonamente. -Jimincito y ___ van a ser papis, ¿¡NO ES INCREÍBLE!?

Que Dios me libre.

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Y... se los dejo a su criterio.... 7u7