Cuando ella decidió irse [COMPLETA-EN EDICIÓN] - 1ER LIBRO

Capítulo 24

"Ella"  

Hace 6 años

Me encontraba dentro de mi habitación, caminando de esquina a esquina. Me sentía tan nerviosa de lo que podría descubrir en esta conversación.

¿Y qué si él fue el culpable? ¿Qué cosas él era capaz de hacer?

Busqué su número en mi lista de contactos y llamé. Ni siquiera había terminado de sonar la primera timbrada cuando él me contestó.

—¡Princesa! Que gusto escuchar de ti, hermosa.

Me quedé callada. Idiota. Algún día me pagarás todo el daño que me has hecho.

—¿Alo? ¿Princesa? ¿Estás ahí?

—¿Fuiste tú, verdad? Todo es culpa tuya.

—¿Disculpa?

—No te hagas, Jhon. Sabes a que me refiero.

—¿Debería? Porque no tengo idea —se ríe burlonamente—. Por cierto, pronuncias muy bien mi nombre.

—Deja de tratarme así —espeté.

—¿Así como?

—Como si yo fuera algún tipo de ser inferior a ti. -Comenzaba a perder la paciencia. —¡Ya dime por qué lo hiciste! —dije molesta.

—¿Qué le hice a quien?

—¡Lo que le hiciste a-! -Cerré mi boca inmediatamente. ¡Ese cretino! ¡Está tratando de averiguar su nombre! —Ah. Que interesante.-seguí.

—¿Qué pasa?

—Así que aún no sabes su nombre —digo burlona—. Wou. Esto enserio es muy tonto de tu parte. Mandas a atropellar a alguien sin saber información sobre la víctima. -Podía sentir la tensión al otro lado de la línea. —¿Qué pasaría si te digo que te equivocaste?

—Debes estar bromeando. No creerás que me voy a tomar enserio tus palabras. Es más que evidente que él era tu novio. Tan sólo ve como te me pusiste hace unos segundos.

—Si fuiste tú —dije con dificultad por el nudo que se había formado en mi garganta.

—Claro que sí. No dejaría que alguien me arrebate lo que me pertenece —su voz era seria—. Nadie te merece como yo.

—Eres un idiota. ¡Yo no le pertenezco a nadie! ¡Ya verás como te meteré en problemas! Recibirás lo que te mereces.

—¿Qué es lo que planeas, princesa?

—Deshacerme de ti.

Él produjo una carcajada. —¿Y tú crees que yo te dejaría hacer eso? Si yo me voy de este mundo, tú vendrás conmigo.

—JA. Ya veremos quien se queda hasta el final.

—Por cierto, volviendo al tema. ¿Cómo está mi reemplazo?

—¿Reemplazo? Es mi novio; algo que tú nunca has sido ni lo serás.

—Me da gracia como puedes decir la palabra 'nunca' con tanta facilidad. No sabes lo que pueda pasar. No hay nada definido en nuestras vidas.

—Adiós, Jhon.

—Hasta pronto, princesa.

****

Por fin poseía suficiente información como para meter a Jhon en grandes problemas. Tenía los registros de los mensajes y las llamadas constantes. Tenía la orden de alejamiento de cuando mis padres se enteraron que él prácticamente me tuvo en contra de mi voluntad en su casa cuando tenía 13 años. Y ahora lo podría culpar de intento de asesinato. Solo faltaba que vaya a alguna buena comisaría.