Deep (Completa)✔

23. Te Deseo

Ya habian pasado alrededor de treinta minutos desde que el me dejo en casa, cuando siento que alguien toca la puerta fuertemente.

Pero ¿Qué rayos?

Me acerco aún sin quitarme el vestido porque olia a el y me encanta, cuando abro me encuentro con algo que no esperaba.

Un Jason furioso mirandome con nada más que odio.

—¿Cuando pensabas decirmelo?

¿Qué? Lo miro sin saber de que habla.

¡Ay no! Por favor que no sea lo que creo.

-¿De que hablas?- el levanta su teléfono y me enseña una foto de mi y Tristan besandonos.

-Puedo explicarlo- digo levantando las manos.

-No necesitos que me expliques nada- el se voltea para irse.

-¡Jason! No es lo que crees- digo siguiendolo‐ El me amenazo.

El se ríe sin ganas mientras se voltea hacia mi.

-Tus excusas dan lástima- me ve de arriba a abajo despectivamente- No eres más que una zo....

Le doy una cachetada antes de que términe volteandole la cara, el cierra los ojos fuertemente antes de volver a abrirlos y fijar su mirada en mi.

-¡Callate!

-¿Qué? ¿Te duele que te digan la verdad?

-Si piensas eso de mi entonces ¿Por que me buscas?

El me toma fuertemente de ambos brazos hasta casí alzarme del suelo poniendome cerca de su cara.

-¡Porque te deseo maldita sea!

-Te estoy diciendo la verdad- la primera lágrima escapa de mi ojo.

-Pensé que eras diferente- dice entre dientes para despues soltarme fuertemente casí haciendome caer.

El se monta en su carro hecho una furia y arranca a toda velocidad mientras yo me quedo llorando de nuevo por el.

Entro a mi departamento con el alma por el piso, hace poco todo estaba perfecto, me tiro en mi cama hecha un ovillo, mis lágrimas mojando mi almohada.

No se en que momento me quedo dormida y cuando despierto ya son casí las siente de la mañana.

Preparo mi desayuno y me baño para ir a la universidad, no tenía ganas pero no me gustaba faltar, la calle linda y pintoresca por la que suelo pasar siempre, hoy lucia más gris y triste.

Estoy en clase con Gus y Lilly y se que debo de lucir terrible, no pude dormir por lo que tengo ojeras y no intenté ponerme maquillaje hoy, ellos me ven con cara de preocupación, cuando la clase acaba tomo mis cosas y me dispongo a irme pero ellos me detienen.

-¿Fue el de nuevo verdad?- me pregunta Lilly.

Yo niego.

-¡No mientas! ¿Por qué te empeñas en sufrir? El no vale la pena.

La miro mal, en esto momento esto es lo que menos necesito.

-¿Quieres hablar de ello?- me pregunta Gus más comprensivo.

-No, los veo despues.

Me dirijo a mi última clase del día que por suerte no comparto con ellos es muy molesto sentir sus miradas, se que solo se preocupan pero me hacen sentir peor de lo que ya me siento, trato de prestarle atención a la clase pero mi mente está en lo ocurrido ayer.

Cuando el profesor me pregunto sobre algo yo estaba distraida y mi respuesta fue buena, pero era algo perfeccionista y no me agrado siento que lo pude haber hecho mejor.

Cuando salgo de la clase veo a Gus y Lilly caminar hacia a mi, pero no queria hablar con nadie por lo que me desvio hacia una puerta que da al lateral.

Voy caminando a medio camino a mi apartamento cuando un auto deportivo rojo conduce lentamente a mi lado.

La ventana se baja y Tristan aparece.

-¿Por qué tan triste?

-No se tu dime- le digo con odio.

-No tengo idea ¿Te llevo?

Paro de caminar y el detiene su auto.

-Eres un desgraciado, nos tomaste una foto y se la mandaste a Jason.

-Ah eso, solo te hacia un favor- dice encogiendose de hombros.

-El mayor favor que puedes hacerme es alejarte de mi.

El se baja del auto y se para en frente de mi.

-Pues eso no pasara.

-¿Por qué lo hiciste?

-¿Qué no es obvio? Me gustas y te quiero para mi.

-Y ¿Qué no es obvio? Tu a mi no, niño engreido- lo redeo y sigo mi camino pero el me agarra del brazo fuertemente.

Si Tristan no fuera el egocéntrico y egoista que era, tal véz me gustara, pero yo solo tenía a alguien en mis pensamientos y ese alguien ahora me odiaba a causa de el.

-¡Sueltame!- trato de zafarme pero el aprieta más fuerte.

-Vas a ser mia.

-Solo en tus sueños- le doy una rodillazo en las bolas y me voy.

-¡Zorra!

-Tu madre- le digo sacandole el dedo.

Me alejo mientras el sigue en el suelo agarrandose el paquete, una somrisa satisfecha inunda mi cara.