#2 ¿quieres jugar? ©park jimin.

Capítulo 42.

Jimin se encontraba en la oficina de su tío, esperando a que este llegará. Quería mas de ese beso pero su tío se lo impedía, si no llegaba a la hora que había dicho seguro Jimin ya seria hombre muerto. Las puertas se abrieron en par en par dando a la vista de el la sombra de su tío.

-Lamento la demora- hablo su tío dejando un paquete en la mesa de cristal. -Ábrelo- le ordeno. Este hizo lo que su tío le había pedido, se encontró con una visa falsa, todo lo del paquete era falso. Su vuelo saldría en dos días.

-¿Y Carlo?- preguntó el al ver que solo habían cosas para Jimin.

-Tu amigo ira pero el si puede ir con su verdadero nombre, lo importante eres tu Park.

-Carlo también es importante, el es uno de mis amigos y el que me ayuda. Que haré cuándo lo maten y se den cuenta, irán en busca mía de una vez.

-Carlo es alguien que trabaja para mi y solo lo puse como tu "compañero", no me importa el tipo de relación que tengas con el. Solo encárgate de que las cosas salgan como yo quiero. Ahora te explicaré lo que tienes que hacer, por favor toma asiento- y ambos lo hicieron.

-Primero hablaras con Jackson, junto a los papeles que te di está la dirección de donde esta, tendrás que regresar a Corea con la firma para que pasen la droga y antes de eso tendrás que mandar a mis muchachos. Para que los pasen a Corea iras con Nick y también la dirección esta en lo que te di. Y como te dije si es necesario puedes matar.

-Solo hago eso y apenas termine me devuelvo- hablo Jimin.

-Así es pero si quieres darte unas vacaciones puedes quedarte un rato en Alemania.

-¿Ya me puedo ir?- preguntó Jimin. Tony asintió con la cabeza y salio de la oficina. Llego al edificio y vio que las luces aún estaban encendidas. Esta vez Marta no estaba en la recepción y estaba otra chica. Este entro y la saludo cordialmente. Estando en el último piso vio que la luz de su oficina estaba encendida.

Y ahí se dio cuenta de que ella no estaba mintiendo. Su cabeza descansaba encima del escritorio y era notorio que estaba cansada. Todo lo daba a entender la pila de papeles que estaba a su lado. Silenciosamente entro y cerro la puerta a su paso.

-¿No crees que debes ir a dormir?- preguntó Jimin. Ella al escuchar su voz se levanto de golpe.

-¿Qué haces aquí?- preguntó ella con pereza. -No que estarías con tu tío-.

-Solo quería asegurarme de que estuvieras haciendo tu trabajo- este corrió la silla que estaba a su lado y se sentó en ella. La castaña solo lo observaba.

-Solo quiero que sepas que unos días no estaré acá en la empresa.

-No me vengas con eso, te necesito a mi lado para las demás juntas que nos quedan. Si te das cuenta no puedo sola.

-Antes de venir a esta empresa yo trabajaba en otra y aún lo sigo haciendo así que por eso me tengo que ir, no sera por mucho tiempo.

-Lo olvidaba- respondió ella llevando su mano a su cien y sobandola. -Si es así tendré que hacerlo sola.

-Lo harás bien...después de todo logras conseguir lo que quieres- este le dedico una sonrisa a ella. La castaña tomo su móvil y miro la hora, ya era demasiado tarde y mañana tendría que estar a buena hora en la oficina. Esta se levanto y comenzó a guardar todas sus cosas en su bolso. Tomo las llaves y apago la luz de la oficina. Ahora el brillo de la luna era lo único que se podía ver.

-¿Qué día te irás?- preguntó ella estando en la puerta.

-En dos días- respondió el estando a su lado. Ambos salieron de la oficina y se adentraron en el elevador. No decían nada, solo se miraban y al parecer ella también estaba nerviosa. Jimin oprimió el botón para que se detuviera, las luces que tenían se apagaron y volvieron unas de color violeta.

-¿Qué haces, Jimin?- preguntó ella al verlo tan normal. Este no dijo nada y se fue acercando hacía a ella a tal punto de tenerla contra la fría pared que poseía el elevador. Jimin escondió su rostro en el cuello de ella y guardo en sus fosas nasales el dulce aroma que ella poseía. Avena. Este dejo un beso húmedo en aquella parte ocasionando un sin fin de emociones en ella.

-Sabes...tu eres el jodido problema que tengo todos los días en mi cabeza- susurró el manteniendo su rostro escondido en el cuello de ella.

-No te entiendo Jimin- esta levanto sus manos y con nervios removió la cara de el para verlo a los ojos.

-Justo ahora tengo unas inmensas ganas de follarte hasta mas no poder...pero...pero hay algo que me lo impide.

-¿Y qué es eso que no te deja?- preguntó ella aún teniendo en sus manos el rostro de Jimin.

-Tu, eres tu quién me lo impide- este tomo las manos de ella y las aparto de su cara. -juegas con mi mente y me confundes, por mas que quiera odiarte no puedo. Tu misma te encargas de mi, me manipulas y yo no puedo hacer nada.

-De veras que no te entiendo, a que quieres ir- hablo ella.

-Olvídalo...te acompañaré a tu casa- Jimin volvió a oprimir el botón para que el elevador volviera a la normalidad. El semblante de Jimin cambio y_____lo noto, no dejaba de apretar su mandíbula y las venas en sus manos eran mas notorias.

Ambos caminaban, el silencio una vez mas se había apoderado de ellos dos. Al parecer ninguno quería hablar. El frío se sentía y las mejillas de Jimin estaban rojas. Nadie habitaba las calles mas que ellos dos. Se maldijo mas de una vez cuando vio a Megan caminar hacia a el con una sonrisa.

-Hola Jimin- saludo ella de beso en la mejilla. Los celos aparecieron de inmediato en____.
-Hola____- Megan estiro su mano y ella la aceptó.

-Te dejo, que pases linda noche- hablo_____. Antes de que ella pudiera irse Jimin tomo de su mano y la atrajo mas hacia a el.

-Quizá nos veamos otro día Megan, ahora tengo que ir a la casa de mi amiga, adiós- Jimin se despidió de ella al igual que_____y sin mas siguieron caminando.

-No tenías porque venir- hablo____cruzada de brazos y teniendo la vista en el suelo.

-No me digas que estas celosa- hablo Jimin entre risas._____levanto su mirada y lo fulminó con ella.

-Para nada lo estoy- hablo ella volviendo a mirar el suelo. Al llegar a la puerta de la castaña el vio como jugaba con los dedos de sus manos, quizá estaba celosa pero estaba mas nerviosa y no sabia la razón del porque lo estaba.

-Bueno entonces nos vemos mañana- Jimin se acerco a ella y le dio un abrazo. Cuando intento retroceder se dio cuenta de que____lo estaba abrazando mas aún.

-Entra o si no puedes pescar algún resfriado- susurró el correspondiendo el abrazo de ella.

-Aunque no lo creas tu también eres mi jodido problema...y por mas que intente odiarte no puedo. ¿puedo pedirte un favor?- preguntó ella separándose de el. Jimin asintió.

-Cuando llegues al lugar en donde vas a estar me puedes llamar...quiero saber que llegaste a salvo- hablo_____con una sonrisa.

-Lo haré si así tu lo quieres. Este se acerco mas a ella para admirar aquellos ojos cafés que tanto amaba ver. Lo volvían loco. Y ambos volvieron a darse un abrazo.

-Jimin...te quiero- susurró ella en su oído. Se separo un poco y admiro los labios de el. -Tampoco no me hagas sufrir quieres- después de aquella sonrisa sin mas ella posó sus labios encima de los de el.