La mañana había pasado y ya tenia las listas que Jimin le había pedido. Una vez mas no se hacia presente en la oficina. Bajo a la cafetería por una taza de café. El ambiente de paz y tranquilidad que tenia ella se esfumo por completo. Jimin se encontraba con Megan hablando en una de las mesas. Los ignoro por completo y fue directo a pedir su café.
-De verdad que fue lindo conocerte pero tengo que admitir que para nada me gusto la manera en que te lanzaste- este no dejaba de ver el trasero de la castaña. Si no fuera por tanta gente ya la hubiera follado.
-Bueno lo se, te quería decir que mañana vendré a decirte adiós ya tengo los pasajes y podré irme a Canadá.
-Si puedes ven en la tarde- hablo Jimin siguiendo a_____con la vista. Este sin decir nada se levanto de la mesa y se adentro junto con ella en el elevador. Agradecía que estuvieran ellos dos.
-La lista ya la tengo la deje encima de tu escritorio pero ya vi porque no la has visto- una cosa en la que no era buena era disimular los celos, Jimin estaba a punto de reír.
-Me estas dando a entender que estas celosa de Megan- rió Jimin. La castaña rodó los ojos como de costumbre. Un silencio se mantuvo en ellos dos. El pelinegro no decía nada de su parte al igual que ella. Ambos se adentraron en la oficina.
-Se suponía que nos veríamos mas tarde- hablo Jimin viendo contonear las caderas de ella.
-¿Hay algo de malo que te las de en la oficina?- preguntó ella. Jimin sonrió y se acerco a la castaña.
-Yo tenia ganas de pasar un tiempo a solas contigo, muero por quitarte este vestido- beso Jimin el cuello de ella ocasionando un sin fin de emociones. Este no dejaba de restregar su gran erección en el trasero de la castaña. Lo prendía en tan solo segundos. La chica cerro sus ojos por el gran placer que estaba empezando a sentir, las caricias de Jimin la volvían loca. Los labios de Jimin fueron a los de ella para devorárselos, aquellos labios carnosos color rosa lo volvían loco. Eran su perdición.
-No pares- susurró ella cuando este le estaba succionando su cuello. Las marcas no tardarían en aparecer.
-Estas muy coqueta últimamente, Jones- este dejo de besar su cuello para verla a los ojos.
-Como tu dices...eres tu quién me provoca- la castaña sonrió y volvió a atacar los labios de el.
<***>
Tenía su cabeza apoyada en la mesa de madera que había en la gran oficina. Las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos. Su mundo se estaba acabando poco a poco.
-Así que están tras de mi- hablo Jimin llevando su mano izquierda a su cabello para arreglarlo.
-Eso me da a entender que si, lo que le han hecho a tu madre es horrible y no tiene perdón alguno.
Cuando había caído la noche su tío lo llamo dándole la noticia de que su madre se encontraba debatiendo si sobrevivir o morir, al igual que su hermana la habían encontrado en un Callejón pero esta poseía mas heridas que las de Yuno. Meterse a la mafia le estaba costando hasta los huevos. Desde el momento en que su tío le contó aquello se juro a el mismo hacer venganza. No podía quedarse de brazos cruzados y mas cuando se habían metido con algo sagrado, con su hermana y su madre. Haría pagar por cada cosa que le hicieron y les deseaba la muerte.
Tal y como lo había dicho Tony, en el corre sangre de asesino. Este se aferró mas al canto de su tío, quien lo viera en ese estado juraría que se trataba de un niño de cinco años. Una faceta que solo su madre y ahora su tío se han encargado de ver.
Las manos de Tony acariciaban los cabellos negros de su sobrino, este no dejaba de llorar. ¿Cuándo seria el día en que pueda ver las cosas de color rosa?.
-T-tio?- preguntó Jimin quitando las lágrimas de su rostro.
-Dime- respondió este con voz suave.
-Podemos pasar una tarde juntos, extraño caminar de la mano contigo- y de nuevo se aferro mas a el para poder llorar.
-Estaba esperando aquellas hermosas palabras por tanto tiempo. Iremos a caminar un día de estos, te lo prometo Park.
-Siempre serás mi tío favorito- ya no le veía la necesidad de tratarlo como una basura. Ahora, se estaba dando cuenta de que el también era buena persona. El mismo de siempre, al Tony que había conocido cuando era tan solo un bebé.
-Cualquier cosa que sepas de mamá y Yuno no dudes en llamarme- fue lo unció que pidió Jimin antes de salir. Iría a su casa, quería descansar, su vida apestaba y ya no tenia mas ganas de vivir. Quizá, si las cosas sigan así el suicidio seria lo mejor, pensaba el mientras se adentraba en la cama. Una lágrima se vio caer de su ojo derecho. Lo único que quería en ese instante era morir para no sentir mas dolor del que ya estaba sintiendo.
💓💓💓
No se pero para mi este cap no me gusto :v. Últimamente no me gusta lo que escribo, soy kk ;-;
Haré lo mejor que pueda aunque yo sienta que me ha quedado feop 😂😢. Nos vemos en otro capítulo si yo lo deseo, Bai 💓
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#2 ¿quieres jugar? ©park jimin.
FanfictionSu pensamiento cambió desde aquella noche en la cual se hizo amigo del diablo. Prohibida su copia u adaptación.