Maratón 1/4 💓💓.
Se encontraba en la oficina organizando algunos papeles, había llegado algo temprano y eso le gustaba. No se oía casi ningún ruido en todo el edificio. Había dormido bien después de su viaje, su tío lo había llamado y este le dio las gracias por haber cumplido con su trabajo. Quizá tenga que irse de nuevo, según lo que le había dicho Tony. Jimin pudo escuchar como unos tacones de punta hacían resonar todo el pasillo solo. Este mantenía la puerta cerrada. Un pequeño golpe se escucho cuando la castaña estaba en frente de el, estaba pidiendo que le abriera la puerta.
-No quiero que cierres mas la puerta- hablo_____ingresando.
-Vaya manera de decir que me extrañaste- rió Jimin caminando hacia a ella. Esta se encontraba de espaldas quitando su abrigo, Jimin se pego a ella y la abrazo por detrás, empezaba a calentarse por aquel diminuto vestido que traía.
-Por favor Jimin, nos pueden ver- susurró ella al sentir los labios de Jimin en su cuello.
-Eres la culpable por traer un vestido así de corto- este llevo sus manos a los pechos de ella y empezó a tocarlos. Por lo tanto, ella cerró sus ojos y empezó a disfrutar del gran placer que Jimin le estaba propinando. Caminaron hasta el sillón que había al lado de su escritorio y estando al frente se sentó encima de el. Este comenzaba a dejar varios besos por todo su cuello, sus manos fueron a la espalda para bajar la cremallera.
-El debería morir- susurró una persona detrás de ella, esta giro su rostro y se encontró con la misma figura que ve. Este con una risa de psicópata disparo en la cabeza de Jimin, sus manos que se encontraban en la espalda de ella bajaron y su cabeza dio encima del hombro de ella. Minutos después su vestido que era blanco termino empapado de la sangre de Jimin.
Una vez mas se despertaba de golpe, varias veces son las que sueña con que matan a Jimin. Ayer no había sido su día, había ido a trabajar pero nada importante había pasado. Se suponía que Jimin hubiera llegado ayer pero este no se hizo presente. Se incorporó mejor en su cama y miro la hora de su móvil, 3:30am le indicaba y, al parecer siempre se despertaba a esa hora algunos días. Empezaba a tener miedo de dormir.
Dejo su móvil encima de la mesa de noche y volvió a dormir. Tenia que hacer el intentó, ya no podría seguir soñando con eso. A los 30 minutos ella ya se encontraba dormida de nuevo.
<***>
El sol le indicaba a la castaña que la mañana ya había llegado. El sonido de los pájaros le hacia entender que hoy había de ser un día hermoso. El cielo estaba totalmente azul sin rastro de alguna nube gris. Agradecía una vez mas por no haber soñado de nuevo con Jimin. Se levanto con algo de pereza y camino hacia su baño.
Estando ya arreglada bajo a la primera estancia. Hoy tenia pensando en desayunar en el trabajo. Tomo su bolso, las llaves de su casa, su móvil y su cartera y salió de su hogar.
El edificio se encontraba casi vacío, esta saludo a Marta y subió hasta llegar a su piso, dejaría su bolso ahí y bajaría de nuevo. Y tal como pasaba en su sueño, la puerta de la oficina se encontraba cerrada y Jimin estaba en su escritorio organizando algunos papeles y metiendolos en una bolsa color café. Ella empezó a dar varios golpes para que el se diera cuenta de que ya había llegado.
-No quiero que cierres mas la puerta- hablo ella caminando a su escritorio.
-Vaya manera de decir que me extrañaste- rió. Esta tan solo lo miraba con miedo. Hasta ahora todo marchaba tal y como lo había soñado.
-¿Pasa algo?- preguntó Jimin al ver que ella solo tenia en su rostro expresión de miedo.
-Nada, no pasa nada- abrió su bolso y sacó su billetera. -vendré en un momento- la mano de Jimin la detuvo.
-¿A dónde vas?- preguntó el.
-Iré a desayunar ya que no quería en mi casa.
-Te acompañó- tomo la mano de ella y salieron de la oficina. Caminaban por los pasillos en silencio, muy poco personal empezaba a llegar. Todo el aire que Jimin respiraba a tranquilidad se fue cuando vio a Spencer. Estaban frente a frente. Ellos aun estaba tomados de la mano,_____al verlo de una soltó la de el. La ira en Jimin empezaba a notarse.
-Tenía muchas ganas de verte, Spencer- hablo Jimin ajustando su corbata. -Dime...como te sientes al mentirle a_____- y este se encontraba jugando con la mente de el, la castaña aun no comprendía nada de lo que estaba pasando.
-No se de que me hablas pero yo te hago una pregunta, ¿qué haces con mi novia?- y era obvio que se encontraba celoso.
-Pensé que le habías contado_____- hablo el mirando a la castaña. -estoy con ella porque vamos a desayunar algo que tu tampoco no puedes hacer como novio por estar buscando placer en una prostituta- los ojos de la castaña se abrieron como platos al escuchar las palabras de Jimin.
-Bueno supongo que por hoy diré solo eso- este miro con odio a Spencer y tomo la mano de_____para ir a la cafetería. Ambos se encontraban en el ascensor, un gran silencio se había apoderado de ellos dos.
-¿Qué fue lo que paso arriba?- preguntó ella rompiendo el silencio.
-Lo dije por impulso eso es todo- el semblante de Jimin había cambiado por completo. Sus venas empezaban a marcarse en sus manos al igual que su cuello, signos de que estaba enojado.
-¿Estás enojado?- preguntó ella.
-No lo estoy- respondió el ignorando la mirada de ella. Esta solo suspiro y se recostó en la pared que poseía el ascensor. No le gustaba ver a Jimin enojado.
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#2 ¿quieres jugar? ©park jimin.
FanfictionSu pensamiento cambió desde aquella noche en la cual se hizo amigo del diablo. Prohibida su copia u adaptación.