De regreso

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Edward pov. 

Mi hermosa esposa y yo habíamos regresado de Roma hace una hora estábamos en el aeropuerto de Alaska esperando a que nuestra familia vinera por nosotros. 

-Papí -escuche la voz de mi pequeña. 

Bella y yo giramos y efectivamente Lizzie venía corriendo hacía nosotros y detrás de ella venía toda nuestra familia. 

-Princesa -tome a Lizzie en brazos. 

-Hola mamí -saludo mi pequeña. 

-Hola hermosa -mi esposa le dio un beso en la mejilla a nuestra princesa. 

-¿Cómo te portaste? 

-Mien -contesto. 

Mi Bella y yo le sonreímos. 

-Hola hermano -saludo Alice. 

-Hola Alice. 

-Hijo, te extrañe -me abrazo mi madre como pudo debido a que tenía a Lizzie en mis brazos-. Bella -la unió a nuestro abrazo. 

-Hola Esme -dijo. 

-¿Y bien que me trajeron? -pregunto Emmett. 

Rosalie le dio un golpe en la cabeza... 

-Auch bebé... -hizo un puchero estilo Alice... pero Rose lo ignoro y nos abrazo. 

-Bienvenidos -nos dijo. 

-Gracias -contestamos yo y mi Bella al mismo tiempo. 

-Y sí Emmett te trajimos algo -dijo mi Bella. 

Emmett sonrió como niño pequeño, a veces dudaba si no se había comido uno en otra vida o en esta. 

-¿Papi, mami? -hablo nuestra princesa. 

-¿Qué sucede pequeña? -dije. 

-¿Y mi manito? -hizo un puchero. 

-Está en la pancita de mami.... -dije tocando el vientre de Bella. 

-MAMI POQUE TE LO COMITE... PAPI PDIA HABETE HESHO DE COMEL -mi princesa se llevo las manos dramáticamente al cabello. 

Reímos ante la acción. 

-Princesa lo que tu padre quiere decir es que esta creciendo dentro de mí y lo veremos hasta dentro de unos meses. 

-Ahhh -sonrió. 

Amaba tanto a este pequeño amor chiquito que tenía en mis brazos. 

-Bueno porque mejor no vamos a casa descansan comen y nos cuentan como se la pasaron -propuso mi madre. 

-Esta bien -dije tomando la mano de Bella. 

Salimos del aeropuerto, Emmett me había hecho el favor de traer mi auto mientras que Rose traía el Jeep. 

Subimos a nuestra pequeña al auto, abrí la puerta del copiloto para mi hermosa esposa y antes de que entrara completamente la tome de la cintura y la acerque a mí; la bese profundamente. 

Un carraspeo se escucho detrás de nosotros. 

-No te basto con la luna de miel que todavía quieres más -dijo Emmett detrás de nosotros. 

-Pensé que ya te habías ido -murmure entre dientes. 

-Viene para asegurarme que fueran a casa y no se detuvieran en el camino. 

-Emmett te recuerdo que Lizzie viene con nosotros -dijo Bella. 

-¿Y eso los detendría? -levanto las cejas-. Se puede quedar dormida en el camino. 

Una vida llena de recuerdosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora