Revolución de hormonas

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Edward pov. 

 Ya habían pasado dos meses desde que mi familia había venido a mi casa, Bella estaba en el sexto mes de embarazo y sus hormonas estaban en medio de una revolución, era como si estuvieran en una guerra campal. 

Había regresado a la universidad aún me faltaban dos años para terminar medicina y a Bella bueno ella tuvo que salirse sin siquiera a ver terminado el primer año. Pero acordamos en que cuando naciera el bebé nos la arreglaríamos. 

Ya eran cerca de las seis de la tarde, me había retrasado en la universidad, subí al auto y conduje camino a casa, esperaba que Bella haya hecho algo de comer me estaba muriendo de hambre, además de que la extrañaba. 

Llegué a casa, abrí la puerta y una pequeña salto a mis brazos. 

-¡Papi! -grito Lizzie. 

-Princesa -le di un beso en la mejilla. 

-¿Y mamá? 

-En la cocina -sonrió, la deje en el suelo y fue hacia la sala para ver un poco la tele. 

Deje mi mochila sobre uno de los sillones y luego camine hacía la cocina.

Mi Bella estaba parada delante de la estufa, parecía que estaba cocinando. 

La abrace por la cintura y recargue mi mentón en su hombro. 

-Hola mi amor -susurre. 

-Mmmm... hola -dijo de manera seca. 

-¿Sucede algo? 

-Tendría que suceder algo. 

Suspire. 

Me aparte de ella, apague la estufa... le di la vuelta para que me viera a los ojos. 

-En este momento me vas a decir que es lo que pasa. 

-Ya te dije que no pasa nada, y si me permites pero estoy cocinando. 

-No, no te permito. 

-Edward... 

-Bella... 

-Bien, quieres saber que me pasa -hizo una pausa-. ¿Qué mierdas son estas horas de llegar? 

Abrí los ojos de sorpresa. 

-Se me presento algo de última hora en la universidad.

-Claro eso dices -me empujo y camino hacia la mesa y se puso a cortar verduras con mucho coraje. 

Me daba miedo que se fuera cortar. 

-Bella, amor, deja ese cuchillo. Vamos a hablar. 

-¿Qué lo deje? que lo deje -se puso de pie muy rápido con el cuchillo apuntándome-. No me digas que hacer. 

-Bella, tranquila. Baja el cuchillo amor. 

El cuchillo estaba a unos centímetros de mí. 

-No quieres que este en el hospital de nuevo ¿verdad? yo sé que me veo sexy con la batas del hospital pero...

Bella dejo el cuchillo en la mesa y se sentó de nuevo con la cabeza gacha, de pronto escuche un sollozo. 

Me arrodille frente a ella y tome su rostro entre mis manos. 

-¿Amor? ¿Qué pasa? No llores, no me gusta que llores. 

Se mordió su labio inferior. 

-Perdóname, soy una tonta por poco y te... 

Una vida llena de recuerdosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora