Una vida llena de recuerdos

Detenida

Edward pov. 

Tome a Bella de la cintura atrayendola a mí lo más que su vientre me permitía. La pobre chica a la que había golpeado estaba sangrado de la nariz al parecer se la había roto. 

-Tranquila -susurre en su oído. 

-No me puedo tranquilizar cuando esta zorra va tocando traseros por ahí -dijo Bella furiosa. 

Lizzie se mantenía observando la situación como si estuviera analizando lo que estaba pasando. 

-Bella... 

-No me digas que este tranquila, oh es que a caso te gusta -me grito. 

-¿¡Qué!? por supuesto que no -dije. 

La chica se coloco detrás del mostrador tenía cara de miedo. 

-Entonces no la defiendas. 

-No estoy defendiendo a nadie. 

-Si lo estas haciendo... eres un idiota no cambias. 

Alce una ceja. 

-¿No confías en mí? no puedo creerlo a pesar de que te lo he demostrado -dije furioso. 

-Ya no se que creer. 

-Dime que escuche mal y no acabas de decir eso... 

Bella agacho la cabeza, no se atrevía verme a los ojos. 

Iba a decir algo pero la voz de la chica me interrumpió no había puesto atención a ella desde que Bella y yo comenzamos a discutir. 

-....vengan cuanto antes -termino de decir la chica. 

-Bella... 

-Es mejor que no digas nada -suspiro. 

En ese momento unos policías entraron a la muebleria. 

-Es ella -dijo la chica corriendo hacía ellos mientras señalaba a Bella. 

Lizzie se aferro a mis piernas. 

Los policías se acercaron. 

-Señorita queda usted detenida por agresión pública -dijo uno de los policías. 

-¿Qué? -grito Bella-. A la que deberían llevar a prisión es a esta, por acoso. 

-Podrían soltar a mi esposa por favor, esto debe ser un error -dije, tome a Lizzie en mis brazos. 

-Ningún error esta tipa me golpeo -dijo la chica. 

-Porque estabas manoseando a mi esposo. 

-¿Es eso cierto? -pregunto uno de los policías. 

-No -mintió la tipa-. No me gustan los hombres. 

No podía creer que les estuviera mintiendo a los policías. 

-Esta mintiendo -dijo Bella. 

-La única mentirosa aquí es usted, así que hasta que no hable con el jefe la comisaría haremos algo. 

-Pero... 

-Pero nada ahora venga con nosotros -le colocaron unas esposas a Bella. 

-No pueden llevársela esta embarazada. 

-Debió de haber pensado en eso cuando golpeo la señorita. 

Trate de impedir que se llevaran a mi Bella, pero los policías me dijeron que no intentara nada en ese momento, en la comisaria me dirían lo que tenía que hacer.