Be with you // Bradley Simpson

Introducción a la historia

Abro el sobre rápidamente, mientras mis manos tiemblan y por un momento siento que no voy a poder ser capaz de abrirlo y mis cuerdas bocales estallan y el enorme estruendo rebota por todas las paredes de el pequeño pasillo del piso y espero no haberlas despertado, pero es inevitable. Me siento en el suelo y abrazo lo mas fuerte posible la carta, apegándola en mi pecho. Alzo la vista después de conseguir recuperar un poco la respiración después de tanto entusiasmo y veo a mi madre con el pijama mirándome esperando una respuesta y a mi hermana apareciendo detrás de ella rascándose los ojos somnolienta. Supongo que soy la única que no ha podido dormir en toda la noche, aun que lo supongo. Sé que a ellas no les hace ilusión perderme ni que me valla, pero es una gran oportunidad, y he estado esperando durante dos años a que esta carta llegara, y al fin, a ocurrido.

Yo, Nadia Johnson Prismar, me han concedido el permiso de mi vida, haciendo así que la beca que tanto he ansiado, llegue a mi. Le doy a mi madre la carta y se tapa la boca y observo como sus ojos, en cuestión de segundos, pasan a ser completamente cristalinos, me mira y me sonríe.

La verdad, no me quiero separar de ellas. Me adoptaron cuando tenía ocho años, y he pasado casi toda mi vida con ellas, aun que las decisiones las decidían los jefes del estado que se encargaban de la protección de menores, o mas bien llamados, [...]. Me separaron de mis padres por casi matarme, nunca mejor dicho. Con tan solo siete años, me dejaron tirada en un callejón de borrachos y drogadictos para irse ellos a inyectarse de sus sustancias y después gritarme que yo fue la culpable, que yo les hice eso, que todo lo que me estaba pasando era mi culpa. A la semana siguiente, esta gente me salvó y tan solo estuve un año cuando se me concedió una adaptación que tardó tres años en hacerse fija, pero como tenía ya bastantes capacidades y madurez por muy pequeña que fuera, les pedí que siguieran siendo mis tutores legales y que las personas que me adoptaran tuvieran parte del poder ya que, para ese entonces, no podía todavía fiarme de nadie. El echo de pensar que yo podía destruir a esta mujer y a su hija y volverlas como a mis padres biológicos.... No quería que nadie sufriera, y hoy en día, todavía sigo pensando lo mismo aun que, las pastillas y el psicólogo me mantienen tranquila, pero sabemos todos nosotros, que no podrán ayudarme con estas pesadillas que me dan insomnio.

Hace dos años, me premiaron con el mejor esfuerzo en la Educación Secundaria y con los comentarios buenos de los profesores y mis trabajos acabé ganando mucho prestigio. Jamás he querido demostrar que puedo estropear algo o dañar a alguien, y con ellos la perfección ayuda en todos los sentidos. Por lo que, los profesores fueron viendo poco a poco mi forma de escribir y expresarme ante el público y sin mi consentimiento, decidieron mandarlo a donde yo, un año antes, le había comentado a mi tutora del instituto de confianza que quería ir. A los pocos meses me informaron que me daban una beca para poder irme a Birgmingahm y hacer la carrera universitaria. No lo podía creer, era como un sueño echo realidad y me había dado cuenta que la perfección daba sus frutos. Por lo que, informa rápidamente a mis tutores legales y tuvieron que hablar acerca del tema hasta ahora. Esto confirma que me dejan, que me iré con sus consentimiento a un país al que siempre quise ir.

Mi hermana coge la carta y la relee varias veces. Es rubia, alta, con gafas de pasta gruesa y negra con unos ojos enormemente negros que cuando la conocí me llegaban a asustar. Tienes unas pequeñas pecas por las mejillas y unos labios muy rosados. Mi madre es rubia también, con el pelo muy corto. Le gusta rapárselo y que le crezca un poco. Es mas baja que mi hermana y las arrugas ya se le notan, aun que se conserva bastante bien. Mi hermana no Es una chica lista, pero no lo relaciono con lo de ser rubia, si no por que jamás se ha parado a estudiar. Siempre esta tirada en la cama y a veces ayuda a mi madre con el trabajo. Es abogada, pero cuando tuve bastante conocimiento y capacidades para elegir por mi misma, le dije que yo no me quería fijar en su dinero ni en la clase de vida a la que me podía llevar. Ella siempre fue muy caza fortunas hasta que consiguió hacer su propia fortuna con su propio bufet de abogados y eso era de las muchas cosas que nos diferencian a mi hermana y a mi. Ella es muy egoísta en ese sentido, siempre tiene que tener lo último en moda de deporte. Le gusta vestir callejera pero con clase y marca, y se podría decir que yo soy mas de vestir formal y limpia. Siempre supo marcar el territorio y eso supongo que lo habrá heredado de su madre ya que las dos imponen sin que nadie se lo pida. Cuando las conocí, su presencia me transmitía incomodes y con ellos, siempre acababa teniendo miedo a lo que podía decir para no ofenderlas. Supongo que fue por eso que quería seguir dependiendo de ellos, no quería ser la misma niña mimada como mi hermana.