Capítulo 15 EDITADO

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Me quede como tonto parado viendo la puerta por más de 5 minutos.

Me subo al auto echando humos por las orejas deseando llegar pronto a la manada.

Uno, dos, tres intentos de hacer arrancar el auto pero esta chatarra se echó a perder.

Comienzo a pegarle al volante dejándolo medio torcido. En eso escucho una puerta abrirse seguido de un olor a malvaviscos.

Miro inmediatamente a mi mate quien camina rápidamente hacia mí debajo de un paragua.

-Ten- estira su mano al estar al lado mío dejando al descubierto una toalla- llamare a un uber para que te vayas para tu casa. Con tu auto sin una puerta es un poco peligroso- habla rápidamente atropellando algunas palabras- te traje esta toalla para que te seques por si es que no quieres entrar a mi casa para que te cambies de ropa. Puedes esperarlo acá, por lo menos estando en tu auto no te vas a seguir mojando.

No lo entiendo, de verdad que no lo hago.

Ya estando dentro de su casa me lleva a su habitación para que este cómodo y me pueda cambiar de ropa. Las prendas que me pasa consistían en un pantalón de hombre un poco grande, una correa y una polera gris con un chaleco.

Mientras tanto me cambiaba ella prepararía unos chocolates calientes para calentar el cuerpo.

Miro con detenimiento su antigua habitación y noto que era bastante sencilla; casi todo era rosa y con decoraciones de una niña pequeña.

Sonrió, tiene un gusto bastante femenino, que irónico.

Luego de vestirme me tiro en su cama y miro el techo mientras espero a que vuelva.

Escucho unos murmullos por lo que agudizo mi oído pudiendo así, escuchar claramente.

-Cómo se te ocurre, ese niñito no es así- ¿se referían de mí? ¿Cuándo llego su madre?

-Por favor dejen de hablar de él, recuerden que está arriba- efectivamente soy yo. Me enderezo en la cama poniendo mucha más atención a lo que dicen.

-¡¿Está en tu habitación?!- se altera su madre.

-No sé por qué haces tanto escándalo mujer, si el chico no aparenta ningún peligro, quizás vayan a ver unas películas acostados y después se ira.

-Cómo no hacerlo si su pololo está en la habitación de mi hija, quizás que cosas harán cuando nos durmamos.-escucho como alguien se ahoga, está más que claro quien fue.

Sonrío.

-Marta por dios, no dejes volar tu imaginación, no por ser el primer hombre que nuestra bebe trae a la casa será su pololo- escucho un "si" de parte de Bianca- además, Jaspers es gay, no sé de qué te preocupas.

Esta vez me ahogo yo con mi saliva.

¡¿Qué quien es gay?!

¡Por favor si la única persona en esta casa que gusta de su mismo género es su hija, no yo!

.....

El tiempo paso y las cosas se fueron arreglando para mejor.

Ella ya no se junta tanto con mi beta ya que esta tiene mucho por hacer así que debes en cuando Bianca me llama para que nos juntemos.

Se ríe más seguido, es más cariñosa y me cuenta de a poco cosas de ella. Ante sus ojos soy como el mejor amigo que nunca tuvo.

¿Creerá que soy gay?

Supe que todas las mujeres desean tener un amigo gay, porque no sé qué estupideces que la verdad no me interesaba saber.

Sin embargo hay días como hoy que se mantiene distante; no responde mis llamados, cuando la voy a buscar a la universidad me esquiva o cuando hablamos no me mira.

Aburrido de su comportamiento voy a su casa y golpeo la puerta esperando a que me abra pero tal parece que no hay nadie, su olor es bastante leve. Me dirijo al patio de atrás y abro la ventana de su cocina con la intención de pasar pero me quedo estancado a medio camino. Trato de retroceder pero no sedo ni un poquito.

Mierda. Vuelvo a intentarlo logrando quedar más atrapado que al principio.

Suspiro derrotado, tendré que esperar a Bianca para que me ayude. Espero que no se enoje mucho.

Mi Mate es ¿lesbiana? ~EDITADO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora