Capítulo 31 EDITADO

6.5K 509 12
                                    

El calor me comienza a sofocar de apoco y la necesidad de tener más de ella aumenta.

Separa nuestros labios para respirar pero no espero y comienzo a besar su cuello mordiendo levemente sacándole un gemido.

Todo mi cuerpo se enciende, comienzo a moverme y recuerdo que estoy desnudo sobre ella en un bosque.

-Vamos a otra parte- me las arreglo para decir aunque mi voz sale más ronca de lo normal debido a la excitación-. Por favor no te asustes me voy a volver a transformar en un lobo porque hice mierda mi ropa- miro sus labios y los veo hinchados, rojos y apetecibles- aunque no tengo problema en irme así.- Ella me queda mirando unos instantes hasta darse cuenta de lo que estoy hablando y se pone roja de la vergüenza. Se tapa la cara con ambas manos pero yo se las corro.- por favor prométeme que cuando me transforme no te iras corriendo. Promételo.

Asiente con la cabeza aturdida.

Me quito de encima transformándome. Al girarme la veo con los ojos nuevamente tapados por lo que me acerco y con el hocico le toco las manos suavemente pero aun así se exalta y pega un gritito.

Al sacar las manos me ve con asombro, busca por todos lados al parecer a mí como humano pero al no encontrarme me vuelve a mirar con duda.

-¿Jaspers?- saco la lengua lamiéndola- dios, es tan raro esto.-Se levanta y comienza a caminar pero se detiene un par de metros más haya-¿Qué esperas? Llévame a donde hablaremos toda esta mierda antes de que me largue a correr.

.....

Llevo horas explicándole detalladamente todo y aclarando sus dudas pero es como si no entendiera nada. Tampoco dice ningún comentario, habla lo justo y necesario cuando tiene alguna pregunta.

-Por favor dime algo, lo que sea.- me retuerzo los dedos y la tomo para sentarla en mi piernas.- si deseas que te de un tiempo está bien, puedo comprenderlo pero no me pidas que me aleje de ti por siempre, porque no lo hare, ya no. Tienes que entender que eres para mí, no te engañes a ti misma, te gusto y si me dejas puedo hacer que me ames como yo lo hago.

-Es increíble, ósea no se, esto nunca me lo imagine y para que mentirte, estoy aterrada. Solo... solo dame un poco para pensarlo- se levanta incomoda de mi pero yo la detengo con el brazo.

-Ahora dime ¿Por qué mierda me mentiste sobre que te gustaban las mujeres?- gruño causando que ella se gire a verme y se ponga roja como un tomate.

-Eh... sobre eso... preferiría no hablar de eso- trata de zafarse pero yo de un leve tirón la pongo entremedio de mis piernas y hago que se siente en una de estas.

-Oh no, nada de eso, Bianca- me acerco a su oreja y le susurro-. tú me lo dirás ahora mismo. No sabes lo que pase al pensar esta estupidez, me prohibiste de ti- bajo hasta su cuello en la parte donde su olor es más intenso y dejo caer mis labios ahí por un largo tiempo.

Es como si todo el tiempo que estuve sin ellas mis ganas de sentirla se intensificaran, o quizás solo es el hecho de que le gusto.

-Mira, aun no entiendo mucho sobre la intensidad de tus sentimientos así que también tengo que pensar eso, pero yo creo que lo siento- se retuerce pero no se esta vez sí es por incomodidad o por la excitación de mis labios en su cuello. A duras penas se aleja y antes de llegar a la puerta se gira- no lo voy a negar, me gustas y mucho más de lo que yo quisiera, simplemente se me hace raro que quizás toda mi vida la pase con una persona que se puede transformar en un animal.

-No es un quizás- gruño.

-Da igual, solo déjame pensarlo.

Le levanto exasperado.

-Maldita sea no la pienses- me acerco a ella pero no la toco- te vas a matar la cabeza pensando, tratando de encontrar una respuesta que déjame decirte no encontraras. Simplemente déjate seducir por mí, déjame amarte y déjame recibir tu amor. Estoy loco por esperar que me mires solo a mí, que me necesites como yo lo hago, que me pienses aunque sea la mitad de lo que yo te pienso. Te quiero a mi lado y ya no solo como una amiga. Déjame demostrarte que tener un novio hombre lobo no es tan malo.

-Es que...

-Bianca- digo con reproche.

-Está bien, haremos las cosas a tu modo- suspira- sedúceme.

-Oh hermosa Bianca, créeme que lo haré.

Mi Mate es ¿lesbiana? ~EDITADO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora