Wingardium Leviosa [Romione]

No con ella

Portavoz: Ron.

-¡Hermione!

Corrí hacia ella. Estaba en el suelo. Se había desmayado.

Oh, por favor...

Iba a asesinar a alguien. En ese mismo momento podría matar a Malfoy, Roockwood y Voldemort y ni siquiera despeinarme.

Lucius Malfoy miró a su hijo.

-Llévate a la sangre sucia al calabozo y que Greyback se ocupe de ella.

Malfoy se acercó a mí.

Tomé a Hermione entre mis brazos, enfurecido.

-¡No te acerques! ¡No te metas con ella! ¿Me oyes bien? ¡No con ella!

Draco pareció asustarse un poco, pero siguió avanzando.

Invoqué toda mi magia.

Merlín, ayúdame a sacar a Hermione de aquí para que esté a salvo.

-¿Ron?-Preguntó la voz temblorosa de mi amiga.

-Yo te sacaré de aquí, lo prometo.-Dije.

Reuniendo todas mis fuerzas, apunté mi varita hacia Malfoy padre e hijo, y hacia Bellatrix.

-¡Desmaius!-Grité con todas mis fuerzas.

Nunca creí que un hechizo pudiera ser tan potente.

Bellatrix y los dos Malfoy cayeron hacia atrás y chocaron con la pared.

Dobby Apareció.

-Vámonos.-Dijo Harry.

Dobby sujetó mi tobillo y la mano de Harry y se Desapareció.

Cuando llegamos a la casa de Bill y Fleur, El Refugio, me dejé caer de rodillas. Aún cargaba a mi amiga.

-¿Ron?-Preguntó su voz otra vez.

Jadeando, me puse de pie y caminé hacia la casa mientras Harry le agradecía a Dobby por llevarnos vivos.

-Ya estamos bien. Estamos a salvo.-Le dije con dulzura.

Ella se acurrucó en mi pecho e hizo una mueca de dolor.

Suspiré.

Abrí la puerta de una patada bastante suave. No quería ser agresivo sino que tenía las manos ocupadas.

Fleur corrió hacia mí.

-¡Gon! ¿Qué ocuguió?

-Hermione está herida.

-Estoy bien...-Protestó Hermione.

-Calla, te vas a poner bien.-Dije con suavidad.

La abracé más contra mí.

-Déjame llevagla aguiba...

-Yo la llevaré.-Dije con firmeza.

Casi la perdía una vez. Perderla otra no era una opción.

Cargué a mi amiga por las escaleras, hacia el primer piso.

Fleur abrió una puerta a nuestra derecha y me dejó pasar.

Dejé a Hermione sobre la cama.

-Calma, vas a estar bien.

Ella hizo una mueca de dolor.

Fleur me miró.

-Tengo que examinagla y hacegle unas guevisiones. Tienes que salig.