Capítulo 10 {Escape}

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Michelle

Ya había pasado toda la mañana en el hospital y lo único que quería era que llegaran los últimos análisis que me dirían si podía ir a casa. Todo este tiempo lo había pasado hablando con Vic, nos contamos nuestros problemas mutuamente. Yo le conté cómo me llevaba con mis padres, él me contó cómo su madre los abandonó después de que muriera su padre. Yo le dije todo lo que pasé en los institutos, él me dijo que nunca tuvo verdaderos amigos hasta llegar a la E.S.O. Yo le conté que solo tenía a Kellin y Vic me dijo que ahora le tendría a él también. Se lo agradecí con una tímida sonrisa justo antes de que me llamaran para que fuera a hacerme los análisis.

-Quiero irme. -Me quejé por vigésima vez.

-Ya lo has dicho. -Respondió Vic jugando con nuestros dedos entrelazados. Bufé.

-Me aburro. Vamos a jugar. -Propuse. Me miró con una ceja levantada.

-¿A qué?

-Las cinco preguntas. -Me encogí de hombros. -Empiezo yo: ¿Cuántos años tienes?

-Diecinueve. -Respondió con un suspiro. Abrí mis ojos con sorpresa.

-Pensé que tendrías los mismos que yo. -Comenté.

-¿Cuántos tienes? -Cuestionó curioso.

-Diecisiete. Lo adivinaste antes. -Respondí divertida. -¿Dónde naciste? -Hice mi segunda pregunta.

-Aquí en San Diego. ¿Tú? -Preguntó de nuevo, haciéndome reír.

-¿Vas a hacer las mismas preguntas que yo todo el tiempo? -Reí.

-Si te respondo contará como una pregunta del juego. -Levantó una ceja.

-Nah, entonces déjalo. Nací en Oregón. -Respondí su anterior pregunta. -¿Cuál es tu meta?

-Hum... No sabría respondertelo ahora mismo. Supongo que alcanzar mis sueños. -Se encogió de hombros, dejándome con ganas de preguntar por sus sueños. -¿Tienes novio? -Levantó ambas cejas, curioso.

-No, la verdad es que el último fue hace dos años. -Suspiré. -¿Tienes novia? -Pregunté con verdadero interés. No sé por qué, pero ansiaba saberlo.

-¿Ahora quién repite a quién? -Se rió divertido y noté mis mejillas arder.

-Ya tenemos los resultados. -El doctor interrumpió lo que iba a decirme Vic, provocando que quisiera matarle por dejarme con la duda.

-¿Cuáles son? -Preguntó Vic apretando ligeramente mi mano.

-Bueno, puede irse, está bien. Solo tiene que comer en más cantidad y seguir algunas recomendaciones. -Informó el doctor.

-¿Recomendaciones? -Cuestioné, perdiéndome en la palabra.

-No pasar más de dos horas sola y visitar un psicólogo dos veces por semana. -Asintió el médico.

-No necesito un psicólogo. -Afirmé molesta.

-Responda una pregunta, señorita Quinn; ¿Quién le hizo esas heridas en el brazo? -Cruzó sus brazos, en espera de mi respuesta, pero permanecí callada, mirando a Vic suplicante. -Bien, creo que eso afirma que necesita un psicólogo. Le aconsejo que a la primera cita vaya acompañada, para que puedan ser respondidas las preguntas que se vea incapaz de responder sola. Aquí tiene un par de profesionales recomendados. -Me tendió un papel, el cual cogió Vic por mí, ya que no hice amago de extender la mano.

-Gracias, doctor. -Dijo guardando el papel en su bolsillo.

-Hay algo más. -Informó mirándonos. -Para que le sea dada el alta, alguien mayor de edad tendrá que firmar su salida. -Añadió serio. Tragué saliva. Estoy jodida.

Saving You {Vic Fuentes}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora