Perdido en sus ojos [Gay] (TERMINADA)

Capítulo 22 | Reliquia.

           

Minutos después de darle la bienvenida al nuevo año en la ciudad de la luz, el griego bebió unas tres latas de cerveza. Yo, decidí declinar por la seguridad de ambos. No era nada fan del alcohol, pero por ser el primer día del año e ir con mi novio decidiría romper mis ya típicas barreras. El hotel estaba a casi tres kilómetros de distancia.

—Eh, que estuvieron geniales las luces en el c-cielo —dijo el de Grecia, riéndose de nueva cuenta. Le empezaba a notar una muy leve borrachera, pero en vez de incomodarme, me sentía más cómodo. Algo extraño, lo sé.

Iba abrazado a mí y caminábamos por la París que estaba de fiesta aún. El reloj de mano del griego marcaba la una de la mañana. Mi brazo me dolía un poco. A pesar de eso, decidimos ir a por una botella de whisky más barato que hubiera en aquella licorería que estaba de paso hacia el hotel.

Llegamos al hotel, después de casi media hora más. La chica que un día atrás nos había recibido estaba en la recepción y nos miró con una sonrisa un tanto honesta.

—Espero que estén disfrutando de la ciudad y de su estancia aquí —nos saludó.

—La ciudad n-no está mal. Lo q-que realmente es molesto e-es que n-nadie hable i-inglés—respondió el de ojos grises.

Yo me sonrojé e intenté remediar la mala respuesta que mi chico había dado, pero justo en ese momento llegó un huésped con la recepcionista castaña. Ya en nuestra habitación, logramos abrir la botella de whisky de 12 euros.

—Espero que bebiendo esto no consiga fracturarme mi brazo derecho —me mofé, sirviendo un poco en un vaso de vidrio.

Lo bebí e inmediatamente, hice una expresión de desagrado; era fuerte su sabor y en definitiva no me lo veía venir. Kyros rio y me quitó la botella; le notaba con un poco de sueño además de estar de risueño.

—Esto sabe horrible, pero es año nuevo —me arrebató la botella y bebió de ella. Después, se acercó a mí y empezamos a besarnos apasionadamente.