Capítulo 31 | Una enemiga más.

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Les dejo el primer capítulo —de dos— del maratón de esta semana ☻. Espero que lo disfruten. Lean el aviso del final, por favor☺ ♥

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*Narra Kyros*

La prórroga de Trevor había terminado y, haríamos un recorrido de reconocimiento según sus palabras. Se trataba de ir a algún bar o casino y observar a los guardias y sobre todo las cámaras de seguridad. Aunque tampoco robaríamos la caja fuerte de los lugares, las cámaras para el viejo Miller eran un verdadero obstáculo.

—Chico, te daré la paliza de tu vida si no tienes tus cinco sentidos activados. Tienes que observar bien las malditas cámaras de videovigilancia.

—Que ya lo has dicho antes.

Respondí con desdén. Tal vez y así era como mi vida de delincuente comenzaba. No lo sabía. Lo único agradable de compartir departamento con Trevor era que, jamás se había referido hacia mí con insultos por ser gay.

Como sea, mi primera vez sería siendo el señuelo. Pero primero era eso del reconocimiento. Fuimos a un pequeño casino con algunos clientes que eran ricos.

—Escucha chaval, si mañana tenemos éxito te daré el 10 por ciento de las ganancias. Así que presta demasiada atención —explicó, antes de entrar al lugar.

Máquinas tragamonedas —típicas en un casino— por doquier. Aunque no era como alguno de Las Vegas, supe que en estos lugares un estafador como Miller hacía una fortuna. La cuál, por una extraña razón no se veía reflejada en él. Tal vez y si era el Robin Hood de los barrios pobres de la ciudad.

 Tal vez y si era el Robin Hood de los barrios pobres de la ciudad

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Al fondo, estaba el área de póker. Hombres y mujeres con potencial para alimentar a medio barrio estaban jugándose la partida del día. Casi pude notar cómo brillaban los ojos de mi acompañante.

Hizo una seña con sus ojos para que me pusiera en marcha. Eso haría. No tenía más remedio. No podía hablar con Damien y mucho menos con mi padre. No quería. Con Noel era todo distinto, pero, no estaba del todo convencido de ir a buscarle.

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*Narra Josh*

Delante de mí tenía una escena que parecía sacada de una película de drama juvenil. De esas de animadoras locas. Jessica le había propinado un buen golpe a mi amigo y Alice hacía entrar en razón a su amiga loca. Marcus también en el lugar, estaba al lado de Noel.

—¿Estás bien? —de pronto escuché decir al de ojos verdes.

El chico de América no respondió. Aunque tenía relativamente poco tiempo de conocerle, esa respuesta era un retundo no. Llegué hasta donde aquellos dos.

Perdido en sus ojos [Gay] (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora