Capítulo 29

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—¿Y esa cara? —preguntaba Johanna con burla al ver entrar a Fernanda a la casa en la que vivían.

—No te importa.

—¡Uy! que enojada me saliste hermanita —sonrió con burla.

—Mira Johanna, a ti se te ocurre meterte conmigo una vez más y enserio me vas a conocer por las malas, porque por la buenas vaya que te he salvado el pellejo varias veces, pero por las malas yo misma me voy a encargar que todo el mundo sepa la fichita que eres —dijo con furia sujetando a su hermana por la quijada.

—A mí no me amenaces —se soltó Johanna.

—Te lo estoy advirtiendo, porque ya me cansaste con ese juego de niña perfecta, pero que en verdad es la peor porquería que puede haber —terminó y sin decir más nada se fue a su cuarto en el segundo nivel.

Todas se habían quedado perplejas por la actitud de Fer, nunca la habían visto de esa forma. Incluso Coralina quien estaba en la sala y se dio cuenta de todo se sorprendió y corrió detrás de ella para saber qué era lo que había sucedido.

—¿Estas bien? —preguntó Sonia.

—Sí —respondió Johanna, tragando saliva—. No entiendo qué le pasa ¿Qué le hice? —se victimizo.

—Oye tampoco exageres, si es cierto que se pasó porque nunca la había visto así, pero recuérdate en el lio que la metiste con lo de que era mentira que había salido a ayudarnos.

—Sí, pero eso fue el sábado, no hoy. Y ni el sábado, ni el domingo me dijo nada.

—Sabes, yo más creo que se peleó con Jeremy. No te enojes, pero no te lo había contado porque no estaba segura, pero ahora toda cuadra a la perfección. Jeremy y Fernanda volvieron, me enteré una noche de que la escuché hablando con Carolina al respecto, pero luego, luego me cacharon que las estaba espiando y ya no dijeron nada. Por eso no estaba segura y no te quise decir nada. seguramente cuando Fernanda vio todas las atenciones que Jeremy tuvo contigo el día de la borrachera, se enojó y hoy debieron haber terminado —dijo Sonia con cautela.

—Igual me hubieras contado —se molestó Johanna—, aunque ya que, lo bueno es que se terminó, y sí tienes razón, no puede haber mayor razón que esa. Jeremy y Fernanda cortaron y esta vez sí me voy a encargar que sea para siempre —sonrió.

***

—¿Cómo estás? —preguntaba Carolina entrando a la habitación de Fer.

—Terminamos.

—¿Cómo que terminaron? Fer tenían muy poco tiempo, y se les nota a leguas que están enamorados.

—Justo ese es el problema Carol, que en el poco tiempo que llevamos hemos tenido muchas discusiones y malentendidos.

—Oye, cualquiera tiene problemas en su relación. Yo también tengo problemas con Héctor y mira allí estamos juntos.

—Es muy diferente Carol, porque entre tú y Héctor hay confianza, mientras que, entre él y yo, no, no lo hay. Además, hoy que fui a buscarlo lo encontré besándose con Susana, y aunque él dijo que no la besó, estoy segura de que aún siente cosas por ella.

—No creo que sea así. Mauricio no es el tipo de hombre que va a jugar contigo.

—Pero lo ha estado haciendo Carol, entre más lo pienso, más creo que es así. Él sabe perfectamente como están las cosas con mi papá, aun así, insiste en querer hablar con él. No le importa que nos separe si se entera, solo lo dice como excusa.

—Fernanda, yo no creo que las cosas sean así. Es mejor que te relajes y dejes de pensar cosas tontas. No creo que Mauricio quiera eso. Al contrario, te debe amar tanto, que quiere hacer todas las cosas bien.

Para EnamorarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora