¿Coder?

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Diana se estaba arreglando para ir a la preparatoria, un día normal como cualquier otro, está semana se encontraba en exámenes finales, la semana más esperada del semestre, pero a la vez la más odiada por todos los alumnos. Los alumnos corrían de un lado a otro estudiando, los maestros y coordinadores daban apoyos que no servían y sobre todo asustaban a todo alumno con los exámenes diciendo que estos serían más difíciles de todo lo que vieron en los parciales anteriores.

Sólo una cosa pasaba por la cabeza de Diana en ese momento; "es el fin del semestre, en cuatro días cumplo 17 y aún no sé qué voy a estudiar ni en que Universidad quiero entrar, probablemente el mundo no se acabe si no tomó una decisión, pero párese como si en realidad fuera a pasar".

Se terminó de vestir con unos jeans color tinto y una blusa blanca straple de manga larga. Se puso sus botines favoritos de color verde militar, arregló su cabello en una coleta, tomó su mochila y su intento de guía de estudio con la cual se había desvelado hasta las 3 am para terminarla y sentirse lista para el examen. Bajo las escaleras sin ninguna apuró, sintiendo la pesadez de todo su cuerpo por levantarse tan temprano y no haber tenido las horas de sueño adecuadas, sus párpados se cerraban a cada paso que daba, al llegar al piso inferior lo primero que hizo fue dejar sus cosas en el sillón de sus sala y dirigirse el baño a lavarse la cara, Diana estaba segura de que se podría dormir en cualquier segundo si su cara no tocaba el agua fría en esa mañana. Entró al pequeño baño debajo de la escalera, encendió la luz en el interruptor, la luz iluminó el pequeño cuarto de color blanco y toques de marrón que combinan perfectamente con toda la decoración del primer piso, abrió la llave con pesadez y se agachó en busca de la refrescante agua helada de esa mañana, al instante en que el agua tocó su cara sintió como si le hubieran dado un golpe muy frío. Una vez ya más despierta, pero aun con ojeras debajo de los ojos indicando que no había dormido bien la noche anterior, llegó a la cocina donde su madre cocinaba unos Hot Cakes, el típico desayuno (en su casa) cuando tenía que hacer algún examen, el desayuno favorito de Diana sobre todo porque la llevaban de energía para todo el día y si que las iba a necesitar.

-¿Diana?- dijo su madre.

-¿Qué pasa ma'?

-¿Qué vas a querer hacer para tu cumpleaños? Es que sólo faltan cuatro días y no sé que quieres hacer.

-Pues podemos ir a comer, así tendría tiempo suficiente para estudiar para el siguiente examen al día siguiente- dijo sin mucha importancia.

-Bueno, invitaré a tus amigos aquí a la casa- dijo su mamá haciendo casi omiso a la petición de su hija.

-No, ma', ya sabes que no me gusta invitarlos a mi casa, tengo una mejor idea, en mi cumple sólo vamos a comer y para el sábado ya que todos estemos más relajado y de vacaciones los invitamos a hacer una Pool party, ¿te parece? - pregunto Diana intentando levantar una sola ceja, no lo logró.

-Me parece bien, hoy tengo tiempo así que compraré algunas cosas para la fiesta, ¿quieres que te compre algo?

Cuando su mamá dijo eso a Diana se le iluminaron los ojos y a se prendió el foco, quería algo desde hace tiempo sólo que su mamá no se lo había querido comprar y ella ya había gastado todo su dinero que tenía en otras cosas.

-Si- contesto muy feliz - ¿me podría comprar el nuevo disco de CD9? -Diana puso su carita de perrito para que accediera.

-Ya te había dicho que no, ya tienes muchos- dijo sirviéndose un par de Hot Cakes y dándole la lechera y la miel de maple.

-Bueno-dijo Diana bajando la mirada y empezó a comer su desayuno.

Su papá llegó después también a desayunar con ella, él y su mamá empezaron a platicar sobre la fiesta de Diana, los dos contentos pero ella un poco decepcionada por no tener su disco, ya había salido en pre-venta la cual obviamente no alcanzó y ya estaba en tiendas, Diana quería con todas sus fuerzas tener ese disco aunque pudiera escuchar sus canciones en YouTube o Spotify, quería sentirse como una coder de verdad no sólo una fan.

La música nos unió (Alonso Villalpando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora