Capítulo 16 (parte uno)

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Empiezan las bromas:

—¿Puedo pasar? —pregunta alguien fuera. Cuando centro mi atención en esa persona me doy cuenta de que es Rubí.

—Qué remedio —digo y me aparta de un empujón para dirigirse al salón. 

Contengo las ganas de pegarle y la sigo. Al entrar al salón veo que están todos distribuidos por los dos sofás.

—Becca —me llama Elisa, cuando me giro en su dirección sigue hablando —. Richi y yo vamos arriba, cuando acabes el trabajo sube.

—Manos a la obra, que esta tarde tenemos que acabarlo sí o sí —digo.

—Exacto. El plazo acaba mañana, así que nada de distracciones —advierte Arnau.

(...)

Cuando finalmente se van todos, subo las escaleras rápidamente y entro en la habitación de mi prima para tirarme en plancha en su cama.

—¿Qué pasa, Becca? ¿Te persiguen tus hermanos? —pregunta Eli desde el suelo.

—No, pero tenemos bromas que preparar —intento reír como una villana de Disney pero lo único que consigo es casi ahogarme con mi propia saliva.

—Oh, sí... —dice Richelle y se tira al otro lado de la cama.

(...)

Horas después me encuentro en mi habitación con el pijama puesto preparada para acostarme.

Para empezar, decidimos ponerle a Fran un mento explosivo en la bebida. Pensamos que sería mejor empezar flojas. Como Richelle sabe perfectamente la hora en la que Rafa tiene que ir al baño, pondremos pica pica en el papel higiénico y después...veremos como se rasca.

Seguro que vale la pena visitar a mi buen amigo el director Utrera.

Y por último, a Chad, le pintaremos el cabello de verde moco. Y no, no tenemos ni la menor idea de cómo haremos eso, pero no hay broma que se me resista.

Obviamente, nos faltaba material, pero la pereza de ir a comprarlo era tan grande que tuvimos que chantajear a Damien, Adrián, Ashton y Jacob para que se encargaran de traérnoslo.

Ahora sólo queda esperar...

POV FRAN:

Ya casi son las doce de la noche y ya lo tenemos preparado para ellas...

Solo espero, por su bien, que lleven ropa de recambio.

—¿Puedo pasar? —pregunta una adorable voz fuera de la habitación.

—Claro, pasa, Dakota —cuando entra se sienta en la cama y me mira con los ojos vidriosos—. ¿Qué ocurre, Dakota? —la cojo rápidamente de la cintura y la enredo en un cálido abrazo.

Empieza a llorar, y espero a que se calme un poco para que pueda hablar.

—He vuelto a tener una pesadilla, Fran —se frota los ojos y me mira fijamente.

Si hay algo que me encanta de ella son sus ojos, envidio sus perfectos ojos azules.

—Ya pasó, Dakota. Todo está bien...

Las pesadillas de Dakota son cada vez más frecuentes, y siempre es la misma, una y otra vez.Ella siempre dice que es una predicción, y mis padres piensan en llevarla al psicólogo.

—¿Puedo dormir contigo? —hace un puchero, pero cómo negarme.

—Por supuesto —la acuesto con cuidado a un lado de la cama y le beso la frente.

—¿Sabes qué día es mañana, Fran? —me pregunta entusiasmada.

—Cómo olvidarlo, el 15 de septiembre de hace cuatro años nació una niña muy bonita.

—¡Sí! ¡Mañana es mi cumple!

—Buenas noches, Dakota.

—Dulces sueños, hermanito.

POV CHAD:

—Hijo, ¿ya te vas, cierto?

—Sí, mamá, mañana volveré a visitarte, lo prometo.

—No hace falta... Deberías quedar con tus amigos y divertirte.

—No, debo estar contigo...

—Chad, cielo. Te amo, y mi último deseo no es que mi hijo se pase todos los días cuidándome, en vez de divertirte.

—Mamá, tendrás tiempo para pedir muchos deseos, ya lo verás.

—Hijo, ambos sabemos que me queda poco tiempo.

—¡No digas eso! —intento retener las lágrimas en mis ojos, pero me resulta imposible.

—Ahora descansa y vete a casa con tu padre, te quiero.

—Está bien, mamá —me acerco para darle un abrazo y con sus pulgares me limpia un par de lágrimas.

Cuando salgo de la habitación del hospital me encuentro a papá bostezando.

—¿Ya?

—Sí —respondo cortante.

Mi padre... no me cae muy bien, que digamos. Él nos abandonó a mí y a mi madre cuando nos enteramos de que ella tenía cáncer. Ella en esa época aún se encontraba bien, sufrió cuando mi padre la dejó, pero como una gran luchadora que es, pudo superarlo.

De eso ya hace 2 años, concretamente. Ahora mi madre empeora a cada momento, pero a él le da igual y simplemente me cuida ahora para quedar bien con la familia.

Si pudiese, me quedaría con mamá para siempre, pero muchas cosas nos lo impiden.

Estoy tan cansado, que sin poder evitarlo me duermo en el coche.

POV RAFA:

—¿Abro otra botella de champán? —pregunto.

—Hijo, no puedo beber —dice mi madre a rebosar de felicidad.

—Son las doce, niños, a la cama —ordena Tomás, la pareja de mi madre.

Se acerca a mis hermanos y a mí, y nos da un apretón de manos como despedida. Subimos cada uno a nuestra habitación, dejando que lo celebren en la intimidad.

Hace una semana a Tomás le aumentaron el sueldo considerablemente, y nos vino de lujo... Y ahora mi madre está embarazada.

Cojo un boli y una libreta y dejo volar mi imaginación, sintiéndome genial.

Cuando los ojos se me empiezan a cerrar, dejo las cosas en la mesita de noche y envío un mensaje de buenas noches a Richelle.

Al cabo de unos segundos me contesta.

Amor💃
Hora: 24:47

Buenas noches, amor. Que descanses.

Sonrío al leer el mensaje y finalmente me duermo.

Idiota, te ganaré. (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora