Idiota, te ganaré. (COMPLETA)

Capítulo 20

Becca, lo sentimos:

—¿Qué ocurre, Mackie? —pregunto preocupada por su reacción. Puede que le parezca feo, pero no es para tanto.

Da varios pasos hacia detrás y se tapa la boca mientras murmura cosas que no llego a entender.

—Chicos, subid a vuestra habitación, por favor —me dirijo hacia mis hermanos, que después de protestar hacen lo que les ordeno.

—No puede ser verdad —dice Mackie y a cada instante que pasa me preocupa más.

—Por favor, dime que pasa —ruego y la cojo de los hombros para hacer que se siente en el sofá.

—¿Él es tu tío?

—Así es, ¿por?

—Es Erick. Ese hombre es Erick, Rebecca.

—¿¡Qué?! Es imposible —digo. Me niego a aceptar que mi tío sea un violador asqueroso. Aunque viendo lo que le ha hecho a su propio hijo, me lo creo.

—Me mintió con su nombre. Debo presentar cargos ahora mismo, Becca. Debo aprovechar la oportunidad para ponerlo entre rejas —me avisa y rápidamente se levanta del sofá.

—Podemos hablar con mi tía, contárselo todo. Podemos hacer que presente todas las pruebas ante el juez y así conseguir que la condena sea más larga —digo convencida. Ella parece pensárselo.

Escucho la puerta abrirse, y en seguida aparece la tía Evelyn delante de nosotras. Parece destrozada, y es normal. No me imagino por lo que debe estar pasando. Después de presentarle a Mackie, le cuento todo despacio, con miedo a que se altere.

Comprende todo, y finalmente acepta presentarle todas las pruebas al juez. No quiero contárselo a Elisa, pero sé que no puedo escondérselo y que tarde o temprano debo decírselo.

—Becca, mañana vienen tus padres.

—Lo sé, me llamaron esta mañana.

—Les he dicho que se queden aquí, en casa. Así podrán vigilaros, ya que yo estaré en el hospital con Ash —asiento. Me despido de Mackie, que Tyler no deja de llamarla para saber si está bien.

Subo directamente a la habitación de Eli y toco varias veces la puerta, hasta que por fin me abre.

Nada más entrar la abrazo fuerte y ella me devuelve el abrazo.

—Becca, estoy bien. Lo prometo. Sé que mi hermano pronto estará como nuevo y Jack en la cárcel.

Enciendo la tele en busca de alguna peli, y cuando doy con una guay nos tumbamos en su cama y pasamos así varias horas.

(...)

Mi móvil suena, despertándome. Me separo de Elisa, que duerme plácidamente, y cojo el teléfono.

Es una llamada de mi madre, así que salgo de  la habitación para no despertarla.

[aquí empiezan a hablar en inglés]

—Hola, mamá —contesto bajito.

—Hija, estamos fuera. No quería tocar el timbre para no despertar a todo el mundo —suspiro y bajo las escaleras después de colgar.

—¡Hola! —dicen al unísono abrazándome.

Papá me revuelve el pelo.

—Andrew, déjala —lo regaña mamá y le sonrío agradecida.

—¿Dónde están tus hermanos? —pregunta papá analizando la entrada de la casa con la mirada.

—Todos están durmiendo. Me imagino que la tía Evelyn estará en el hospital... —digo encogiéndome de hombros y ellos se miran por unos largos segundos.

—Becca, sentimos haber hecho que vinierais aquí. Si lo deseas, puedes volver a casa con nosotros —dice papá y niego con la cabeza. Su acento inglés es más marcado de lo que creía.

—Aunque me cueste admitirlo, me gusta España. He hecho amigos impresionantes —mi madre sonríe al escucharme y me abraza de nuevo.

—Venid, dejad las maletas arriba —me siguen hasta mi habitación y hago que dejen las maletas a un lado.

No sé dónde quiere la tía Evelyn que duerman.

—¿Dónde está tu prima?

—En su habitación —digo colocándome bien el tirante de mi camiseta.

Un ratito después se abre la puerta mostrando a una Elisa adormilada.

—¡Hola, Elisa! Qué alta estás —dice mi madre y mi prima me mira esperando a que se lo traduzca.

Una vez presentadas, mis padres bajan a hacernos el desayuno.

—Voy abajo, ¿vienes?

—En unos minutos —digo al ver el nombre de Arnau en la pantalla. Cuando Eli sale de la habitación, le doy al botón verde.

—Hola —digo nerviosa.

—Eh... Hola. Anoche te llamé infinidades de veces, y para serte sincero, no creí que me contestarías ahora —por su tono de voz deduzco que está mosqueado.

—Lo sé, lo siento. Supongo que ya te habrás enterado de lo que ha pasado. Necesitaba tiempo para estar con mi familia.

—En diez minutos paso a por ti, necesitamos hablar.

—Arnau, no sé si me dej...

—Prepárate rápido, nos vemos en seguida —me interrumpe y cuelga.

Corro hacia el armario y me pongo lo primero que pillo. Voy al baño, me cepillo rápidamente los dientes y me peino.

Arnau ✨
Hora: 10:09

Estoy en la puerta. :)

Me miro una vez más en el espejo y voy a abrir la puerta.

Cuando abro, lo veo plantado con su sonrisa y una rosa en la mano. Sonrío por el gesto tan bonito y me siento culpable por haber salido corriendo la última vez sin darle explicaciones.

—¿Quién es este chico, Becca? —pregunta mamá con una sonrisa traviesa.

—Es...un amigo. Todavía no está muy claro —digo sabiendo que Arnau no puede entendernos.

Mi madre le hace señales para que entre y hace que se siente en la mesa a desayunar con mis padres, mis hermanos y Elisa.

Suspiro y me siento a su lado.

Espero que esto no sea muy incómodo...