Juré No Enamorarme de Ti

3- "hablando" con la famosa Leyla

La rubia no deja de mirarme con el ceño fruncido desde que he llegado, es decir, hace menos de veinte segundos.

—¿hola? —pregunta-contesta —¿por qué estás aquí James?

—¿sabes mi nombre? —le digo sin creerlo.

Vamos, es raro que un popular sepa tu nombre ¿no? Me refiero a que no soy uno de ellos, pensé que ella ni siquiera sabía de mi existencia en este colegio.

—claro que lo sé tonto —rueda los ojos y una sonrisa se forma en su rostro — estamos en la misma clase hace más de tres años, es obvio que voy a saber tu nombre—responde en forma obvia —vuelvo a repetirlo, ¿por qué estás aquí?

—¿no puedo venir a hablarte?

—si, pero es extraño ya que en un poco más de tres años no me haz dirigido más de Diez Palabras y ahora te encuentras aquí, frente a mi.

—se supone que tú eres la popular, tu tendrías que empezar a hablar conmigo...

—¿y entonces qué haces aquí?

—solo... estoy tratando de socializar ¿sabes? —miento —me di cuenta de que queda poco tiempo para terminar la secundaria y qué probablemente no nos volveremos a ver todos así que pensé "¿por qué no hablar y hacerse amigos de todas las personas con las que casi nunca hablas?" Y bueno, aquí estoy, frente a una de esas personas.

—hay muchas personas James, ¿por qué justamente yo?

—¿que parte de "todas las personas" no entiendes? Eso te incluye Leyla, al menos de que no seas una persona, claro está. —se ríe por lo que acabo de decir.

—mira James, si te soy sincera no tengo mucho tiempo, así que... ¡adiós! —dice levantándose de su lugar y dejándome sentado solo en esa mesa.

Veo como su pelo se mueve cuando ella camina hasta que desaparece del comedor. ¡Vaya que está chica es difícil! Será un trabajo duro...

Me quedo en el mismo lugar por varios minutos hasta que el timbre vuelve a sonar avisando que todos debemos volver a las clases que nos corresponden, en mi caso, historia.

Al llegar al salón me encuentro con dos de mis amigos con los que compartimos esta clase, Jackson y David.

Me acerco a ellos y me siento en el lugar que se encuentra en el medio de ambos.

—¿y? ¿Cómo te fue con la famosa Leyla? —pregunta Jackson

— estuve hablando con la famosa Leyla por menos de dos minutos —le digo haciendo comillas con mis dedos en las palabras "hablando" y "famosa"

—¿qué? ¿Por que? No me digas que en esos dos minutos ya se hicieron los mejores amigos de toda la vida...

—para nada, todo lo contrario, me acerqué a ella y comencé a hablarle y a comentarle el porque de mi acercamiento de hoy hacia ella y lo único que hizo fue dirigirme unas palabras y me dijo "si te soy sincera no tengo tiempo así que, adiós" —repito las palabras que me dijo Leyla pero lo hago con un tono fino y con un gesto con una de mis manos.

Al hacer esto mis amigos se rien, eso fue lo que hizo ella, es más, la imito a la perfección, cualquiera puede imitar a una chica como ella, presumida y sin importarle el resto de las personas, y nada más que ella misma.

Después de unos minutos en los que mis amigos no paraban de reírse de mí, se calmaron y volvieron a la normalidad.

  —¿ahora que harás? Porque, por lo que parece, no le interesas en lo más mínimo —dice Jackson con una sonrisa burlona.

  —no tengo idea, por lo menos lo intente —digo mirando a David —creo que es hora de cambiar de persona para este reto...

  —ni lo pienses — me interrumpe mi mejor amigo —no importa si no le caes bien a ella, lo lograras en algún momento.

—¿perdón? Yo en ningún momento dije que le caía mal a Leyla, porque, por favor ¿a quien puedo caerle mal? —digo de una forma graciosa haciendo que mis amigos vuelvan a burlarse de mí. —bueno,bueno. Ya hablando en serio, no creo que este plan funcione con ella,así que...

  —"así que" nada, tú lo harás y punto —dice David dejando de reír para mirarme seriamente y lo único que hago es rodar los ojos.

Después de terminar de conversar con mis amigos, la profesora llegó, y con ella nos trajo muchas actividades, las cuales eran con nota y tuvimos que entregar ni bien termine su clase.

Una media hora después, volvimos a tener otro recreo, decidí salir del salón y buscar a los otros amigos, al encontrarlos se acercaron a mí para hacerme miles de preguntas.

  —¿cómo te fue con Leyla? ¿Ya se hicieron amigos?  ¿Se enamoró de ti? ¿La besaste? —pregunta rápidamente Julie

  —respondiendo a todas tus preguntas: digamos que no me fue muy bien, no somos amigos aún, y menos se enamoró de mi así que descartemos el beso.

  —oh —dice apenada —la buena noticia es que aún tienes más oportunidades para seguir intentando.

  —si, lo sé, ¡qué alegría! —exclamo con una felicidad fingida.

  —¿ahora que materia tenemos? —pregunta George cambiando de tema

  —literatura —le contesta Julie

  —vamos aproximándonos al salón si quieren, el cualquier momento vuelve a tocar el timbre para que entremos a la clase. —todos asentimos dándole la razón a David

Después de unos segundos, tal como dijo David, tocó el timbre. Así que caminamos hasta el salón de clases. Al llegar, el profesor ya se encontraba alli, nosotros éramos los únicos que faltaban. ¡genial!

  —me alegro de que llegaran, les estaba contando a sus compañeros que estaba pensando en que todos ustedes hagan un trabajo que está relacionado con un libro —dice el profesor cuando ya estamos en nuestros asientos — la fecha aún no está preparada, así que tienen tiempo para pensar lo que harán, eso dependerá de ustedes, claro que, tiene que tener una relación con la obra. ¿Alguna pregunta?

  La primera en levantar la mano es Leyla

  —¿cómo sería ese trabajo? Es decir, ¿hay que entregarlo por escrito?,mejor dicho, ¿entregar un informe sobre él?

  —puede ser a elección de ustedes, todo depende del libro que elijan, si es una obra de teatro, pueden teatralizarlo, o quizá, no lo sé, si tiene algo que ver con la música pueden componer una canción, todo esto tiene que ver con sus propias imaginaciones. —contesta el profesor y todos nos miramos entre si emocionados.

Interesante, en verdad suena interesante.

  —pero... —uff, siempre tiene que Existir un pero —el trabajo del cual les hablo, no será individual, será en parejas. Y no pueden elegir ustedes a su compañero, eso lo haré yo.

Todos se quejan inmediatamente, ¿por qué siempre en los mejores trabajos pasa algo como esto? Lo único que espero, es que me toque con alguien responsable y que en verdad trabaje.

Después de nombras a varios compañeros escucho mi apellido.

  —usted señor Carter, estará con la señorita Russell.

¡Oh, que bien!-nótese el sarcasmo, justamente con Leyla me tenía que tocar... veremos qué pasa.