Juré No Enamorarme de Ti

35-POV Leyla

James no ha dejado de mirarme por varios segundos y eso me pone realmente incómoda, si no fuera por mi maquillaje el vería que estoy muy sonrojada, pero debo de agradecerme porque hoy me puse maquillaje ya que estuve apunto de no hacerlo.

Suspiro ya por quinta vez en menos de un minuto y aparto la vista de él para poder hablar y explicarle lo que en realidad pasa.

  —ser popular no es fácil , ¿sabes? Todos piensan que por serlo no te debes preocupar por nada y que nadie puede hablar mal de ti, pero que equivocados que están... —juego con una de mis pulseras nerviosamente —sé que no es la primera vez que David y Julie te dicen cosas malas sobre mi. No me molesta.

Porque  lo que más me duele es que tú te lo creas...

  —Leyla...

  —no. Déjame terminar—veo de reojo James asiente y vuelve a quedar en silencio —puedo, ¿puedo preguntar por qué David y Julie te dijeron eso sobre mi?

Él no me contesta. Supongo que debe ser un tema personal, así que continúo hablando.

  —bueno, no tengo ni la menor idea de porque te dijeron eso, pero es mentira. —sus ojos están fijos en mí nuevamente —No estoy en pareja con ninguno de los profesores y ten por seguro que jamás lo haría, por ningún motivo. El profesor que yo te he presentado es Paul, y seguramente la vez que me viste era el con el que yo estaba pero no somos absolutamente nada.

Parece estar más relajado ya que sus hombros estuvieron tensos en todo el momento en el que hablé, pero al terminar, él suspira al igual que yo y cómo ya dije, parece estar más relajado.

—me alegro que eso no pasó. Yo... les creí y no porqué me habrán mentido una vez más.

—ya lo he dicho, pero quiero saber porque te dijeron tal cosa.

—una vez en la que tú y yo estábamos hablando, Julie escucho lo que me decías sobre tu academia, nunca me dijiste cómo la pagabas y Julie me dijo que tú te acostabas con uno de los profesores y...

—...y tú le creíste —lo interrumpo sin mirarlo.

—al principio no lo hice, por lo que le pedí pruebas y me las demostró, ahora sé que fui un estupido al haberle creído pero fue lo único que pude hacer en ese momento al verte con el.

—seguramente te han dicho más cosas sobre mi, ¿que exactamente?

—se que lo que voy a decir esta mal —dice un tanto apenado y agacha la cabeza, esta vez yo soy la que lo Mira —pero ellos piensan que eres igual a todos los populares, y lamentablemente yo en un momento creí eso.

¿Sabes algo James? Empezaba a sentir algo por ti, pero todas lo que pensaba sobre ti, creo que se han ido junto con las palabras que has dicho.

Me quedo con la boca abierta y sin creer todo lo que me ha dicho le respondo:

—no puedo creer que pensaste eso, tú no sabes lo que en verdad se siente, todos piensan que por ser popular soy igual a los demás, y déjame decirte que no, no es así. no tengo todas las cosas materiales que quisiera tener, mis padres nunca me las dieron ¿y sabes por qué? Porque ellos nunca están en mi casa, se pasan todo el tiempo trabajando, y cuando por fin tenemos un rato para estar juntos le prestan más atención a sus celulares que a mí, nunca me prestan atención Yo misma tuve que conseguir todo lo que hasta ahora tengo, debo ir a trabajar. Así que, por favor, no vengas a decirme que soy igual a todos, porque no es así.

—¿Q-Que? —me mira una vez más, pero esta vez, puedo notar que está preocupado. —yo jamás pensé que..

—y por si no te quedo lo suficientemente claro, no. No me acuesto con ningún profesor para poder ir a bailar, al contrario. No te lo he dicho y no sé el porqué, como ya te había contado antes, mis padres no saben que aún sigo bailando, y por ende, no me pagan las clases. Y no, no lo pago como te hicieron creer Julie y David. Mis propios padres me consiguieron un trabajo,y gracias a ello puedo comprarme útiles escolares y pagar mis clases de danza. ¿Quieres saber algo más? Me dijeron que no era necesario pagar, pero yo quise hacerlo.

Después de un largo silencio entre ambos. James comienza a hablar.

—jamás debí haber dudado de ti.—dice apenado— Lo siento tanto

yo tampoco pensaba que en algún momento ibas  a dudar sobre mi, Tu eras el único que lograba entenderme y siempre se preocupaba por mi.

Quizás me llegó un tiempo, pero después de que nos besamos la primera vez... no sabía qué pensar sobre él, lo que quiero decir es que, nunca me había sentido así por algún chico, y no sabía cómo reaccionar, pero cuando lo entendí, comprendí que habías comenzado a gustarme.

Y en verdad ahora ya no sé qué pensar.

Me levanto de mi lugar y salgo del salón rápidamente tratando de alejarme de James. Llegue al salón para tranquilizarme y despejar mi cabeza un rato, pero ahora estoy peor que antes.

Sin darme cuenta, James logra alcanzarme poniéndose delante de mí obstruyendo el paso.

  —Córrete —trato de empujarlo con mis manos pero no puedo hacerlo.

  —Leyla, quiero que en verdad entiendas que jamás quise pensar de ti de esa manera...—agarra mis dos manos y las deja a ambos lados de mi cuerpo.

  —...pero lo hiciste —lo interrumpo

  —y fue un grave error. —suspira —¿por qué no querías decirme que trabajas?

  —no lo sé —susurro, pero de todos modos es en vano por qué él puede escucharme. —no se lo he dicho a nadie de aquí, hasta ahora eres el único que lo sabe. Creo que una de las razones por las que nunca lo dije es porque sé que van a inventar algo nuevo sobre mi —ruedo los ojos.

  —no entiendo porque dicen esas cosas... —se acerca más a mi y una de sus manos acaricia mi mejilla —todos cometemos errores, pero sé que tú eres perfecta, Leyla.

  —no. No lo soy —retiró su mano y me alejo unos pasos de él —por algo siempre dicen cosas sobre mí, y apuesto que todas y cada una de ellas las ha inventado Julie.

  —¿por qué se distanciaron? ¿Por qué se odian?

  —ya no queda tanto tiempo, James. Debo ir a mi clase.—le doy la espalda y sigo caminando en la otra dirección.

  —por favor, dímelo. —comienza a seguirme una vez más— Ya no sé qué es lo que debo creer...

Me detengo para mirarlo y hablar nuevamente.

  —no sé qué es lo que ella te habrá dicho, pero cuando Ryan cortó con ella, no me dejaban acercarme. Intente seguir siendo su amiga por más que me lo negaran, pero de un día al otro comenzó a odiarme y a tenerme mucho rencor. No sé qué es lo que habrá pensado sobre mi para que se distanciara, pero cuando quería hablar con ella solo se apartaba de mi, y deje de insistir. No tengo idea si le hice algo, de todos modos, ella fue la que cambió, no yo.

James se queda estático en su lugar mirando al suelo muy pensativo, decido no molestarlo y seguir con mi camino.

  —gracias por escucharme, James. —digo mientras camino y me alejo cada vez más de él —Espero que sigamos siendo amigos —susurro.