Leyla y yo estamos caminando en el parque, hoy el día está completamente hermoso, es fin de semana y ¿qué mejor que pasarlo juntos?—no puedo creer aún que tú y yo somos pareja —confieso cuando nos detenemos para sentarnos en un banco mientras seguimos con nuestros dedos entrelazados.
—¿por qué? Ya ha pasado casi un mes, James.
—lo se —le robo un beso. —pero si te soy sincero, nunca pensé que sentirías algo por mi.
—¿por qué dices eso? —estira su otra mano y acaricia lentamente una de mis mejillas.
—creo que jamás te habrías dado cuenta de que yo existía si es que yo no aceptaba la tonta apuesta. —sonríe de lado mientras sigue acariciando mi mejilla.
—eso no es cierto —muerde su labio inferior nerviosa —siempre supe que existías, James. Y siempre me pareciste el chico más hermoso que pude haber visto —ahora sus mejillas toman un color rojo. —de todos modos yo te hubiera hablado. De igual manera, íbamos a estar juntos en el mismo trabajo, eso no fue planeado, ¿recuerdas?
—como olvidarlo —ruedo los ojos —ese día me trataste muy mal.
Comienza a reírse a carcajadas mientras yo la miro con el ceño fruncido, al calmarse me da un casto beso y me muestra una de sus bellas sonrisas.
—lo se, y lo siento en verdad. Es que... no era tu culpa, pero ese no era uno de mis mejores días, y ya lo sabes, siempre quise mostrar a los demás alguien que no soy realmente. Siempre quise ser una persona fuerte y sin importar lo que le dirán los demás, pero por más que intente demostrarlo, ni mi cerebro ni mi corazón lograron ayudarme.
—no te estoy reclamando nada,Leyla. —sonrio de lado —¿en serio te gustaba desde antes de que habláramos?
—tampoco exageres —rueda los ojos. —solo me parecías atractivo...
—ajá...
Se acerca y comienza a besarme lentamente, la acerco más a mi agarrándola de la cadera y sonríe en el medio del beso para después seguir besándome.
Sus dulces labios están contra los míos por varios minutos hasta que somos interrumpidos por un carraspeo. Rodamos los ojos al unísono sin darnos cuenta y nos separamos para encontrarnos con Julie frente a nosotros.
Frunzo el ceño y ella parece vernos avergonzada.
—perdón por interrumpirlos, pero tengo una conversación presente contigo, James.
Leyla mira a Julie y después a mí fijamente con el ceño fruncido.
—me iré si quieren, así hablan mejor...
—n-no es necesario, puedes quedarte si quieres —habla Julie tímidamente haciendo que la mire confundido. Leyla asiente y toma mi mano de manera posesiva. Sonrío de lado pero inmediatamente centro mi vista en Julie nuevamente.
—¿de que quieres hablar? —le pregunto de mala manera —ni siquiera sé porque quieres hablar conmigo, no te he perdonado Julie...
—...lo se —interrumpe — pero solo quiero darte una explicación sobre todo lo que ha pasado —asiento con la cabeza —es obvio que no lograrán perdonarme, y tampoco es lo que quiero porque sé que no me lo merezco, solo te daré las explicaciones necesarias...
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Juré No Enamorarme de Ti
Ficção AdolescenteTodo comenzó con una simple apuesta: ¿Cuál? Yo, James Carter, el nerd de la clase, tendría que enamorar a Leyla Russell. A diferencia de mi, una de las chicas más populares del instituto. ¿A qué se debe ésta inusual apuesta? La respuesta es más sen...