Capitulo 9

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Llevo un par de semanas sin ver a Evan, me ha llamado unas cuantas veces y yo, a pesar de mis intentos por ignorarlo, termino contestando el teléfono, porque no puedo alejarme de él o rechazarlo, es más fuerte que yo

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Llevo un par de semanas sin ver a Evan, me ha llamado unas cuantas veces y yo, a pesar de mis intentos por ignorarlo, termino contestando el teléfono, porque no puedo alejarme de él o rechazarlo, es más fuerte que yo. Lo igualaría a aguantar la respiración, llega un momento en que tienes que tomar aire, porque te mueres, eso es Evan para mi. Llevo años aguantando la respiración y ahora que lo tengo tan cerca no puedo alejarlo. Conversamos de cosas banales, sin tocar mucho el tema, solo se asegura de que estoy bien y yo me asegura que el lo esta, eso es todo.

Samuel sólo me observa con tristeza, el sabe lo que estoy sufriendo, me conoce pero por primera vez, no tiene nada que decirme, ni el puede darme un consejo práctico de "chico motorizado", porque debo admitir que esto no tiene solución. Estoy enamorada desde hace 8 años de un hombre que no está conmigo y es un hombre casado.

-¿Estarás bien duende?- me dice mientras cierra su mochila con su ropa.-No quisiera irme, pero debo reunirme con un par de personas y no puedo retrasar más los asuntos... pero me encantaría que vinieras conmigo por una temporada. Lejos de todo.

Yo suspiro mientras lo abrazo con fuerza, mi hermano huele a pino y a hogar, por mucho que el luche por ser un chico rudo y verse como tal.

-Samuel, entiendo que el tema es nuevo para ti, pero esto pasó hace años, ya pasamos por esto varias veces. Voy a estar bien

Samuel me toma el rostro con sus manos ásperas y callosas y me hace mirarlo a los ojos.

-Duende, ese es precisamente el problema, llevas años diciendome que estarás bien, pero nunca me dices que ya estas bien. Ahora entiendo que es lo que te hizo cambiar tanto pero ¿Cuando vendra ese dia? El dia en que mi hermanita vuelva a ser la misma chica soñadora de siempre.

-Esa chica ya no existe Samuel-. Le digo evitando contestar su pregunta, ni yo misma sé si llegara el dia en el que me sienta bien por completo.

-Esa chica está ahí- me dice señalando mi corazón-pero la tienes encerrada ahí- dice señalando mi cabeza.

-Está bien señor Miyagi- le digo molestando- es hora que te pongas en camino, no me gusta que vayas solo por la carretera.

Samuel solo niega con una sonrisa melancólica, sabe que el asunto está cerrado, por lo que no va a insistir más, oir eso nos llevamos bien, porque el es el único que respeta este espacio que necesito. Nos despedimos en la calle mientras lo veo subir a su chopper y con lágrimas en los ojos espero hasta verlo desaparecer por la carretera. Instintivamente, me abrazo para sentirme

consolada y acompañada, porque vuelvo a sentir una terrible soledad que emana desde dentro hacia afuera, es como un frío y un vacío que nunca tienen fin.

Decido tomar un poco el control de mi vida y llamo a Kayla y Ela para que salgamos en una cita de chicas, se bien que si salgo sola terminaré en la cama de alguien buscando compañía y eso no es lo que necesito ahora, por lo que un par de amigas es una buena opción para sentirme querida y acompañada.

Todo lo que pudo serDonde viven las historias. Descúbrelo ahora