Capitulo 7

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No se que hora es, pero el sol ya se está poniendo, por lo que asumo que dormí por horas, quisiera decir que me siento descansada, pero no es así, mi cabeza va a estallar y el cuerpo me duele como si hubiera cargado toneladas en mis hombros

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No se que hora es, pero el sol ya se está poniendo, por lo que asumo que dormí por horas, quisiera decir que me siento descansada, pero no es así, mi cabeza va a estallar y el cuerpo me duele como si hubiera cargado toneladas en mis hombros.

Al salir del cuarto, Samuel no está solo, 2 hombres están sentados en la barra de la cocina, hablando en un tono bajo.

Los tres, me miran una vez estoy cerca dedicandome una sonrisa, cualquier mujer correría kilometros lejos de ellos en su sano juicio, hombres inmensos, vestidos de negro y cuero, con tatuajes hasta en el cuello, pero no para mi. Ellos son la familia de mi hermano, quienes lo tomaron bajo su cuidado y quienes lo aceptaron por lo que el es. Si el los quiere, yo los quiero, así funcionamos.

-Hey dormilona- me dice uno de ellos- buenas tardes.

-Hola Ron.-

-Me alegra verte - dice mientras se levanta para hacerme desaparecer en un abrazo.-ya era hora que tu hermano se viera obligado a ordenar su casa.

Me rio mientras le devuelvo el abrazo y le doy otro a Raul, que ya esta a mi lado esperando su turno.

-¿Vas a estar algún tiempo por aquí?.

-No puedo, realmente debo regresar mañana, pero necesitaba la ayuda de mi hermano.-digo bajando la vista, porque estoy segura que ellos ya saben todo.

-Si, tu hermano nos contó que planea visitar a un tipo que te esta dando problemas.-Añade Raul.

-Pero no quiero que las cosas se salgan de control... solo quiero que me deje de molestar.

-Cuenta con ello-añade Ron. -ahora, tendremos que detener a tu hermano de asesinarlo... pero podemos trabajar en eso no?-dice mirando a Samuel mientras este tuerce el gesto.

- Cassia, no voy a darte mas problemas, voy a liberarte de ellos. Esto es lo que vamos a hacer, vamos a viajar hasta tu casa y ahi, Ron y Raul me van a acompañar mientras le hacemos una visita de cortesía a este Aldo. Despues me quedo un par de dias, por si el imbecil sufre de amnesia, si es asi, yo personalmente le recordaré mi anterior visita. Nada más, nada de muertes, nada de arrestos, palabra de hermano mayor.

Lo observo detenidamente, porque lo conozco tan bien, que puede detectar cuando me esta mintiendo, para mi fortuna, lo veo sincero, no dejo de notar sus ojeras, sus labios apretados y la ira contenida, me siento fatal por causarle tanto dolor, pero era la unica salida que tenía, por lo que asiento y ocupo un lugar en la cocina para comer el almuerzo tardio que me han cocinado.

Nos quedamos unas cuantas horas tomando cerveza y hablando de anécdotas de la infancia que tanto Raul como Ron agradecen. Samuel no esta tan feliz, porque segun él, su pasado privilegiado lo hace lucir mal en un club de motoristas. Aunque yo se que ellos no lo juzgan, son como su familia y tomarian una bala por el,lo que por desgracia, no esta lejos de una probabilidad.

Todo lo que pudo serDonde viven las historias. Descúbrelo ahora