Capitulo 26

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Me siento en la gran silla del medio de la tarima, hay un par
de gemas que me han visto llegar y me miran extrañados,
otros simplemente felices y otros algo tensos. Desde que
llegué aquí, todos lo que me tratan lo hacen tensos,
sudorosos, como si en cualquier momento yo agarraría un
arma y los atacaría a todos. Extraño, ¿no? Pero supongo que así es como los trataban las Diamantes.

- Disculpen. – murmuro cerca del micrófono.

Rubén se sienta a mi lado, Aleena del otro lado y Ben al lado de ella. Mi silla es literalmente inmensa, aquí no solo cabría yo, sino también unas tres personas más, pero bueno. Mi silla es la más alta, en comparación con las de Rubén, Al y Ben, que están más abajo que las mías. Cuando hablo algunas gemas me miran y se sientan en las sillas. De inmediato, encima de las cámaras, una pantalla holográfica con mi rostro.
Me veo pálida, con unas cuantas ojeras y mis ojos abiertos
con terror. ¿Desde así salí de lo que queda de mi sede?

Doy un vistazo a Ben a mi lado derecho, quien me da una
mirada de que continúe, de que hable sin importar si alguien
me está viendo o no. Trago en grueso esperando que no se
haya escuchado eso. Doy una mirada a Rubén, en mi lado
derecho, y este me guiña al ojo. De inmediato me volteo y
miro mi imagen en la pantalla. Ahora estoy roja, qué bien. No
importa Sopphie, continua.

- Bien. – murmuro, mi voz ahogada. – Sé que esto es muy
imprevisto para todos, pero tengo una noticia que darles y es de suma importancia que dejen de hacer lo que sea que estén haciendo y me presten atención. – miro como las gemas dejan de hablar y se sientan en las sillas. Y me imagino como, a
través de las pantallas holográficas, como las demás
personas en todo el Homeworld me están viendo en este momento. – En la tarde del día de ayer mi sede, la sede
Blanca, fue atacada, la destruyeron casi por completo y nos
invadieron. Tuvimos suerte que todos pudimos evacuar a
tiempo, nadie salió terriblemente herido. – digo mirando a
Rubén, tan solo recordar la herida de su cuello me hace
estremecer. – Mientras yo estaba en la revisión rutinaria
mensual de la S.T, o Simulación de la Tierra, junto con el líder
del planeta Gomorra, las gemas habitantes de este mismo
exoplaneta se aprovecharon de nuestro descuido y nos
atacaron. Destruyeron más del 80% de la sede, la invadieron
y robaron materiales. Hasta ahora no tenemos una lista
completa de todos los daños, pero ya se activaron las gemas
a reconstruir la sede.

Miro a Aleena y esta me mira, sus ojitos también delatan lo
triste y enojada que está por la sede. Si tan solo hubiera un
lugar donde pudiera mantenerla a ella y a mis niños
completamente a salvo de todo…

- Y he decidido tomar medidas casi extremas. Desde este
mismo momento, - continuo – toda gema de dicho planeta que
esté pisando este, será emburbujado y llevado a custodia
estricta; de inmediato se les avisa a todas las gemas reportar
a las Guardianas si ven alguna gema de Gomorra aún sin ser
llevada a custodia; toda gema que mantenga contacto con
dicho planeta será llevada a custodia de igual manera; las
medidas serán tomadas de inmediato y sin excepciones
algunas, no importa quién o qué sea. – doy asentimiento a
algunas gemas que están de pie en las puertas esperando mi
señal. – Son algo fuertes, pero midiendo las circunstancias,
tanto mi sede como el bienestar de mi gente, son necesarias.
Cualquier demanda de dichos decretos recién iniciados, serán
anuladas y de inmediato se pondrá en sospecha a la gema de serle fiel al líder de Gomorra y será llevado a custodia por
defraudar su dinastía.

Me quedo un segundo viendo la reacción de las gemas
sentadas en el público: sus bocas hasta el suelo, sus ojos
muy abiertos y sus cuerpos paralizados. Pero no me dejo
llevar por eso, algunas gemas, que puedo ver por sus ropas
que son de aquel planeta traidor, agachan la cabeza y salen
de la vistas de todos. Me levanto de mi silla y hago el intento
de irme de aquí pasando detrás de Ben y de Al. Lo único en lo
que me concentro es en el sonido de la silla de los dos y la de
Rubén siendo arrastradas para levantarse. Cuando de pronto
un grito en medio de todo el público me descola, quito la
mirada del suelo y miro a ver qué está pasando. Pero no veo
mucho, solo como una lucecita roja apunta mi vestido,
seguido del sonido de dos plomazos.

Revolution - Descendientes de Steven Universe #3 [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora