Revolution - Descendientes de Steven Universe #3 [Terminada]

Capitulo 18

Las manos de Sopphie me agarran fuertemente mientras me hala para que entre en su habitación, pero no puedo hacer esto, Sopphie está ebria, no puedo seguirle la corriente. Pero
sus labios sobre mí son más que suficiente estímulo para seguirle el beso, sus manos cierran la puerta con lo que creo es seguro por el sonido que hizo, aunque es estúpido porque
solo ella puede abrirla, luego agarra mi camisa por el cuello otra vez y me acerca más a ella, me empuja hasta chocar con la pared y su lengua se encuentra con la mía. Uau, es
increíble, para no haber besado a casi nadie durante mucho tiempo. Olvidas que está intoxicada, idiota. Agarro las mejillas de Sopphie y la separo de mí, ella aprovecha y recupera aire
jadeando, yo por mi parte ni recordaba que tenía que respirar.

- Sopphie, no puedo hacer esto. – murmuro, y noto mi voz ronca.

- ¿Por qué? – pregunta y parece dolida. – Se supone que debo ser yo la que diga eso y no lo estoy haciendo. Por favor. – suplica cerca de mis labios, solo un pequeño roce y mis labios ya quieren estar en los de ella. Pero la separo antes de que pueda continuar.

- No. – digo firmemente, la rodeo y me alejo lo más que puedo de ella. Sopphie se queda ahí, frente a la pared, como si estuviese analizando algo, o está congelada, no sé.

- Dijiste que me amabas. – murmura, su voz dolida y rota, desde donde está. Su mirada se encuentra con la mía, tiene los ojos llorosos y parecía triste de verdad. - ¿Era mentira?

- No, no es mentira. – dije – Pero tampoco voy a besarte ni hacerte nada en el estado en el que estás.

- ¿Qué estado? – pregunta, arrastrando las palabras – Estoy perfectamente.

- Estás ebria. – musito, Sopphie jadeaba, intentando recuperar
aire, con gesto indescifrable, como si estuviese buscando las palabras para decirme algo.

- Yo, bueno… - comienza – Sí, puede que esté algo borracha, pero no lo estoy tanto.

- Intenta caminar hasta donde estoy y si te caes más de una vez creo que sí es algo. – murmuro.

- No entiendes.

- ¿Qué no entiendo? – pregunto, pasando mi mano por mi rostro.

- Mi dolor.

- ¿Dolor?

- Sí.

- ¿Emocional?

- Sí, es horrible amarte. Pero más fuerte es el físico. – murmura, pero quedo más confundido. – Hacer este tipo de magia duele un montón. – casi grita – Y Garnet no lo aprecia. Y, ¿sabes qué es lo peor? – ahora sí grita – Que solo quiero relajarme, contigo, teniendo momentos a solas, ¿y así me
tratas? Ahora voy a tener que usar coerción para que no estés enojado conmigo.

- No estoy enojado contigo –murmuro. – Y no tienes que usar la coerción.

- Solo 11 minutos de gloria, ¿okey? – pregunta, jadeante de tanto gritar.

Se acerca lentamente a mí, con sus fijos en mí y sus pasos torpes. Yo mantengo mis manos al frente para marcar distancia. Pero de pronto una pregunta estúpida llega a mi mente, ¿por qué hago esto? ¿Por qué no solo me permito disfrutar de estos momentos y ya? Seré cuidadoso, no pasará nada. Me detengo en eso. ¿En serio acabo de pensar en eso?
¿O fue la coerción? Cuando dejo de pensar me doy cuenta que Sopphie ya está otra vez frente a mí, agarrándome por la nuca y estrechando sus labios en los míos, lenta y dulcemente, yo le devuelvo el beso excitado. Las manos de
Sopphie van a mi camiseta y la ayudo a quitármela, yo me voy a la suya e intento lo mismo, pero Sopphie me detiene, otra vez.