Capítulo veintisiete.

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Elena y yo teníamos un plan, no sabía si era bueno pero eso no importaba mucho ya que estaba caminando por los pasillos del Hospital.

Él me dijo que podía pasar a su consultorio, pues bueno, allá voy. Solo espero no toparme con Melinda, hablando de ello Lena no resolvía sus problemas con ella.

Tuve que decirle a mi tío que iba llegar un poco tarde, él me dijo que podía demorarme todo lo que quisiese pero llegar más tarde que lo habitual solo sería tener más trabajo porque se me acumularían clientes. Antes que nada le envío un "Ya es hora" a Lena.

No golpeo la puerta antes de entrar, él ya sabía que venía así que no le veo el chiste.

Él está parado muy cerca de la entrada y pego un brinco por el susto ya que no me esperaba verlo ahí, el me mira arqueando una ceja por mi susto pero finjo no notarlo.

Luce totalmente comestible con su ropa de Doctor. Tiene una camisa blanca con corbata bordo, unos pantalones y su bata con apellido impresa en él, no es esa ropita azul con la cual lo había visto una vez, no importa lo cansado que luzca porque igualmente sigue siendo hermoso.

—Buenos días Doctorcito —Digo parándome en su frente. Levanto la mirada hasta él, sus ojos lucen curiosos y también parece no saber como saludarme ya que ayer no quedamos en buenos términos.

Si me besara no me quejaría... tal vez pueda hacerlo yo... No, vamos Michaela. Concéntrate en el objetivo.

—Buenos días Micha.

Quiero reírme por la manera en la cual luce nervioso, él maldito es totalmente adorable.

—Vengo a decirte que olvidemos lo de ayer —El frunce el ceño—. Los dos actuamos mal, ni tu ni yo teníamos por qué golpear a alguien cuando lo nuestro no es solo más que algo casual.

Usar sus palabras no me gustan para nada, pero Lena es la que dijo que debo ser lo más fría en ese aspecto. Hablando de ella justo mi celular vibra y lo saco.

"Recuerda sonreír cada vez que lees los mensajes, eso le causara curiosidad"

Hago eso, sonrío como tonta y ya noto como Ryan se tensa. No voy a usar a Laden como ella quería, prefiero que Ryan sea quien piense de más y use su imaginación con un poquito de mentiras.

—En verdad quiero disculparme por eso —Dice sorprendiéndome—. No quería lastimarte esa vez.

Pero lo hiciste.

—Tranquilo Doctor, no lo hiciste.

Él suspira parece más aliviado.

—Temía que te fueras enamorando de mí —Confiesa—. Porque yo te deje clara mis intenciones, solo que no me di cuenta que lo hice de una manera muy brusca.

Llega otro mensaje y está vez rio por la foto de Jackson dormido, tiene el rostro maquillado y apuesto que Lena se divirtió haciendo eso. Respondo algo de manera rápida y guardo el celular.

— ¿De qué me hablabas? —Pregunto fingiendo que no haberle prestado mucha atención.

—Estas distraída —Tiene cierto tono de reproche y llega otro mensaje de Lena, saco mi celular y el gruñe—. ¿Con quién tanto hablas?

Funciono.

— ¿Yo? —Digo llevándome las manos al pecho—. Oh... con Laden.

Su rostro se torna serio y voltea hasta ir caminando a su escritorio y recostarse en él.

— ¿Quién es él? —Pregunta mirándome fijamente.

—Un ex.

—Mentirosa —Dice rápidamente—. Me dijiste que no tenías relaciones serias.

La Pasión Por EL Chocolate #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora