Enseñame a seducir © Terminado (Libro1)

Engaños

"Podrían engañarme miles,
Pero nunca lo esperé de ti"

-Alisa

Es triste, pero a la vez realista el deseo enorme de hacerlo pagar. No sé si me violó, no sé si solo fui un juego para su propia venganza; pues es notable que el odie a Alex más de lo que yo lo odio a él. Me pregunto algo, ¿por qué el lo odia si fue quién tuvo lo que Alex no pudo tener?, tuvo una infancia bonita, dinero y lujos. Erick se crió con una familia y Alex no tuvo un padre que tuviese con él.

Son cosas que quisiera descubrir. Necesito sacarle todas esas informaciones cuanto ante. Quiero saber si me violó o si sólo fingió hacerlo.

..

Voy de camino a casa de Jorge, puesto que deseaba verlo y decirle que esta noche no vaya a mi casa, ya que no estaré ahí. El pobre se la ha pasado escribiendome el día entero.

Me detengo en su casa y bajo del auto.
Camino lentamente ya olvidando mi tristeza, porque al menos lo tengo a él conmigo. Un chico único, que siempre me ha querido a pesar de todo.

Toco la puerta percibiendo un agradable día con un sol soleado.
Nadie abre, miro a los lados y veo que su auto está aquí, pero también veo el auto de Ashley. Empiezo a sentirme algo mal de pensar lo peor, pero no podría imaginar nada malo. Ellos son amigos.

Toco la manija de la puerta y esta se abre dejándome a la vista de una sala vacía. entro y cierro la puerta, no se escucha nada por aquí.
Subo la escalera y cuando llego hasta la puerta de su habitación decido poner mi oído y escuchar si están ahí.

-¡Esto... no es... correcto, Ashley!

Mi corazón se rompió al instante escuchando sus gemidos.

-¡Te amo, Jorge!

-Yo... Más.

No entré, no tuve valor de ver lo que ya se podía escuchar. Lágrimas cayeron de mis ojos y como pude salí de allí, hasta tropezar en la acera. Me lástima, me quema el alma. ¿Que hice tan mal?.
Me arrastro hasta el auto y como puedo trato de subir. Mi corazón no puede con tanto dolor.

Voy de camino manejando por la carretera, marco el número de mi amiga y lo dejo en altavoz.

-¿Si?

-Gaby... ¡Dios, no sabes lo que descubrí!

Casi no podía hablar con tanto dolor en mi pecho.

-¿Que pasa? ¿por qué lloras?

-Jorge... me engañó- frené de golpe cuando me di cuenta que me iba a llevar un auto que estaba estacionado. El corazón me latía a mil por hora.

-¡Dios, ven Alisa, a casa!, no hables mientras maneja.

Al colgar volví a encender el auto y manejar hasta mi casa. En el camino todo fue llanto.

«No sabes cuanto te quiero Alisa»
«Me vuelves loco»

Maldito hijo de puta. Te puede morir ahora mismo y no me dolerá. ¡Te odio a ti y a todos lo que jugaron conmigo! ¡te odio Jorge, te odio Alex, te odio maldito Erick!

..

Llego a casa y toco la puerta desesperada, una Gaby preocupada me recibe y ante de poder decir algo ella me abraza. Gaby me consuela y me lleva de la mano hasta el sofá, me acuesto en sus piernas y empiezo a sollozar, mientras cuenta lo que descubrí.