Caos en italia

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De haber despegado el avión y Erick actuar como un niño, no me quedó remedio que consolarlo, acariciando su cabello. Pedí un vino y mientras el dormía yo me daba una buena vida.

Habíamos viajado directo, pero el viaje seria largo, al menos dieciséis horas.
En el vuelo Erick durmió como un oso, luego yo dormía, me levantaba a comer y volvía a dormir.

el avión aterrizaba y miré mi reloj, eran las 11: 17 del mediodía.
Yo miré por la ventana y no podía creer que esto fuese tan hermoso. Es simplemente perfecto.


-Bienvenido a Italia, señor Ovens- mencionó la azafata, agachandose hacía él y mostrando parte de sus pechos.

-Gracias señorita Ruiz. Tiene usted una bonita pechonalidad- toce-. Digo, personalidad.

Giré los ojos.

-Gracias mi señor. Para servirle.

Significado (Buscado por google) : Gracias mi amor, estoy para servirte. Estoy para que me comas cuando guste. ¡Llámame bebé!.

Bajamos del avión privado de míster satán. Ya lo esperaba una limusina con cuatros seguridades.

-¿No es exagerado?

-No, soy un hombre muy prestigioso, y por eso debo cuidarme mucho.

Giré los ojos.

Subimos a la limusina y allí había una chica vestida formar, pero su cuerpo era tan exageradamente hecho, que parecía profesora de porno. Rubia, pechos grandes, cintura pequeña, piernas bonitas y todo falso.

-Bienvenido a Italia señor Ovens, me complace presentarme. Soy Julieth Francini, me encargaré de ayudarlo en todo lo referente a la reunión con los italianos.

«Y hacerle una paja también»

-Gracias señorita Francini.

¿Y yo donde quedo?

-Hola, soy Alisa Hills, asistente del señor Ovens- como toda educada, le pasé mi mano, y esta me miró pero luego mostró una sonrisa falsa y me saludó.

-Un placer, señorita Hills.

Luego ella nos dijo que nos alojaríamos en el hotel más importante de Italia.

.
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Alex


-¡Entralo más duro!- me chillaba.

-Espera, ya casi- empujé mas fuerte y sentí el sudor bajar por mi cara. ¡Dios mío!

-¡Ah, mierda si, ya casi!

-¡Abrelo más!

-¡Ahhh muevete que no aguanto!

-¡Listo!

Había logrado poner el maniquí de piedra sobre un cajón.

-Gracias Alex, eres un genio - choqué de puño con Sandra, una antigua amiga de la preparatoria.

-Gracias. Iré a ducharme en la playa, tengo calor.

-Vale, nos vemos más tarde. Recuerda que tenemos una sección esta noche.

-Claro, me parece perfecto.

Me fui corriendo ya que llevaba puesto unos tenis junto una ropa deportiva. Yo estaba alojado en un hotel de miami, vine a tomar una semana de descanso, pero Sandra me había reconocido y me suplicó que fuese el modelo de su vídeo musical, la cual no pude negarme. Esta noche tendría que hacer un papel con ella.

Enseñame a seducir © Terminado (Libro1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora