Alex me esperaba en el jacuzzi, me llamaba con sus dedos y con un poco mas de timidez me acerqué. No entendía que me sucedía, pero aun no tenia total confianza, y eso era algo que debía tratar.
- entra Alisa.
- cierra los ojos- le dije vergonzosa mientras ocultaba mi cuerpo. ¿en serio, alisa? ¡Ahora te pones en ese plan!
-Alisa, acabo de hacerte el amor ¿sabes que te vi completamente desnuda? ¿lo sabes?- asentí con mi cabeza - entonces no temas, te estoy ayudando y creeme, deseo que esto lo aprenda rápido, no quiero que pienses que me aprovecharé de esto, ni nada por el estilo.
Sus palabras me hicieron sentir ofendidas y lo miré con seriedad.
-¿te sientes obligado a ayudarme? Entonces no sentiste nada conmigo, ni placer- de pensar que fui la única que obtuvo placer me frustraba. Sé que es mi amigo y todo, pero no significa que tome esto como si el fuese un robot y no sintiera lo que hicimos.
-¡Por Dios, alisa! ¿crees que soy un maldito robot? Yo sentí placer obviamente, soy un hombre. A ver ¿crees que si no sentí placer se me hubiese parado contigo? ¿o quizás hubiese llegado al orgasmo? El que seas mi amiga no significa que no poseas dotes para lograr una ereccion en mi- giró sus ojos y mi piel se tiñó de roja por completo. No lo había mirado de esa manera, pero el tenia razón.
-okey lo siento.
-Contaré hasta tres, y si no entras no haremos nada, porque desde que se me vaya el deseo, te quedará como el perro de las dos tortas- fruncí el ceño ante esa frase.
-¿Como se quedó el perro de las dos tortas?- el bufó medio aburrido.
-Así como tu trasero.
-¿Como?
-Sin nada.
- ¡ahora si te mato!- no me importó nada, pasé al jacuzzi y me lancé sobre él intentando darle una bofetada de ofensa. Él me tomó de las muñecas y se rió ante mi.
-¡ya tonta! No se puedes bromear contigo. Vamos a encenderte para que no seas aburrida- me besó y esta vez yo me negaba. Me hizo sentir mal con su broma, pero era inevitable no querer entrar en la puerta del placer.
Sus besos nuevamente me encienden, me acorraló en una esquina del jaccuzzi, en donde sentí una parte cómoda para sentarme. Se apartó de mi y se alejó sentándose del otro lado pero dando a mi frente.
-¿estás lista?
-¿para que?- no evité preguntar y el señaló su miembro.
¡oh my god!
- para que te lleves el premio de LMM.
Ahora si que no entendía.
-¿cual es ese premio?- se rió ante mi pregunta.
- La Mejor Mamadora- puse los ojos como platos y le lancé agua.
-¡oye te pasas!
-el placer y el humor van de la mano. claro, si es conmigo.
-idiota.
-¡acercate!
Esta vez obedecí como si fuese una perrita. En esto me estaba convirtiendo alex. Estando cerca de él, Alex mantuvo su mirada sobre mi.
-¿nunca has hecho sexo oral?- negué rápidamente. Una vez tuve la oportunidad de hacérselo a mi ultimo novio, pero ante de que pasara, su madre nos descubrió y desde ahí evité visitarlo. -¿no me mientes?
-no, lo mas que he hecho es besar, además de que una vez estuve a punto de hacerlo con fred y tú nos interrumpiste - le hice recordar ese día la cual me encontró besuqueandome con mi ex en mi cuarto y lo sacó a golpe de allí.
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Enseñame a seducir © Terminado (Libro1)
RomansPara Alisa todo era perfecto hasta que descubre que el chico que ella quiere, odia a las chicas vírgenes y de pocas experiencias sexuales. Desmotivada y decepcionada por completo, acude a su mejor amigo Alex, quién estudia sexología y aparte es...